Esta vez parece que sí. Si nada se tuerce, este verano veremos volar por primera vez al Ariane 6. Cuatro años más tarde de lo previsto inicialmente, la Agencia Espacial Europea (ESA) ya está ultimando los últimos detalles para que entre en funcionamiento su nuevo cohete, que se encargará de transportar cargas útiles al espacio. Y será un lanzamiento histórico por dos motivos: pondrá fin a la crisis de los cohetes europeos -al menos en parte- y volverá a dar al Viejo Continente acceso directo al espacio.

"Los equipos están reduciendo el período de lanzamiento y el primer intento se realizará durante las dos primeras semanas de julio de 2024. Estamos en el camino correcto y en línea con el período de lanzamiento que se comunicó en noviembre", explicaron desde la ESA en un comunicado publicado este martes. "La fecha tentativa para el primer intento de lanzamiento se dará en el salón aeronáutico ILA en Berlín, Alemania, que se llevará a cabo del 5 al 9 de junio, donde estarán presentes todos los miembros del grupo de trabajo", añadieron.

Desde la agencia europea se encargaron de aclarar que el Ariane 6 es un diseño "completamente nuevo", creado para suceder al Ariane 5 como sistema de lanzamiento de carga pesada de Europa: "Con el reinicio de la etapa superior del Ariane 6, la capacidad de lanzamiento de Europa se adaptará a las necesidades de múltiples misiones de carga útil, por ejemplo para orbitar constelaciones de satélites. Esta capacidad autónoma para alcanzar la órbita terrestre y el espacio profundo apoya los programas europeos de navegación, observación de la Tierra, científicos y de seguridad. El desarrollo continuo de las capacidades de transporte espacial de Europa es posible gracias a la dedicación sostenida de miles de personas con talento que trabajan en los 22 Estados miembros de la ESA".

Lo cierto es que nuestro continente lo necesitaba. La jubilación del Ariane 5 en julio de 2023, unida a la guerra de Ucrania (que hizo que Europa no pudiera contar con los cohetes rusos Soyuz) y a los continuos problemas del Vega-C provocaron que la ESA se fuera quedando sin opciones. Hasta tal punto, como explica Jorge Nicolás-Álvarez, doctor en ingeniería aeroespacial y divulgador científico, que la agencia europea tuvo que contratar a SpaceX para lanzar varias de sus misiones de carga media-pesada, como Euclid.

"El principal objetivo del Ariane 6 es mantener el liderazgo de Europa en el mercado de servicios de lanzamiento comercial y responder a las necesidades de independencia europea en el acceso y uso del espacio. El cohete contará con dos configuraciones: Ariane 62, para cargas más ligeras, y Ariane 64, capaz de lanzar más kilos al espacio. Ofrecerá una mayor flexibilidad gracias al motor de la etapa superior, que tiene la capacidad de reiniciarse hasta cinco veces, lo que permite al cohete alcanzar una variedad de órbitas en una sola misión y entregar más cargas útiles. Para entrar de lleno en el mercado comercial, que está en pleno auge, ofrecerá un servicio de transporte compartido para pequeños satélites que podrá aprovechar la capacidad sobrante de las misiones principales", relata Nicolás-Álvarez.

Ilustración del futuro Ariane 6. ESA

El pasado noviembre la ESA informó que quería realizar el primer lanzamiento del Ariane 6 entre mediados de junio y finales de julio de 2024. El propio director general de la agencia, Josef Aschbacher, puso un mensaje en X donde se mostraba entusiasmado después de haber completado "la última prueba" y se mostraba "ansioso" por ver volar al nuevo cohete. Pero los retrasos de los últimos años obligaban a ser cauteloso con el anuncio. El nuevo comunicado de la ESA publicado esta semana despeja todas las dudas, porque no solo vuelve a señalar el verano como el momento del lanzamiento, sino que también acota aún más las fechas.

"El desarrollo del cohete se ha retrasado debido a varios factores. Las dificultades técnicas, muy comunes en cualquier nuevo desarrollo de la industria aeroespacial, se han combinado con los retrasos de producción provocados por la interrupción de la cadena de suministro a causa de la pandemia de COVID-19 y la guerra de Ucrania", desliza Nicolás-Álvarez.

Próximos pasos

La ESA ha comunicado que ya ha realizado algunos pasos clave de cara al vuelo inaugural. En concreto, según han detallado, el pasado 29 de abril realizaron la revisión de calificación del sistema de lanzamiento del Ariane 6 en Les Mureaux (Francia). Y el 16 de mayo transportaron las cargas útiles al puerto espacial de Kourou (Guyana Francesa).

Pero aún quedan varias tareas importantes por hacer. A mediados de junio se aprobará el cierre de todos los aspectos de la calificación para el sistema de lanzamiento, y luego se trasladará el compuesto superior (que consta del adaptador del lanzador, las cargas útiles y el carenado del modelo de vuelo) desde la sala de encapsulación a la plataforma de lanzamiento. Y finalmente, el 18 de junio está previsto un ensayo general húmedo del cohete.

Nicolás-Álvarez ilustra la importancia de que todo salga bien para Europa: "En un informe reciente, un panel de expertos independientes instaba a la ESA a aumentar significativamente su autonomía en exploración espacial. Destacaba que los países y regiones que no aseguren su acceso independiente al espacio y su uso autónomo se volverán estratégicamente dependientes y económicamente privados de una parte importante de esta cadena de valor. El informe advertía del crecimiento exponencial del sector espacial global y concluía que el costo de la inacción superaría con creces la inversión necesaria para establecer a Europa como un actor espacial fuerte e independiente".

"Por tanto, la introducción del Ariane 6 junto con una mayor inversión en exploración espacial permitirá a Europa tener una mayor autonomía en el sector para atraer a talento, mantener la excelencia y ser un socio más fuerte y atractivo para la cooperación internacional", remató el experto.

Los objetivos del primer vuelo

La propia ESA detalló qué llevará a bordo el cohete en su vuelo inaugural: "Ariane 6 lanzará varios satélites, implementadores y experimentos de agencias espaciales, empresas, institutos de investigación, universidades y jóvenes profesionales en su primer vuelo. Esta gran cantidad de misiones están siendo suministradas por tres tipos de organizaciones: empresas comerciales, agencias espaciales y universidades. Juntos a ellos hemos estado construyendo hardware para probar y demostrar que su tecnología funciona en el espacio, como satélites para medir el clima en la Tierra o en el Sol".

Algunas cargas se soltarán en el espacio. Pero otras viajarán fijas en el cohete para realizar sus trabajos y recopilar toda la información posible del lanzamiento. "Ariane 6 está diseñado para ser versátil, ofreciendo a los actores espaciales opciones de lanzamiento personalizadas manteniendo los costos bajos", explicó Michel Bonnet, jefe de misiones e ingeniería de sistemas del Ariane 6 y líder de la ESA para el vuelo inaugural del cohete. "Las múltiples misiones que se lanzarán en el primer vuelo, procedentes de nueve países y docenas de organizaciones, son una demostración perfecta del espíritu de equipo detrás de este cohete y el espíritu de diseño que lo sustenta", zanjó.