Jacob Elordi, Robert Pattinson y otras estrellas que reniegan de su pasado como ídolos juveniles

Pasa una y otra vez y no aprenden. El último ha sido Jacob Elordi, australiano de abuelo vasco en pleno ascenso a convertirse en el nuevo gran actor de Hollywood con solo 26 años. En su última entrevista con GQ, el joven intérprete ha asegurado que las películas que le hicieron famoso son absurdas. Se refiere a Mi primer beso, de Netflix, cuyo primer filme le sumó 4 millones de seguidores en una sola noche.

"No quería hacer esas películas antes de hacerlas. Son ridículas. No son universales, son una escapatoria", asegura sobre la saga de Mi primer beso, donde no solo da vida al atractivo Noah Flynn sino que fue el escenario de una historia de amor con la actriz Joey King.

"Era una trampa"

Mi primer beso es la típica película fácil para adolescentes o jóvenes adultos sobre un romance de instituto. Pero como tantos otro, Elordi tiene un concepto horrible de las películas fáciles. Necesitaba un trabajo y aceptó con la idea de que era algo temporal que le permitiría seguir buscando la oportunidad que le empujara en su carrera.

Nunca se imaginó que sería Mi primer beso. Y todavía a día de hoy, cuando está promocionando películas independientes como Saltburn de Emerald Fennell o Priscilla de Sofia Coppola gracias a su viralidad, lo considera algo horrible. "Es una trampa porque se puede convertir en todo para ellos y nada para ti. No tienes ideas originales y estás muerto por dentro. Es una línea muy fina. Yo ya he cumplido mi parte", insiste en la entrevista.

Pero lo de Jacob Elordi no es ninguna novedad. No es el único joven actor que se ve superado por las mieles de la fama repentina y que rechaza sus orígenes, el motivo de ese explosivo interés en él.

Robert Pattinson también rechazaba Crepúsculo

Cada cierto tiempo se hace viral un vídeo en el que el propio Robert Pattinson se muestra asqueado y harto de Crepúsculo en el final de la promoción de la última película. Aseguraba que estaba deseando que se terminara la saga, bromeaba con que no le habían pagado lo suficiente y dejaba claro que pensaba que el concepto de Bella y Edward tenía que haberse quedado en los sueños de su creadora, Stephenie Meyer.

"Te sientes inútil, no sabes qué hacer ya", confesaba en 2012 a Shortlist. "Nunca pensé que [mi trabajo] fuera una mierda pero llegué al final de mi inspiración. Llega un punto en el que ya no quieres hacer una película para adolescentes", añadía.

No solo estaba cansado de rodar las películas. También de hablar de ellas: "Puede resultar aburrido", admitía en 2010, en un parón entre el rodaje de una y otra. "He aprendido a no prestar tanta atención pero me sigue afectando... cuanto más te expones más te odia la gente de manera irracional", confesaba Robert Pattinson con 24 años.

Una década más tarde, durante la promoción de The Batman con Zoë Kravitz, mostraba un significativo cambio de opinión. Cuando su compañera de reparto dijo en una entrevista con People que no había visto Crepúsculo porque "no era su rollo", Pattinson bromeó: "Eso es tan 2010". "Ya ni siquiera es guay odiar la película", contestó.

Incluso bromeaba en 2018 diciendo que se echa mucha crema hidratante para prevenir las arrugas y poder volver a interpretar al vampiro que no envejece: "Estoy listo para interpretar a alguien de 17 en cuanto me llamen", decía a Variety.

Como le ocurre a Jacob Elordi, él también se enamoró de su compañera de reparto. Robert Pattinson y Kristen Stewart salieron durante gran parte del rodaje de la saga, aunque su relación terminó abruptamente antes de que terminaran de trabajar juntos.

Zac Efron es "ese tío de High School Musical"

Otro ejemplo de la misma historia es la que vivimos con Zac Efron. La estrella de High School Musical es otra víctima del fenómeno fan. A pesar de que le ha valido una vida de trabajo en la industria del cine, durante años ha sido el primero en renegar de su pasado en Disney Channel. Ya con 19 años, antes de que se estrenara la segunda película, Zac Efron admitió que estaba cansado de escuchar las canciones de la primera.

"A veces miro atrás y quiero darme una patada", decía en 2016 a la revista Men's Journal, con 28 años. "En plan, a la mierda ese tío. Ha hecho algunas cosas guay con gente guay, hizo esa peli [Neighbours] que era graciosa, pero sigue siendo ese tío de High School Musical", desveló. De los tres mencionados, es probable que Zac Efron sea el más encasillado, todavía a día de hoy, cuando hace quince años desde que se estrenara la última película de la saga que le hizo famoso.

Algo más en común con los anteriores: Zac Efron también salió con su compañera de reparto. Durante cinco años, Vanessa Hudgens y el actor de ojos azules fueron los protagonistas de todos los titulares. De hecho, fueron incluso los protagonistas del videoclip de la actriz y cantante para el tema Say Ok.

Por supuesto, en 2022 las cosas cambiaron. En una entrevista con E!, Zac Efron (tenía entonces 34 años) admitió que "por supuesto" estaría interesado en reunirse con el reparto original para un reboot. "Si tengo la oportunidad de volver y trabajar con el equipo eso sería genial. Mi corazón sigue ahí, sería increíble, espero que ocurra", añadió.

Miley Cyrus admite su pasado en Used To Be Young

Finalmente, el cuarto caso que demuestra que lo de Jacob Elordi pasa una y otra vez es el de Miley Cyrus. Cuando la cantante se rebeló hace una década, con 21 años, y renegó de su pasado como estrella Disney, muchos de sus fans terminaron decepcionados.

"Tuve que evolucionar porque Hannah era más grande que la vida misma, más grande que yo. Sentí que nunca iba a tener el nivel de éxito de Hannah Montana", aseguró a una entrevista con Rolling Stone. "Pero no era un personaje. El concepto de la serie soy yo. He tenido que llegar a esta conclusión y no convertirlo en alguien más", añadió.

Ella bromeaba con haber "asesinado" a Hannah Montana y aseguraba que su pasado en Disney Channel le había creado dismorfia corporal. Aunque nunca dijo haberse arrepentido ni habló mal del personaje. De hecho, en su disco más rock, Plastic Hearts, aparece una foto de cuando era una niña con la peluca rubia. Pero este año ha demostrado que, pasados los 30, es más fácil hacer las paces con tu pasado gracias a su tema Used To Be Young.

En el videoclip, Miley aparece con un conjunto formado por un pequeño body de lentejuelas rojo sobre una camiseta de Mickey Mouse. Su pasado sigue ahí, siempre cerca de su corazón.