El comandante de la Guardia Civil detenido en el 'caso Koldo', Rubén Villalba, grabó una llamada con el empresario Víctor de Aldama en la que éste le comenta que se sabe investigado. La grabación es del 15 de noviembre de 2023 cuando todavía la Fiscalía Anticorrupción investigaba en secreto una red de corrupción vinculada a la compra de mascarillas en el Ministerio de Transportes. En el centro estaban Aldama y el asesor del entonces ministro Koldo García, a quien parece que llaman "el amigo".

En este audio, al que ha tenido acceso El Independiente, el supuesto comisionista de la trama requirió al guardia civil que se enterara si la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de la Policía Nacional le estaba investigando. La realidad era distinta, quienes iban tras él eran los agentes de la Unidad Central Operativa (UCO) del Instituto Armado que terminaron arrestándolo tres meses después. Luego, hicieron lo mismo con Villalba a quien ahora acusan de estar a sueldo de los corruptos.

Víctor de Aldama: "Lo mío muy rápido y a ver cómo te lo puedo decir por aquí. Hay uno que me dice que hay algo de tus amigos, de los azules"

Rubén Villalba: "¿Ah, sí?"

Aldama: "¿Tú conoces a una unidad que se llama UDEF?"

Villalba: "Pero eso son tuyos, la UDEF es policía Nacional"

Aldama: "Por eso digo, de los azules"

Villalba: "No ahí nosotros no conocemos ni tenemos vínculos ni nada, no sé absolutamente nada, ¿De acuerdo?"

Aldama: "Vale, pues me dicen que hay algo sobre el amigo [Koldo] que tú sabes quién es el amigo y como yo estoy mucho tomando café con amigos pues que podría haber algo"

Villalba: "Pues no tengo ni idea eh, además llevo semanas desconectado. No sé absolutamente nada de lo que me cuentas"

Ambos se despiden, pero el comandante deja claro que está grabando, si bien se desconoce la intención o para quién lo graba: "Bueno finalizada la llamada con Víctor Gonzalez Aldama, ahí vemos lo que ha comentado".

En un nuevo informe que la Unidad Central Operativa (UCO) acaba de incorporar en el sumario de la Audiencia Nacional, los agentes defienden que Rubén Villalba cobraba unos 2.000 euros mensuales de los empresarios para proporcionarles teléfonos seguros y protección. Llegaron a hacerle un barrido en su coche y lo ficharon como colaborador en los Servicios de Información, para los que Villalba trabajó prácticamente toda su carrera.

En el momento en el que se produce la llamada, él está apunto de marcharse a Venezuela como agregado de Interior. Pero semanas después de que estallara esta operación, la UCO detuvo también a Villalba. Ahora le acusan de formar parte de la red criminal.