Este miércoles, el alcalde de Badalona, el popular Xavier García Albiol, denunciaba la detención de un delincuente multirreincidente en su ciudad. El sujeto acumulaba 57 detenciones a sus espaldas. Un día antes era el alcalde de Lleida, Félix Larrosa, quien lanzaba la alerta con el ejemplo de un hombre detenido en 42 ocasiones. No son los primeros. También el alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, ha reclamado insistentemente medidas contra este tipo de delincuentes, que generan especial alarma social.

El Grupo de Delincuencia Urbana de la comisaría de Mossos d’Esquadra de Badalona detuvo el año pasado a 444 multirreincidentes en esta ciudad metropolitana que acumulaban un total de 4.299 antecedentes.

En quince días de agosto, la Guardia Urbana de Lleida detuvo a 32 personas, entre ellas tres menores, de las que 23 son reincidentes. Uno de ellos ha sido arrestado  con anterioridad en 43 veces, otros en 28 y 27 ocasiones y dos de ellos 17 veces. Solo uno de los 32 detenidos ha ingresado en prisión, un hombre por un apuñalamiento.

"Estamos hartos porque el esfuerzo que hace la Guardia Urbana por controlar y hacer que en Lleida, quien la hace, la paga, no viene acompañado por actuaciones más decididas por parte del entorno normativo o legislativo que tenemos", se lamentó Larrosa. El primer edil de Lleida avanzó además su intención de buscar la complicidad de otros alcaldes en una batalla en la que reclama la complicidad tanto del mundo judicial como del poder legislativo.

El hombre detenido 43 veces en Lleida acumula detenciones por presuntos delitos de robo, lesiones, atentado contra los agentes de la autoridad, daños, tráfico de drogas, amenazas, contra la seguridad del tráfico o violencia de género.

El ejemplo de Barcelona

Larrosa recorre así el mismo camino emprendido por el Ayuntamiento de Barcelona, también gobernado por el PSC. Según los datos aportados por la Junta de Seguridad local del pasado febrero, en Barcelona se había detectado a 526 multirreincidentes, a los que se les imputa un total de 6.169 delitos, principalmente hurtos y robos violentos en la calle. Los 5 multirreincidentess más activos en la ciudad acumulan un total de 228 antecedentes.

Los 5 multirreincidentes más activos en de Barcelona acumulan un total de 228 antecedentes delictivos

El pasado mayo, Collboni presentó el Plan de seguridad 2024-2027, con la multirreincidencia, de nuevo, en el centro de sus preocupaciones. El jefe de la Guardia Urbana de Barcelona, Pedro Velázquez, advirtió entonces que los ladrones multirreincidentes son uno de los desafíos de la policía local de la capital catalana. "Nuestro reto como policías es la inteligencia policial. Poner a los policías en el sitio, momento e intensidad adecuada. Tenemos que afinar mucho en este número de personas que están reincidiendo o multirreincidiendo".

Reforma del Código Penal

Con estas cifras sobre la mesa el Colegio de Abogados de Barcelona (ICAB) presentó el pasado marzo una propuesta de reforma del Código Penal, elaborada conjuntamente con expertos de los colegios profesionales de Madrid y Málaga, para combatir la multirreincidencia. "Uno de los principales impedimentos a los que se enfrentan las autoridades policiales y judiciales para luchar contra la multirreincidencia es la reforma del Código Penal que entró en vigor en el 2022, a raíz de una sentencia del Tribunal Supremo" advertía el estudio.

Fue entonces cuando se fijó el umbral de los 400 euros de material sustraído para acumular sentencias. Para obtener el importe de todo el material sustraído deben consultarse las sentencias, lo que limita y obstaculiza su aplicación en la práctica, señala el estudio. Por ello, proponen modificar el Código Penal para imponer una pena de prisión de uno a tres años a las personas que hayan sido condenadas antes por tres delitos de hurto sin tener en cuenta la suma del valor de los bienes sustraídos.

Con esta medida, apuntaban, "será la defensa quien tenga que probar la irrelevancia de los hurtos anteriores y no el juez". También proponían que el robo de los móviles pase de ser considerado delito leve a un delito menos grave al margen del importe del valor de ese dispositivo. Esta medida se traduciría en un endurecimiento de las penas en casos de sustracciones de dispositivos móviles.