La economía catalana crecerá un 2,5% este año y un 2,4% el próximo, por encima de la media española. Y lo hará impulsada por el mayor dinamismo del turismo y la inversión, según el informe de situación presentado este miércoles por la Cambra de Comercio de Barcelona. Pese a ello, la entidad se sumó ayer al coro de voces que advierten de la necesidad de poner freno al crecimiento turístico.

Lo hizo el mismo día en que Turismo de Barcelona anunciaba que abandona el lema que ha acompañado la promoción de la ciudad desde 2009. Del 'Visit Barcelona' al 'This is Barcelona' un cambio argumentado en la celebración de la Copa América de vela en la Ciudad Condal y que ejemplifica también la sensación de saturación turística en la capital catalana. Una idea que ya avanzaba el teniente de alcalde de Economía, Jordi Valls, hace unas semanas, al presentar la plan municipal para descongestionar las zonas más masificadas de la ciudad.

"Queremos promocionar la Barcelona real, no la de postal" argumentaba por su parte el gerente de Turisme de Barcelona, Mateu Hernández, al presentar su nuevo lema. El consorcio público-privado destinado a la promoción turística de Barcelona se suma así al debate sobre la necesidad de revisar un turismo masificado en la capital catalana. "Dejamos de promocionar la ciudad en genérico" apuntaba, para poner en valor sus atractivos más allá de la Sagrada Familia o el Gótico.

Crecimiento infinito

En términos similares se expresaba el jefe del Gabinete de Estudios Económicos de la Cambra, Joan Ramon Rovira, cuando advertía este miércoles de que el turismo "no puede tener un crecimiento infinito". Rovira sugirió una "ralentización" del sector con una apuesta por "la mejora de los precios y los salarios" en este sector. También una redistribución del turismo que permita rebajar la presión sobre Barcelona en favor de otras zonas de la geografía catalana, puesto que el turismo sigue siendo uno de los grandes motores de la economía catalana.

Lo confirman los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) que confirman este junio como el mejor de la historia en términos de ocupación hotelera en Cataluña. Un total de 2.304.520 de personas se alojaron en hoteles catalanes ese mes, según los datos provisionales de Coyuntura Turística Hotelera publicados por el INE.

Se trata de un 0,53% superior a la del año anterior y un 0,18% si se compara con el mismo periodo de 2019, cuando se alcanzó el récord de 2.300.304 de clientes. También las pernoctaciones llegaron al pico más alto del mes de junio, con 6.928.356, un 8,5% más que en el 2023 y un 1,09% que en el 2019.

Rechazo al turismo

Cifras que contrastan, o explican, la oleada de turismofobia que recorre Barcelona. El turismo es el principal problema de la ciudad para el 13% de los barceloneses según el barómetro municipal, 6,7 puntos más que en el sondeo anterior. Un descontento que se escenificó en la manifestación celebrada hace dos semanas bajo el lema "Decrecimiento turístico ya" y que reunió a unas 3.000 personas según la Guardia Urbana -20.000 según la organización- siguiendo la estela de las celebradas en Palma (Mallorca), Málaga o Canarias

El Informe de Coyuntura Catalana del tercer trimestre del 2024, elaborado por la Cambra de Comerç de Barcelona y AQR-Lab de la UB, recuerda sin embargo que el turismo es uno de los motores de la economía catalana. Los indicadores hasta mayo del 2024 analizados por la Cambra siguen mostrando un fuerte dinamismo en comparación con el año anterior, poniendo de manifiesto la consolidación del turismo como uno de los sectores más importantes de la economía catalana.

En concreto, el número de viajeros en hoteles hasta mayo es un 4,6% superior en relación con el mismo periodo del 2023, con un aumento del gasto medio por turista extranjero (5,1%). Además, también pone en valor que el incremento de la demanda desde la Covid-19 está siendo más intensa que la oferta, dado que la ocupación de las habitaciones hoteleras en Cataluña se ha situado en el 64,6% hasta mayo del 2024 (61,8% durante el mismo periodo del 2019). Este fenómeno está contribuyendo al incremento de la facturación media por habitación ocupada, que hasta mayo del 2024 se ha situado un 27,8% superior en comparación con el 2019.