Desde hace semanas corre el "runrún" en el Poder Judicial sobre cuál será el plan de Pedro Sánchez para ellos si finalmente alcanza La Moncloa. El sector conservador reconoce estar preparándose porque creen que el presidente en funciones quiere renovar el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) "cueste lo que cueste" y temen la activación de una doble vía: rebajar la mayoría parlamentaria e intentar escoger al grueso de los 20 vocales evitando la actuación del Senado por lo que se librarían así de la cuota del PP.

"Si forma Gobierno Sánchez, una de las primeras cuestiones a resolver será renovar el CGPJ en la forma que sea", expresa un vocal. "Yo no dudo que sea una de las primeras cosas que haga", confiesa otro. "Si abren el melón de modificar la ley, esto puede entrañar muchos problemas", aseguran.

El rumor ya corría en los corrillos judiciales cuando fue notificada la sentencia del Tribunal Constitucional sobre la limitación de funciones a los miembros del Poder Judicial este mes de octubre. Un párrafo en la página 34 hizo saltar las alarmas: “No existe una definición constitucional excluyente del sistema de nombramiento de los vocales del CGPJ, siendo posible, dentro del marco constitucional, que la propuesta para su nombramiento proceda en todo o en parte del Congreso o del Senado”.

Esta redacción de la sentencia que fue aprobada por los siete progresistas del Constitucional y en contra de los cuatro conservadores, abre la puerta a un cambio en la Ley que regula el Poder Judicial para que no se repartan las designaciones de forma equitativa como hasta ahora entre las Cámaras. "No era el tema a resolver", revelan en el CGPJ, "sin embargo se descuelga con este 'dicho sea de paso' que presagia lo que va a hacer el Gobierno".

Para las fuentes consultadas en el sector conservador del Consejo, el Tribunal que dirige Cándido Conde-Pumpido está poniendo la alfombra sobre la que ahora Sánchez puede explorar un nuevo camino para renovar el órgano sin contar con el PP.

El Poder Judicial debía haberse renovado en 2018 a través de un pacto entre los dos partidos políticos que más miembros tienen en el Parlamento para lograr los tres quintos que tradicionalmente se han entendido que pide la Constitución. Pero resulta que el texto fundamental sólo blinda que se elijan con ese quórum los ocho (de los veinte totales) que deben ser del turno de juristas de reconocido prestigio.

"El Consejo General del Poder Judicial estará integrado por el Presidente del Tribunal Supremo, que lo presidirá, y por veinte miembros nombrados por el Rey por un período de cinco años. De éstos, doce entre Jueces y Magistrados de todas las categorías judiciales, en los términos que establezca la ley orgánica; cuatro a propuesta del Congreso de los Diputados, y cuatro a propuesta del Senado, elegidos en ambos casos por mayoría de tres quintos de sus miembros", dice literalmente la Carta Magna.

Sánchez podría aventurarse a cambiar la redacción de la citada Ley Orgánica del Poder Judicial (LOPJ) que ahora está escrita tal que así: "cada una de las Cámaras elegirá, por mayoría de tres quintos de sus miembros, a diez Vocales, cuatro entre juristas de reconocida competencia con más de quince años de ejercicio en su profesión y seis correspondientes al turno judicial". Podría volver a redactarla para reducir a la mayoría cualificada sólo los que se eligen por el turno de juristas, es decir ocho. Con los otros doce nombres podría aplicar una rebaja en cuanto al número de diputados para elegirlos (de forma que excluya del pacto al PP) y lograr que sólo se haga a través del Congreso donde la posible suma de la investidura le dé para hacer los cálculos.

"La Constitución deja al margen a las 12 elegidos por el turno de los jueces porque está pensando en que sea los propios jueces los que elijan", aclara otra fuente en el Supremo. Lo cierto es que si se exploraran estas vías por primera vez la izquierda podría copar una amplia mayoría del CGPJ quedándose con 16 nombres para decidir en la Cámara Baja.

“En cuanto al modo de renovación del CGPJ, si parcial o general, nada dice al respecto el artículo 122.3 CE, lo que significa que la renovación en su integridad del CGPJ es una opción legítima del legislador orgánico -es, de hecho, la fórmula por la que ha optado el legislador desde el principio-, no siendo inconcebible algún sistema de renovación del órgano por partes”, expresa la sentencia del Constitucional. La ponente María Luisa Balaguer ha dejado negro sobre blanco que no es "inconcebible" un cambio en la manera en la que se renueva el órgano de gobierno de los jueces y dice explícitamente que podría hacerse "por partes".

La mirada vigilante de Europa

Las cábalas son variopintas. Algunos ven a Sánchez "capaz de todo" y otros creen que no se atreverá a ir contra los postulados de Europa. La reforma para rebajar las mayorías en el Congreso ya estuvo sobre la mesa en 2021, pero terminó aparcada precisamente ante la mirada vigilante de la Unión.

"Sería tan contrario a los estándares europeos... iría en contra de las sentencias del Tribunal de Justicia de la Unión Europea y del Tribunal de Derechos Humanos sobre la separación de poderes. Sería asemejarse a Polonia o Hungría", expresan en el CGPJ. "Un verdadero disparate mientras él [Pedro Sánchez] es el presidente de turno de la UE", añaden.