Una semana después de que Tamara Falcó (41 años) e Íñigo Onieva (34 años) pasaran por el altar en una boda de lo más comentada, la pareja sigue dando que hablar. La revista ¡HOLA! ha publicado la segunda parte de su especial con una entrevista con el novio y unas palabras de la marquesa de Griñón que no han pasado desapercibidas.

Ante la pregunta de si el siguiente paso para Tamara e Íñigo es ser padres, el empresario hotelero admite es lo que les "hace ilusión". Sin embargo, abrazando la fe de la marquesa que les ha llevado hasta donde están, añade que llegarán cuando Dios les "bendiga con ello". Por su parte, la novia desvela que ya ha empezado un tratamiento de fertilidad.

Un proceso que empezó hace meses

Al parecer, Tamara Falcó empezó hace varios meses el proceso por recomendación de una amiga. Se llama Fertilitas y es una clínica que evita los dilemas éticos de otros tratamientos al no recurrir a la manipulación de embriones. Según explica la marquesa de Griñón, "es un método para medir tu cuerpo y asegurarte que estás bien".

Es un "proceso muy bonito" para la hija de Isabel Preysler, cuyos principios morales y religiosos son la base de su día a día. Precisamente, un factor muy importante a la hora de tomar las decisiones de su maternidad.

¿Qué es la naprotecnología?

Este tratamiento utiliza lo llamado como "naprotecnología", que consiste en registrar biomarcadores a lo largo del ciclo de fertilidad de la mujer para encontrar días más propicios o posibles problemas hormonales. También se revisa en los hombres la posibilidad de que intolerancias u otros pequeños problemas que habían resultado invisibles reduzcan las posibilidades de embarazo.

La empresa que está usando Tamara Falcó se fundó en España en 2018 gracias a la intervención de un amigo de Duarte, su hermano. Es muy popular en círculos sociales en los que no la fecundación in vitro se considera moralmente cuestionable o, incluso, demasiado invasiva.

Tamara Falcó e Iñigo Onieva en su fiesta de pedida | @tamarafalco

Íñigo Onieva no se considera muy niñero

Sin embargo, Tamara no descarta recurrir a otros métodos para ser madre. Por el momento quiere agotar todas las vías posibles antes de adentrarse en otras posibilidades. La marquesa de Griñón está deseando ampliar la familia.

De hecho, para Íñigo Onieva está sobre la mesa la posibilidad de tener hasta tres niños, aunque admite que solo le gustan los peques que tienen relación con él. El empresario no se considera muy niñero, pero disfruta mucho, por ejemplo, jugando con los hijos de Ana Boyer y Fernando Verdasco.