La reina Sofía recoge basura en el Manzanares mientras el emérito navega en Sanxenxo

Este viernes, el rey don Juan Carlos ha vuelto a navegar en Sanxenxo, donde pasará el fin de semana con su hija, la infanta Elena, en su octava visita a España desde que se instalara en Abu Dabi. Mientras el emérito se echaba esta mañana al mar, la reina Sofía recogía basura en el río Manzanares a su paso por el municipio madrileño de Rivas-Vaciamadrid.

Una acción de limpieza ambiental que forma parte de la campaña 1 m2 por los ríos, lagos y embalses del Proyecto Libera, una iniciativa de la ONG SEO/BirdLife en alianza con Ecoembes que promueve la reutilización y el reciclaje luchando contra la basuraleza, aquellos residuos que acaban en el medio natural por la acción irresponsable del ser humano.

Desde 2018, la Fundación Reina Sofía colabora con este proyecto, y hoy la emérita no ha dudado en ponerse los guantes y participar personalmente en una acción de Limpia ríos, salva océanos, realizada por la Fundación Ecoalf y y Biotherm en colaboración con Libera. Ella y el resto de voluntarios han llenado varias bolsas de basura con los residuos encontrados en las orillas del Manzanares a su paso por el Soto de las Juntas del municipio madrileño de Rivas. También ha tenido la posibilidad de observar algunas de las aves que frecuentan el paraje natural.

De la solidaridad al náutico

Mientras la reina participaba de una de las muchas acciones solidarias con las que a sus 85 años sigue comprometida, su marido se embarcaba en el Bribón para la primera de las jornadas de vela que tiene previsto disfrutar durante su octava visita a España desde que iniciara su exilio parcial en agosto de 2020.

Juan Carlos llegó a España el pasado miércoles. Aterrizó en Vitoria para someterse a un chequeo y un tratamiento rico en plasma y vitaminas para recuperar la movilidad en la clínica del doctor Eduardo Anitua. Y el jueves a media tarde tomó de nuevo el avión privado que utiliza en sus desplazamientos para llegar al aeropuerto de Vigo, desde donde se trasladó a Sanxenxo.

Alojado una vez más en casa de su amigo Pedro Campos, el rey volverá a estar acompañado estos días por la infanta Elena. Pese a que las previsiones meteorológicas no eran favorables, la mañana de este viernes finalmente ha salido el sol y el rey y su hija mayor han acudido al Club Náutico de Sanxenxo para comenzar los entrenamientos de cara a la competición de vela que arrancará mañana y en la que el monarca pretende participar.

La anécdota de la jornada ha tenido lugar cuando, en uno de los corrillos previos a la navegación, el perro de una de las mujeres que formaba parte de la comitiva le ha lamido la cara al emérito. Una reacción afectuosa del animal que el rey ha celebrado entre risas.