"Hoy no soy tan optimista como la semana pasada". La secretaria general de ERC, Marta Rovira, ha aprovechado su primera rueda de prensa en Barcelona para lanzar una seria advertencia a los socialistas sobre las expectativas de investir a Salvador Illa presidente de la Generalitat. Rovira ha avisado además que, si a final de julio no se ha alcanzado un preacuerdo, se levantarán de la mesa de negociación e invitarán a los socialistas a explorar "otras mayorías posibles".

La secretaria general, que lidera el equipo negociador de Esquerra, ha confirmado además que ya ha solicitado un encuentro presencial con el presidente Pedro Sánchez para abordar su principal objetivo en estas negociaciones: una "financiación singular" para Cataluña. Rovira ha añadido, en este sentido, que el "punto cero" para llegar a un acuerdo con el PSC es que el Gobierno dé cumplimiento a lo pactado en la investidura de Sánchez.

Los socialistas, ha advertido, "han agotado su crédito" con ERC, por lo que cualquier acuerdo para la investidura de Illa pasa en primer lugar por el cumplimiento de lo pactado el pasado verano. Una carpeta en la que pesa especialmente la condonación de la deuda del FLA. En este contexto, Rovira ha reconocido que "no tengo cita con Sánchez". Pero ha defendido la necesidad de "concretar reuniones de forma presencial" porque "esto aporta calidad y más confianza en negociaciones".

Investidura catalana

La falta de concreción en lo ya pactado con el PSOE es uno de los elementos que lastran la negociación para la investidura catalana, ha reconocido Rovira, quien ha señalado además que faltan avances en las negociaciones con el PSC. La republicana ha dejado claro además que no se dejarán "arrastrar" a una negociación "de último minuto".

"Tenemos que saber si hay agua en la piscina", ha argumentado. "Si a final de julio no vemos fundamentos claros lo que haremos es levantarnos de mesa de negociación" ha advertido. "No queremos reproducir el escenario negociación último minuto" al que los tiene acostumbrados el PSOE, ha lamentado la republicana. Tampoco que "se nos atribuya la responsabilidad" de que Cataluña tenga que ir a nuevas elecciones".

Así, Rovira ha reconocido que las negociaciones avanzan a buen ritmo en el ámbito de defensa del catalán. Pero ha lamentado que no ven avances suficientes en financiación ni en el reconocimiento del derecho a la autodeterminación, que siguen manteniendo sobre la mesa. Tampoco en materia de políticas sociales. "Tenemos la sensación de que los únicos socialistas somos la gente de ERC" ha ironizado.

En este contexto, Rovira ha reiterado que "si a finales de julio no tenemos un preacuerdo en aspectos que nos parecen fundamentales" invitarán al PSC a explorar "otras mayorías". Opciones que ERC insiste en que también permitirían armar la mayoría absoluta necesaria para la investidura, aunque son inviables políticamente hablando, puesto que los republicanos se refieren a sumar los votos de PP y Vox, o bien conseguir el apoyo de Junts.