Pese a que no ha concluido el proceso interno emprendido por el Comité de Garantías de Vox contra el exportavoz valenciano Juan Manuel Badenas, por presuntas irregularidades en contratación pública desde el Ayuntamiento de Valencia a raíz de unos audios filtrados en los que él mismo lo reconoce, el partido ya se sitúa en el siguiente escenario, valorando la gravedad de los hechos. Sobre todo, una vez que, con esa investigación política vigente, la pareja de Badenas, también concejala de Vox, Cecilia Herrero, ha dado el paso de darse de baja de militancia y de denunciar actitudes de "acoso" por parte de la dirección nacional. Un movimiento, en definitiva, que no acontecería si las perspectivas que maneja Badenas fuesen buenas.

La previsión de fuentes nacionales de la formación de Santiago Abascal avistan que ambos concejales seguirán en el consistorio valenciano y se integrarán entre los no adscritos, en vista de otros precedentes que han ocurrido en el partido, caso del grupo parlamentario en el Parlament de Baleares. Que no entregarán el acta de concejal. Algo que les perjudica directamente, dado que, de cuatro representantes, Vox quedará reducido a la mitad. No se las pueden arrebatar, porque son propiedad del representante electo según la Ley Electoral. Además, provocará que el partido reduzca previsiblemente sus competencias en favor del PP, dado que las de Badenas ya han sobrecargado de trabajo a José Gosálbez y Mónica Gil. Ya ocurrió con el puesto de segundo teniente de alcalde, algo que Vox ha perdido.

La inhabilitación cautelar de Badenas por parte de Vox hizo a la alcaldesa popular, María José Catalá, mover ficha y reestructurar el Gobierno. Gosálbez incorporó Empleo, Formación y Emprendimiento, a las competencias de Mayores, Sanidad y Consumo. Se añadió la vicepresidencia de Valencia Activa, la entidad con la que Badenas habría incurrido en irregularidades para beneficiar al Instituto Mediterráneo del Desarrollo Sostenible (Imedes), donde trabaja el marido de la delegada del Gobierno, Pilar Bernabé. Además, por su papel de portavoz adjunto de Vox, será quien asuma la portavocía una vez se confirme el expediente a Badenas. Gil recibió la gestión de Parques y Jardines y Espacios Naturales, que tendrá que ejercer junto a las competencias de Playas, Familias y Fiestas y Tradiciones.

A diferencia de Baleares, el PP sale directamente afectado de esta nueva crisis territorial que afecta a Vox mientras se redobla el poder férreo de la cúpula de Abascal en Bambú. Aquí no solo está en juego la sostenibilidad de Vox o el futuro de la marca, sino que queda en riesgo la coalición de gobierno municipal tejida en noviembre de 2023, meses después de que Catalá fuese investida alcaldesa y empezara a rodar en solitario.

La pregunta que más persigue a populares y ultraconservadores esta última semana, desde que el partido de Abascal inhabilitó a Badenas, es la de qué va a pasar en Valencia. Supone un frente más para el PPCV, con la gestión de la DANA de fondo y el president Carlos Mazón en el peor momento. Tanto en imagen, como en perspectiva de futuro incluido entre sus propios compañeros de partido y Génova.

"Todos es posible", una amenaza directa a PP y Vox

La incógnita no es baladí. Este lunes, en una rueda de prensa convocada de forma extraoficial, la ya segunda concejala saliente en Valencia, Herrero, trasladó que los motivos de su marcha no estaban ligados a Badenas. Que correspondían a la "falta de apoyo e interés" de Vox desde Madrid respecto a un proceso penal por delitos de odio y lanzamiento de bulos racistas que afecta a Badenas y Herrero. Pero, concretamente, por el "acoso" recibido por parte de "los asesores impuestos por un cargo relevante de la dirección nacional" de Vox, que no quiso matizar.

Se trataría de Montserrat Lluís, la vicesecretaria de Acción de Gobierno, quien impuso a Badenas a perfiles como su ya exjefa de prensa, Belén Bordils, que ejerció esa competencia con Elisa Núñez, exconsejera de Justicia con Mazón hasta que se quedó sin trabajo con la ruptura de los gobiernos autonómicos con el PP en julio. A Herrero, desde Vox, le señalan la existencia del comité de cumplimiento, al que podría haber acudido a denunciar esos comportamientos. Algo que, ya fuera del partido, no puede hacer.

Bajo esos parámetros, y con la previsión de que Catalá tendrá que afrontar esta semana otra reestructuración del Gobierno que la despojará de competencias, a exigencia de los de Abascal de acuerdo al pacto de coalición, Herrero dejó abierta la posibilidad para terminar de apoyar al PP y Vox, que dependerán de ella y de Badenas para afrontar lo que queda de legislatura. "La aritmética es la que es y en este momento todas las opciones están abiertas", mencionó la concejala.

Lo ideal para Vox es que Herrero entregue el acta lo antes posible para dejar que corra la lista hacia el número cinco, que correspondería a Daniel Calabuig. Y que Badenas haga lo propio para que entre María Pilar Moral. De rechazarlo los dos, curiosamente, y de producirse ese hipotético escenario, el siguiente sería Vicente Barrera, expresidente de Vox con Mazón en la Generalitat. Creen, con todo, que sus dos concejales se atrincherarán en el consistorio hasta el final del mandato o, en el caso de Badenas, hasta que la justicia, en el caso de considerarlo, actúe contra él. Pero, por esa razón, esperan que ambos cumplan sus palabras con los electores que le votaron y se mantengan afines a la mayoría conservadora del Ayuntamiento.

Herrero: La aritmética es la que es y en este momento todas las opciones están abiertas

"Te has comprometido con ellos para actuar de una manera, pues ahora que se vea", exponen desde Vox fuentes nacionales. "Si haces como Podemos en el Congreso, que estaba en Sumar como parte del Gobierno y ahora sales para poner palos en la rueda a Pedro Sánchez cuando te han votado para lo contrario...", comparan desde Vox esas mismas fuentes con el caso de ruptura de la confluencia magenta a finales de 2023. Sobre todo por la posición díscola contra el PSOE de los morados al mando de Ione Belarra. El nerviosismo es patente entre los de Abascal, que saben que de los dos depende o no que Catalá mantenga mayoría absoluta de 17 concejales, el mínimo exigido, o que baje a 15 junto a Vox [13 y 2, respectivamente].

Un problema, teniendo en cuenta que la oposición de Compromís (9) y de PSPV-PSOE (7) suman 16 cargos en el Ayuntamiento. La izquierda tiene la posibilidad de ganar votaciones si los díscolos de Vox se abstienen, incluso de conseguir la victoria en una hipotética moción de censura si Herrero o Badenas deciden apoyarla. Este segundo caso es complicado de asumir para Vox, que confía en el sentido común de ambos. En esa línea fue Gosálbez este martes: "Yo espero que no suceda bajo ningún concepto. Tengo la creencia y entiendo que debe ser así".

Desde el PP en el Ayuntamiento se apremia la pronta resolución de este problema. De hecho, los de Catalá han dado una semana a Vox para que cierre su brecha. Si no, el PP actuará pensando en el mejor de los intereses de la población, indican. Pese a todo, y sin entrar a valorarlo, desde Bambú aseguran que ven "buena recepción de la alcaldesa" ante estas complicaciones. De hecho, a ella le atribuyen la decisión de elegir el mejor desenlace posible en lo que se refiere al equipo de gobierno. No es descartable que, en compensación, Catalá mantenga a Herrero en el cargo municipal como guiño a la pareja. Con Badenas será más complicado. Más tras las denuncia de Compromís y el PSPV-PSOE a la Fiscalía por cinco delitos: tráfico de influencias, fraude, negociaciones prohibidas a funcionarios y prevaricación.

En el ámbito municipal, en todo caso, no está concebida la convocatoria de elecciones, lo que da garantías a Herrero y Badenas de continuar hasta 2027 sin una renuncia expresa. De darse el caso de ingobernabilidad, una gestora podría tomar el timón en el municipio, como está regulado por ley.

Desde Vox evitan valorar el "daño" que supone la cascada de desavenencias territoriales con distintos cargos. Tras la salida de los gobiernos autonómicos la mayoría de consejeros se dieron de baja. En Castilla y León dos procuradores fueron expulsados tras criticar la dirección de Bambú. Pero sí asumen que habrá "una limpia" de cara a las próximas elecciones municipales. "La han impulsado los que deciden irse", matizan los de Abascal.

Aunque se determinaba que el Comité de Garantías cerrase la investigación de Badenas el jueves pasado, se asume que aún queda algo de recorrido. En Vox espera que se cierre cuanto antes, pero "lo importante es que se solucione bien" para evitar que cualquier error sea luego más perjudicial.