Para Luis María Cazorla, escribir una novela que no fuera histórica era todo un reto. Este abogado del Estado, letrado de las Cortes, catedrático y académico ha escrito seis libros históricos (el séptimo en camino), pero este año se ha estrenado con Pasión tardía, una novela basada en una historia con dosis de realidad, que se adentra en el madrileño barrio de Tetuán. Cazorla, que habla con El Independiente, se confiesa sorprendido de la reacción favorable que ha tenido su texto entre el público.
Con este currículum abultadísimo, ¿de dónde nace la afición de escribir novelas?
Bueno, eso se desarrolla conmigo. Efectivamente he tenido una carrera jurídica muy intensa, pero no ha impedido que desde muy jovencillo empezara a escribir relatos, cuentos, alguna novela corta en pequeñas editoriales, hasta que hace 10 o 12 años escribí una serie de novelas históricas ambientadas en el protectorado de Marruecos y de la II República, y ahora esta que es totalmente distinta.
Para mí, esta novela es un reto porque después de dedicar casi una década a seis novelas históricas, escribir algo tan intimista y tan distinto a lo anterior era un reto.
¿En qué momentos escribe? En verano le da por escribir o cómo...
No, no, todos los días. Todos los días soy muy madrugador. No digo a la hora que me levanto porque se asusta. También me duermo muy pronto. Y todos los días a esas horas, muy muy temprano, escribo un libro jurídico, el manual de Derecho Financiero. Tiene 24 ediciones. También escribo literatura o leo. Lo hago a primeras horas de la mañana y con continuidad. No en tiempo de verano solo, sino prácticamente todos los días.
La mayor parte de la novela transcurre sobre España en la posguerra. ¿Qué elemento destacaría en la actualidad sobre aquella época?
Bueno, la novela efectivamente arranca en los años 40, es la evolución de una persona en un ambiente determinado y en un barrio, el barrio de Tetuán en Madrid. Se va transformando, va llegando más gente y pone de manifiesto la influencia en el desarrollo de una persona de una mala infancia. Y como, por otra parte, va buscando salidas, escapatorias, como su afición a los animales o a los cines de barrio... Es decir, describe una época muy limitada en medios, con muy poco horizonte, muy cerrada en sí misma en la que todavía no ha llegado, sobre todo, la inmigración. Era un ámbito, si cabe, pueblerino.
Dolores, el personaje principal, es capaz de encontrar la felicidad en pequeñas cosas en el cine, en su perro... ¿Ahora la gente necesita más para ser feliz o en esa época la vida se veía distinta?
La vida se veía muy distinta. No hacía falta para encontrar entretenimientos o intentar escapar de la monotonía tanto como hoy. A mí esta novela se me ocurrió leyendo una noticia en un periódico. Una señora que habían encontrado muerta porque se alimentaba de lo que en un restaurante debajo de su casa le llevaba todos los días, dejó de pedir comida durante tres días y la encontraron muerta. Como digo, había muchos menos medios, una sociedad mucho más pobre, mucho menos hedonista y los entretenimientos eran mucho más sencillos. Ir al cine de barrio, su perrito Bambi, escapadas con alguna peña de amigos... Hoy en día, la juventud tiene más posibilidades y puede escapar de la monotonía.
Los personajes de la novela trabajan para vivir bien y son razonablemente felices. ¿Cree que unas expectativas humildes de la vida ayudan a llevar una vida más tranquila?
Una de las claves de la felicidad, del equilibrio personal, es no estar permanentemente deseando cosas. Efectivamente, las expectativas eran menores y a veces se encontraba el bienestar en algo menos exigente que hoy en día. Porque por ejemplo ella era feliz en el cine yendo a una sesión del cine de barrio. Ella no es que sea feliz, sino que en una larga temporada de años se entretiene, son sus escapatorias dentro de un ambiente muy pobretón hasta que, por eso se llama la novela Pasión tardía, descubrió algo que no había descubierto en su vida. Entre otras razones por la educación pacata y por cómo se entendía en aquellos años la sexualidad, que es tanto sentimental como el amor físico. Es el gran descubrimiento de su vida que le hace ser otra persona durante una temporada.
Profundiza en la vergüenza y en la vulnerabilidad que Dolores siente a la hora de tener relaciones en un hombre, no sé si cree que esto es una barrera de la edad o de la época
Bueno, era sobre todo una barrera de la época. Yo creo que esas relaciones del hombre con la mujer y de la mujer con el hombre para hablar de ese aspecto parcial de las relaciones se puede tener a cualquier edad. La represión que ella sufre o sus limitaciones en el terreno sexual nacen de una educación o de un ambiente en donde se veía casi todo lo que tiene que ver con el sexo como algo pecaminoso y de lo que había que huir. Claro, hasta que lo descubre y vive uno de los momentos más felices de su vida.
Describe también mucho Madrid. ¿Está ambientada en la capital porque es un lugar especial para usted o simplemente es el lugar que más conoce?
No, es que como le digo esto arranca de una noticia de un periódico porque esto ocurrió en el barrio de Tetuán y es un barrio que conozco y he estudiado y que me he ocupado de recorrer sus calles para ambientar la novela. Además, es un barrio, sobre todo la calle Bravo Murillo, que tenía muchísimos cines de barrio. Es decir, confluían unas circunstancias que me llevaron a ambientarlo en Madrid. Por ejemplo, la siguiente novela histórica que está escrita y integrada ya está ambientada en Las Palmas de Gran Canarias porque fue el vuelo del general Franco con el Dragón Rapide y todo lo que ocurrió cuando llegó de Tenerife a Las Palmas. Así que depende de la historia que quieras contar. Es la primera novela que yo ambiento en Madrid.
Más allá de Dolores, que ya nos ha contado de dónde sale, no sé si con el resto de personajes también piensa en alguien en concreto o los va creando con la imaginación
Los va pidiendo la historia. No pienso nada en concreto. Cuando empiezo a escribir una novela, incluso una novela histórica, trazo mimbres, estudio con mucho detalles los personajes y después empiezo a escribir cobrando vida. De todos ellos el único personaje real que ha existido, aunque no sé cómo se llamaba en la noticia del periódico, ha sido Dolores. Que yo de Dolores sé el hecho de que murió porque el bar de abajo dejó de suministrarle la comida y lo demás me lo invento. Esto sugiere en mi mente por vía imaginativa relaciones, situaciones... La creatividad.
¿Ha ido al bar en cuestión en el que Dolores comía?
Sí, porque en la calle Bravo Murillo en el tramo que yo describo había casas de comida de esa naturaleza y bares y todavía queda algún residuo. Después también me he documentado mucho, de la historia de los cines de barrio de Bravo Murillo, fotos de bares de la época. En el fondo hay un notable trabajo de documentación, no sólo de imaginación.
Los padres de Dolores apenas necesitan ahorros para que el primer negocio eche a andar. ¿Cree que la sociedad actual necesita recuperar algo de esa sociedad en la que usted ambienta la historia?
Bueno, yo creo que esa sociedad tenía cosas buenas, pero seguramente ahora el bienestar es muy superior, la libertad es muy superior, el desarrollo personal... No hay nada negro ni blanco, esa sociedad era mucho más austera, que apreciaba los pocos medios que tenía mucho más, se esmeraba en hacer las cosas mejor dentro de su ámbito y todo eso sí sería bueno que se recuperara.
La obra finaliza con la irrupción del Covid-19. Como jurista, ¿cree que la pandemia terminó de forma correcta en cuanto a responsabilidades o ha faltado alguna revisión interna para saber cómo actuar en otra posible pandemia?
Yo creo, sin entrar en detalles porque para al final la Academia de Jurisprudencia precisamente elaboró un libro poniendo de manifiesto deficiencias jurídicas, lo que sí que ha demostrado no solamente el Covid, sino la horrible tragedia que hemos vivido en la Comunidad Valenciana es que nuestro ordenamiento jurídico no es bueno, no tiene mecanismos adecuados para reaccionar adecuadamente. Sí que hay que revisar aspectos de este ordenamiento jurídico y, por otro lado, sí que hay que aumentar los mecanismos de coordinación entre autoridades públicas. Eso se puso de manifiesto con el Covid, y desgraciadamente también se está poniendo de manifiesto con la Dana.
Para terminar le iba a preguntar si iba a escribir otra novela, pero ya me ha adelantado que tiene otra entregada...
Sí. Tengo la séptima de la serie histórica que, además, es una novela ambientada en el principio de la Guerra Civil y que entre otros personajes históricos sale el general Franco y sale Hitler porque he profundizado en otro personaje histórico que era el líder nazi de Tetuán que tiene un papel importante en la obtención de la primera ayuda alemana para Franco. Está entregada incluso a la editorial.
¿Y alguna novela más que no sea histórica?
Sí, tengo alguna en la cabeza, que está tan embrionaria que no me atrevo a mencionarla.
Te puede interesar
Lo más visto
- 1 Rebeldes sirios toman Alep en un golpe contra Rusia e Irán
- 2 Los hermanos Menéndez: el asesinato que conmocionó a EEUU puede darse la vuelta
- 3 Trump lanza un mensaje a Putin con Kellogg: no dejará a Ucrania
- 4 El casero deberá renovar el contrato o indemnizar al inquilino
- 5 El crimen de la finca El Carrascal: ¿quién mató al cazador Francisco Javier?
- 6 La amenaza de imputación de la jefa de Gabinete de Óscar López en la Moncloa enturbia la apertura del congreso del PSOE
- 7 Cómo retomar el sexo después de superar una crisis con tu pareja
- 8 Las 10 Mejores Freidoras de Aire, Estas son las mejores Air Fryers del momento (2024)
- 9 La DGT dará dos puntos más en el carnet si cumples este requisito