"Recuperar la normalidad institucional" en la Cataluña post-procés es una de las máximas de Salvador Illa desde que llegó a la Presidencia de la Generalitat. El argumento para explicar las bondades de los indultos, la Ley de amnistía o la nueva financiación singular pactada con ERC. Pero el independentismo se resiste a entrar en esa normalidad. Especialmente Junts, partido que ostenta la Presidencia del Parlament. Desde esa atalaya ha promovido Josep Rull una conmemoración institucional de la consulta de 9N, una década después.

La consulta independentista del 9N "es patrimonio inmaterial de Cataluña", ha asegurado Rull en la clausura del acto, para justificar su celebración en el Parlament, pese a la oposición de la mayoría de la cámara. "La sede de la soberanía tenía que acoger este acto de celebración de uno de los elementos que nos provocan más orgullo colectivo" añadía para regocijo de los presentes, diputados y ex cargos de Junts, ERC, la CUP y Convergència.

Mientras, en el Palau de la Generalitat, Salvador Illa recibía al hijo de Josep Tarradellas, referente de su proyecto político por contraposición a Lluís Companys y Francesc Macià, efusivamente recordados por los independentistas.

Espejismo de unidad independentista

La conmemoración de este martes servía así para uno de los objetivos que se ha trazado Rull en su mandato: recuperar la unidad independentista perdida. Consciente de que la Presidencia del Parlament es la única institución que retiene el independentismo frente a la omnipresencia del PSC, Rull no desaprovecha la oportunidad de recordar la gestas del procés que se ha convertido en el único punto de encuentro de Junts, ERC y la CUP. Lo hizo el 1 de octubre, con una declaración institucional igualmente rechazada por la mayoría, del pleno, pero avalada por la mayoría de Junts y ERC en la Mesa. Y lo ha repetido este martes, a cuenta del 9N.

El Govern de Artur Mas fue el responsable de organizar esa primera consulta independentista, el 9 de noviembre de 2014. Un referéndum presentado como una "consulta popular no refrendaria", que pese a todo fue suspendida por el Tribunal Constitucional. Fue el propio Mas quien dio oficialidad a esa consulta, compareciendo desde el Palau de la Generalitat para dar fe de los resultados, por supuesto a favor de la independencia.

"La voluntad de pasar de la autonomía a la soberanía sigue absolutamente vigente" ha asegurado el propio Mas, protagonista del acto junto a Rull y Carme Forcadell, a la sazón presidenta de la Asamblea Nacional Catalana (ANC). Una intervención en la que Mas se ha mostrado convencido de que el independentismo "volverá" si sus adalides recuperan "el sentido del proyecto" que él abanderó en su momento con el eslogan del "derecho a decidir".

También Forcadell ha defendido el 9N como "una gran victoria" que puso las bases del posterior referéndum del 1-O. Aunque lo ha hecho recordando que, en el caso de la consulta liderada por Mas, "sabíamos que no era un referéndum y que el resultado no era vinculante", por eso "el Govern hizo los preparativos sin que el Gobierno -de Mariano Rajoy- pusiera demasiados escollos".

Rechazo de la mayoría del Parlament

El acto ha contado con el rechazo frontal de los partidos no independentistas, que gozan de una amplia mayoría en el Parlament -74 de los 135 diputados- pero están en minoría en la Mesa que gobierna la cámara. La portavoz del PSC, Elena Díaz, ha recordado que los socialistas ya se opusieron en la Mesa del Parlament a celebración institucional para conmemorar el 9N y ha dejado claro que ningún diputado del PSC asistiría al acto. "No tenemos inconveniente en que los partidos que lo impulsaron hagan un acto conmemorativo pero nos oponemos a que sea acto institucional" ha señalado.

Más contundente se ha mostrado el portavoz del PP, Juan Fernández, quien ha señalado al Govern de Salvador Illa por transigir, a su juicio, con esta celebración institucional. "La Cataluña de Illa es la que celebra en el Parlament el 9N, un acto ilegal; la que sigue dando oxígeno a la agenda nacionalista que rechazaron los ciudadanos el 12M" se ha lamentado el popular.