Para él, la vida sigue igual, o por lo menos, es lo que intenta demostrar. Julio Iglesias es la figura imperante de la música española. Tan grande ha sido su dominio, como todo lo que ha crecido a su alrededor. Con una pelvis a la que nadie se pudo resistir, lo sentimos Elvis, y un vibrato que le ha hecho famoso en todo el mundo, Julio sigue siendo camaleónico, polémico y único.
«Cuando escribí “33 años” me acuerdo que mi padre me dijo: “Estás equivocado, 33 años no es la mitad de la vida”. Mi padre murió con 90 años y yo ya tengo 77 mañana. Mi padre tenía razón». Con estas cortas, pero sinceras palabras, se felicitó Julio el cumpleaños en sus redes sociales.
El que iba destinado a ser portero del Real Madrid terminó llenando otro tipo de estadios. Un grave accidente de tráfico cuando tenía 20 años truncó su carrera como futbolista y le dejó secuelas al caminar. Sin embargo, lo que la vida te quita, la vida te da, y pronto se le abriría una puerta con una travesía mucho más completa y longeva.
La guitarra, los compases y las letras sustituyeron al balón y a la portería. Aunque no se consideraba un cantante per se, La vida sigue igual se convirtió en ganadora del Festival Internacional de la Canción de Benidorm en 1968. Tras el galardón otorgado por la única ciudad que seguramente siga escuchando sus discos como si fueran la novedad de la semana, su carrera se convirtió en la vorágine conocida por todos.
Eurovisión con Gwendolyne en 1970, expansión europea, y crecimiento mundial. Paulatina, pero progresivamente, Julio fue haciéndose hueco en las radios de todo el planeta y en los corazones de los ávidos seguidores de sus canciones.
Sin ir más lejos, su lista de premios es casi tan larga como la de nuestras facturas, pues cuenta con estatuillas de los Grammy y Grammy Latinos, los American Music Awards, también los Premios Billboard, World Music Awards, Premios Lo Nuestro... ¿seguimos? ¡Ah! Que no se nos olvide su propia estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood, un emblema que tienen el honor de pisotear millones de turistas desde 1997.
En su palmarés también puede anotar el Guinness World Record como el artista latino que más discos ha vendido en todo el planeta. Casi nada. Y es que, Julio Iglesias tiene tales niveles de relevancia que incluso apareció recientemente grafiteado en las protestas del Líbano. Un hombre que mueve mundo, sin duda.
Además de arrasar en los escenarios, también se ha llevado por delante a media población femenina como consecuencia de sus claras dotes de Don Juan. Padre de ocho hijos, nueve si contásemos al no reconocido, abuelo de cinco nietos, y con dos matrimonios a sus espaldas, Julio Iglesias ha roto casi tantos corazones como récords.
Como contó el programa Hormigas Blancas de Telecinco, que volvió este verano a la parrilla televisiva de Mediaset, se rumoreaba que en la década de los setenta Julio habría mantenido relaciones sexuales con cerca 3.000 mujeres. ¡Para que luego digan que ocho hijos (o nueve, o los que sean) son demasiados! Jaime Peñafiel aseguró que Julio era «genéticamente infiel», algo que Isabel Preysler no consintió y que provocó su divorcio en 1979.
Para dramas, los que ha tenido con sus descendientes. Con Enrique Iglesias ha protagonizado, principalmente, pugnas musicales. Como recogía El País en una entrevista a Raúl López, el que fuera director de Sony España entre 1990 y 2006 dijo haber «trabajado con los dos y puedo decir que son bastante parecidos, solo que Enrique es una versión 5.0 de Julio». Además, parece que lo que molestó a nuestro protagonista fue que «Enrique no entrase en la industria musical de su mano». De tal palo, tal astilla.
El escándalo público que se lleva la palma, y no de oro, es el de su “no reconocido”, pero genéticamente aprobado hijo, Javier Santos, fruto de una relación clandestina con María Edite Santos. Según las pruebas de paternidad, Javier sería descendiente de la matrioshka de fertilidad de Julio, algo que él ha negado con rotundidad a pesar del largo proceso judicial al que Santos se ha enfrentado para demostrar lo contrario.
En un Sálvame Deluxe, Javier declaró no tener odio hacia su figura y afirmó querer «que conozca a su nieta y que ella tenga los privilegios que yo no tuve». Como el difunto padre de Iglesias diría... raro, raro, raro. Julio también ha sido, y continua siendo, carne de meme, ¡y lo sabes! 19.500.000 resultados en 0,54 segundos es lo que Google encuentra al escribir “Julio Iglesias meme” en su barra de búsqueda.
Julio acaba de celebrar el décimo aniversario de boda con su actual mujer, Miranda Rijnsburger, con quien comparte cinco hijos, dos de ellos sus gemelas estelares Victoria y Cristina, ambas de 19 años y que arrancaron su presentación en sociedad en la gala más prestigiosa del planeta, la MET.
A pesar de sus 77 velas y su reciente aniversario nupcial, Julio parece estar para pocos trotes. Las últimas imágenes filtradas por el programa Sálvame le mostraban un estado de salud complicado. Lo que muchos medios bautizaron como “con mulatas y en necesidad de muletas” se ha convertido en una verdadera preocupación para sus groupies y familiares. Asimismo, por motivos de salud y restricciones pandémicas, el cantante se vio obligado a cancelar su gira por España.
A pesar de lo que digan, Julio Iglesias sigue entonando su famoso Je n’ai pas changé, porque, pase lo que pase, no ha cambiado. Siempre posando con la faceta derecha de la cara, siempre cantando y siempre viviendo, Julio fue, es y será una figura inigualable del panorama musical global.
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