Oficialmente, 2017 no ha sido el Año de la Astronomía. Sin embargo, esta disciplina ha brillado, encadenando varias temporadas en que los hallazgos y proezas técnicas del cosmos se han acercado a los tiempos de gloria de la carrera espacial.



El director del Planetario de Pamplona y divulgador Javier Armentia analiza en este reportaje los hitos astronómicos de 2017. | Vídeo: M.V.

 

Science acaba de proclamar el descubrimiento de la kilonova de agosto como la noticia científica del año, conforme al criterio de  3.674 investigadores de todo el mundo. Lo ha hecho justo cuando un equipo de investigadores se han llevado una sorpresa analizando los datos: la fusión de aquellas estrellas de neutrones del pasado sigue emitiendo una radiación inesperada.

Kilonovas y ondas gravitacionales, neutrinos atrapados, el apoteósico final de Cassini, exoplanetas en zonas habitables, etc. No es casual este boom, según el astrónono y divulgador Javier Armentia. "Recogemos los frutos de una ciencia que ha avanzado sobre pasos sólidos y con apuestas por incorporar las nuevas formas de hacer las cosas".

Para el también director del Planetario de Pamplona, "es de las primeras ramas en que la colaboración internacional, compartir todas las prepublicaciones, los sistemas de archivos públicos, en la que someter los datos a libre escrutinio... más avanzado está".

 

Los avances astronómicos de 2017

  1. Ondas gravitacionales y luz

    Ya habíamos detectado esas perturbaciones del espacio-tiempo provenientes de lugares muy lejanos. Deformaciones muy muy débiles que nos hacían sentir cataclismos del pasado. Ahora, hemos podido poner imagen a esas ondas. Con la fusión de dos estrellas de neutrones hemos podido ver en el espectro electromagnético, donde está la luz, cómo ocurrió ese fenómeno. Es el descubrimiento del año, aunque abre más interrogantes de los que cierra.

  2. Atrapada la partícula fantasma

    Neutrinos de alta energía. Consideradas “partículas fantasma” livianas, porque lo atraviesan todo a casi la velocidad de la luz. Incluido nuestro cuerpo. O eso creíamos hasta esta semana. El detector IceCube ha capturado por primera vez en la Tierra neutrinos de alta energía. Con eso se podría, por ejemplo, "ver" el pasado del universo y radiografiar el centro del planeta.

  3. Cassini, Saturno y sus lunas "habitables"

    El broche de oro de la misión a Saturno se saldó no sólo con bellas imágenes. Toca ahora procesar gigas de información que la sonda nos dejó en herencia tras su final suicida. "Habrá sorpresas", sostienen sus responsables. Ya nos dio alguna, como que había agua líquida bajo Encélado, una de sus lunas. Condición indispensable para la vida conocida.

  4. Exoplanetas: "lo difícil es que no haya vida"

    Llevamos tantos descubiertos (cerca de tres millares confirmados) que "lo difícil sería que no hubiese vida en alguno", coinciden varios astrónomos y astrobiólogos. La misión Kepler detectó en febrero un sistema planetario completo: Trappist-1. En diciembre, junto a la inteligencia artificial de Google, un octavo planeta dentro de otro sistema del que se conocían siete. España se apuntó, con Alemania, otro tanto hace unos días.

  5. Luna, Marte: allá vamos

    Mientras Elon Musk sigue ensayando con éxito su cohete de ida y vuelta, el presidente de EE.UU. ha anunciado que quiere volver a la Luna. Por lo pronto, ya hay un acuerdo con Rusia (sí, Rusia) para montar una estación espacial internacional en la órbita selenita. Lo siguiente sería poner un pie en el satélite y otro en Marte. Eso si, nada de presupuestos por ahora.