Apagar el portátil cuando no lo estemos usando es un consejo que ha cobrado mucho sentido en los últimos años. Sobre todo con los dispositivos más modernos. Y no tiene que ver directamente con el gasto energético que podemos tener en casa como con el resto aparatos. O no tanto.

A decir verdad, la respuesta va más allá de decir simplemente que lo mejor es dejar apagado el portátil cuando no lo utilizamos. Porque existen factores importantes, como por ejemplo el uso que le vayamos a dar y que tienen mucho que ver.

Apagar el portátil por la noche es recomendable para el buen estado de los componentes

Hablamos de que los ordenadores han pasado a formar parte de nuestro día a día. Son la herramienta de trabajo de millones de personas a la vez que se utilizan para nuestro ocio y disfrute durante nuestro tiempo libre.

Con los años se han ido sofisticando sus sistemas y hemos avanzado de tener algo que sonaba como una nave espacial al encenderlo a unos dispositivos punteros con alta tecnología y mucho más silenciosos.

Aun así, y por muchos avances que se incluyan en los portátiles, siguen siendo dispositivos eléctricos con una batería que con el paso del tiempo se desgasta, y dependiendo del cuidado que le des, esta te durará más o menos. Y ello tiene una relación casi directa con apagar -o no- el portátil en los momentos que no le estemos dando uso.

La batería se puede ver muy afectada

Cuando los ordenadores pasan mucho tiempo encendidos, los archivos temporales o programas que no se finalizan correctamente, terminan ocupando una gran parte de la memoria del dispositivo, tendiendo a ralentizarlo. Es cuando se apaga el ordenador, que todos estos programas que lo ahogan se interrumpen, de manera que cuando se vuelve a abrir, no hay nada que lo tenga ocupado.

En caso de que sea un ordenador portátil, es incluso peor. Son las baterías de estos las que se ven afectadas cuando se quedan encendidos. A partir del número de ciclos de carga de un ordenador, la batería empieza a sufrir y a estropearse. Una batería de los ordenadores portátiles que tiene una vida útil de entre 500 y 600 ciclos de carga completos.

Un ciclo completo es agotar la batería del 100% de carga al 0%, y a medida que se van sucediendo, cada vez la batería tarda menos en descargarse. Si dejamos el ordenador encendido, lo único que conseguimos es acelerar esos ciclos y quitarle horas de vida a nuestros equipos. Pero hay otras posibles consecuencias.

Posible sobrecalentamiento y menor rendimiento

Dejar el portátil encendido durante la noche puede llevar al sobrecalentamiento del sistema.

Esto puede afectar el rendimiento general del equipo, ya que el calor excesivo puede ralentizar el procesador y otros componentes, lo que puede ocasionar bloqueos, congelamientos o incluso daños permanentes.

Mayor consumo de energía

Otro motivo de por qué es recomendable apagar el portátil es porque, durante los tiempos que lo usemos, como por la noche, hace porque consuma energía de manera continuada.

Eso puede tener un impacto significativo en la factura de la luz, especialmente si no tenemos configurado el portátil para entrar en modo de suspensión o hibernación cuando no está en uso.