Salvador Illa no cree en la amnistía a los líderes independentistas y se niega a aplicarla en el ámbito político. Lo dice el principal destinatario de la medida de gracia, Carles Puigdemont, que interpreta así la renuencia del presidente de la Generalitat a mantener un encuentro presencial con él. Illa se encuentra en Bruselas este miércoles para participar en la reunión del Comité de las regiones en el marco de su primer viaje oficial como presidente de la Generalitat. Pero ha evitado aprovechar este viaje para reunirse con Puigdemont, como sí ha hecho con Jordi Pujol, José Montilla, Artur Mas, Quim Torra y Pere Aragonès en su calidad de ex presidentes catalanes.

El actual inquilino del Palau de la Generalitat no quiere una imagen con el líder del 1-O antes de que haya sido exonerado por la justicia de sus responsabilidades penales. Pero esa actitud esquiva es tanto como "boicotear la amnistía" para Puigdemont. "Ni él ni su partido querían la amnistía. Ni la judicial ni la política, por eso se niega a aplicarme políticamente una ley que ya está en vigor desde hace meses" se ha lamentado el líder de Junts este miércoles.

Ni Illa ni su partido querían la amnistía. Ni la judicial ni la política" asegura Puigdemont

Queja a la que Illa ha respondido recordando que fue el PSOE, con el concurso de los 19 diputados del PSC, el que impulsó la Ley de amnistía en el Congreso. El president ha insistido además en "le hubiera gustado reunirse" con Puigdemont en Cataluña y que ese encuentro se producirá "cuando llegue el momento".

Mensaje recibido

"Su actitud es todo un discurso, queda perfectamente claro" le respondía Puigdemont, al tiempo que señalaba que Illa se encuentra "a escasos kilómetros de donde vivo desde hace siete años como consecuencia de la represión que él y su partido apuntalaron con entusiasmo".

Para el líder de Junts, que el Suprem "boicotee" la amnistía "es una anomalía", pero que lo haga que lo haga el president de la Generalitat, miembro de un partido que "se supone que cree en la necesidad de la amnistía, es inexplicable". A juicio del independentista, la negativa de Illa a mantener un encuentro con el president fugado "solo se explica por la resistencia política a aplicar la amnistía". Algo que "no depende de los jueces" recuerda Puigdemont.

En este contexto, el líder de Junts advierte que "el mensaje está claro y no insistiremos. No es que no toque, es que no quiere". De nada ha servido que Illa insistiera en su "máximo respeto y consideración institucional a Puigdemont en su triple condición" de diputado del Parlament, de máximo responsable de Junts y de ex presidente de la Generalitat.