La autovía AP-4, una de las principales conexiones entre Sevilla y Cádiz, ha recuperado este viernes parte de su operatividad tras los efectos de la borrasca Laurence. Según fuentes del Centro de Gestión del Tráfico de Andalucía, el sentido hacia Sevilla se encuentra completamente abierto, permitiendo la circulación con normalidad. No obstante, en dirección a Cádiz, aún permanece cerrado el tramo comprendido entre Dos Hermanas y Las Cabezas de San Juan, una medida tomada por precaución ante los daños y acumulaciones de agua que aún persisten en la calzada.

El cierre de este tramo se produjo el pasado lunes, cuando las fuertes lluvias asociadas a la borrasca provocaron una acumulación masiva de agua en la vía. En aquel momento, las autoridades decidieron clausurar la circulación en el trayecto entre Dos Hermanas (Sevilla) y Puerto Real (Cádiz) para evitar riesgos a los conductores. Desde entonces, los equipos de emergencia y mantenimiento han trabajado a contrarreloj para restablecer el tráfico lo antes posible, drenando el agua acumulada y evaluando el estado de la infraestructura vial.

El paso de la borrasca Laurence ha dejado una situación crítica en muchas zonas de Andalucía, especialmente en la provincia de Sevilla, donde el temporal ha elevado al máximo la capacidad de ríos y embalses pertenecientes a la Cuenca Hidrográfica del Guadalquivir. Este incremento del caudal ha provocado el desbordamiento de varios arroyos, anegando carreteras y dificultando la movilidad en diversos municipios.

Más allá de los cortes de tráfico, el temporal ha tenido consecuencias trágicas. En Constantina, un municipio de la Sierra Norte de Sevilla, dos personas perdieron la vida después de que su vehículo fuera arrastrado por la fuerte corriente de un arroyo desbordado. Las víctimas, que viajaban en su coche cuando intentaban atravesar la zona anegada, no pudieron escapar a la fuerza del agua. Este suceso ha generado gran conmoción en la localidad y ha reavivado el debate sobre la necesidad de mejorar la señalización y la prevención en puntos de riesgo ante fenómenos meteorológicos extremos.

Mientras tanto, las autoridades mantienen una vigilancia constante sobre el estado de las infraestructuras afectadas y recomiendan a los conductores extremar la precaución, especialmente en zonas proclives a inundaciones. Se espera que en los próximos días, si las condiciones meteorológicas lo permiten, se pueda reabrir por completo la AP-4 y otras vías afectadas por el temporal, devolviendo la normalidad al tráfico en esta importante arteria de comunicación andaluza.