Se ha ido un icono español. Con la muerte de Carmen Sevilla se va una de las mujeres más queridas del panorama nacional. Después de siete años en una residencia, un tiempo en el que muy poco se ha conocido de su estado de salud, la artista ha fallecido a los 92 años. Sin embargo, y a pesar de su ausencia en los últimos años, su recuerdo permanecerá en varias generaciones. A través de sus comienzos cantando en los años 40, sus películas repartidas a lo largo de tres décadas, y sus múltiples apariciones en televisión.

Creció con la música muy presente en casa, y tras el final de la guerra civil española acudió al conservatorio. Estrellita Castro fue su madrina artística, pero su talento y carisma ante las cámaras le garantizaron el éxito pronto. Grabó internacionalmente y vivió romances secretos como el que se rumorea que tuvo con el actor Pedro Infante. Antes de casarse con Augusto Algueró, de quien se separó porque le fue infiel, también se la relación con el torero mexicano Carlos Arruza.

Una artista multidisciplinar que bailaba, cantaba y actuaba saltó al estrellato español a finales de los años cuarenta. Rápidamente se hizo un sitio en el panorama audiovisual nacional e internacional. Era 1950 cuando protagonizó La revoltosa con Tony Leblanc

En 1961 Carmen Sevilla interpretó a María Magdalena en Rey de reyes, la película estadounidense de Nicholas Ray sobre Jesucristo, una de las veces que saltó el charco con su éxito

Carmen Sevilla, se casó vestida de Pertegaz con Augusto Algueró. Fue en la basílica del Pilar de Zaragoza, un enlace que se celebró el 23 de febrero de 1961 con miles de personas reunidas en la puerta. La artista fue madre de su primer hijo tres años después

Después de más de quince años de carrera, Carmen Sevilla decidió dejar de lado su imagen inocente en los 70. Fue una representante del cine del destape tras su primer divorcio, que se precipitó debido a las constantes infidelidades de Augusto Algueró

Bien entrados los 70, Carmen Sevilla dio vida a una cabaretera en Una mujer de cabaret. En esta película en la que intentaba librarse del título de ‘novia de España’, convirtiéndose en una de las representantes de destape cuando superaba la cuarentena

Carmen Sevilla y su segundo marido, Vicente Patuel, con quien se casó en 1985 y a quien la artista definió como el amor de su vida. Su relación comenzó después de años en los que el empresario había sido gran seguidor de la cantante, y terminó abruptamente con su muerte en el año 2000. Él le pidió que dejara el cine y ella, muy enamorada, aceptó

Carmen tenía muy buena relación con Lola Flores. Un ejemplo de esa amistad es esta foto de las dos artistas junto a Juanito Valderrama, durante un homenaje en 1995. Las dos cantantes habían coincidido en la película El balcón de la luna, estrenada en 1962