Los reyes de España llegaron anoche a los Países Bajos y su primer evento fue con la colectividad española. Para ver el reencuentro entre don Felipe, doña Letizia, el rey Guillermo y la reina Máxima había que esperar hasta esta mañana. Los actos se han sucedido a lo largo del mediodía, que si bien empezó con sol en Ámsterdam, evolucionó después en lluvia.

Pasadas las 11 horas aparecían en el Palacio Real de Ámsterdam las dos parejas, tan parecidas en muchos sentidos y, a la vez, tan opuestas. Una realidad que se reflejó, precisamente, en los estilismos que escogieron las dos mujeres.

Ceremonia oficial de bienvenida a los Reyes por parte del Rey Guillermo y la Reina Máxima de los Países Bajos en la Plaza Dam, junto al Palacio Real de Ámsterdam. | CASA REAL DE S.M. EL REY

Tras la interpretación de los Himnos Nacionales de ambos países, Don Felipe y el Rey Guillermo han pasado revista a las tropas de la Guardia de Honor, que les han rendido honores y ha tenido lugar, en el Salón del Trono, el saludo y un encuentro de las autoridades y delegaciones.

En la ceremonia estaban también un grupo escolares del instituto Het Amsterdams Lyceum, que tiene una sección española llamada Trayecto Español. Una iniciativa que comenzó hace más de 20 años, está completamente integrada en el centro y constituye, además, una de sus principales señas de identidad.

La reina Letizia y la reina Máxima de Holanda saludan a un grupo escolares del instituto Het Amsterdams Lyceum. | CASA REAL DE S.M. EL REY

Los alumnos presentes en esta bienvenida oficial cursan un itinerario intensivo de Lengua y Cultura Españolas a lo largo de seis cursos académicos (secundaria/bachillerato), lo cual les posibilita cursar estudios universitarios en España si así lo desean.

La casualidad de otro encuentro royal en Bélgica

El rojo y el verde, dos colores opuestos en el círculo cromático y, por tanto, complementarios, son los escogidos por las dos mujeres para su esperado reencuentro. Curiosamente, a solo unos kilómetros de distancia otra reina europea recibe a otra visita de Estado. Hablamos de Felipe de Bélgica y su mujer, Matilde, que han acogido estos días a los grandes duques de Luxemburgo en un viaje oficial.

Y por casualidades de la vida, la gran duquesa María Teresa también ha escogido el verde mientras que la reina Matilde ha apostado por el rojo. La misma combinación de colores que han lucido esta mañana las reina Letizia y Máxima en Ámsterdam.

Máxima lo apuesta todo al rojo

La reina Máxima ha apostado todo al rojo con un favorecedor conjunto de Natan en el que cada uno de los detalles iba en el mismo tono. La falda midi, los guantes, los tacones, el bolso que tiene como cierre una guindilla firmado por Sarah's Bag, la pamela de Delvigne… lo único que rompía con la monocromía eran las joyas, en oro blanco y diamantes, y relativamente discretas para lo que es la reina holandesa.

El rojo es uno de los colores que más utiliza la reina Letizia, pero en esta ocasión ha sido el color verde el que le ha dado luz en rostro. Un vestido de tweed con mangas abiertas haciendo las veces de capa de Moisés Nieto, que ha conjuntado con el bolso y con las joyas: para poder estar a la altura del impresionante joyero de la reina Máxima, la española ha pedido prestados a la reina Sofía unos preciosos pendientes de esmeralda.

Unas piezas históricas que ya ha lucido en el pasado y cuyo origen no está claro. Se especula que fuera un regalo del rey Juan Carlos cuando ascendió al trono o que se los dio por su decimoquinto aniversario.

Los reyes de España, Felipe VI y Letizia, acompañados por el primer ministro neerlandés en funciones, Mark Rutte, y por la alcaldesa de Ámsterdam, Femke Halsema, realizan una ofrenda floral ante el Monumento Nacional en la Plaza Dam de Ámsterdam. | EFE/ Chema Moya
La reina Letizia se ha puesto una de sus capas favoritas, con cuello de zorros, para abrigarse cuando ha comenzado a llover en Ámsterdam. | EFE/ Chema Moya

Letizia arriesga con el tocado

Pero, a diferencia de la argentina, Letizia ha conjuntado su estilismo en dos tonos. Ha recurrido a un tono beis muy socorrido para el tocado, los guantes (que se quitó) y los zapatos. El tacón bajo ya forma parte de la rutina de la Reina, a pesar de que en situaciones como esta la diferencia de altura con el resto de los presentes llama la atención: Máxima es muy alta (mide 1.78m) y llevaba, además, unos altísimos salones.

El tocado de la reina Letizia, de Balel Madrid, ha sido, sin duda, su apuesta más arriesgada, sobre todo porque no es un accesorio muy habitual en ella. Un gesto de lo más significativo en la visita a Holanda, ya que Máxima es conocida por sus apuestas maximalistas y atrevidas.

Pero Letizia ha apostado por una firma que ya le ha traído victorias en el pasado. Este tocado es de la misma marca de aquel que llevó en la coronación del rey Carlos III, que fue muy aplaudido.

La lluvia ensombrece el evento

La reina Letizia durante la ofrenda floral ante el Monumento Nacional en el marco de la visita de Estado de los reyes de España. | EFE/ Chema Moya

Durante el acto, haciendo honor a la fama que tienen los Países Bajos, se puso a llover. Por lo tanto, los Reyes, acompañados por el primer ministro neerlandés en funciones, Mark Rutte, y por la alcaldesa de Ámsterdam, Femke Halsema, se armaron de paraguas para continuar el evento.

Además, la reina Letizia sacó su capa favorita, de color camel firmada por Carolina Herrera. Con un cuello de pelo para protegerla del frío, ya que las temperaturas rondaban los 5ºC esta mañana en Ámsterdam.

Tras el recibimiento oficial, los Reyes se han dirigido al monumento nacional en la Plaza del Dam, que recuerda a las víctimas holandesas que murieron en la Segunda Guerra Mundial. Allí han hecho una ofrenda floral antes de continuar con los actos de la jornada. El día seguirá en la Fundación Cruyff y visitando el puerto de Ámsterdam para conocer más sobre el desarrollo de un corredor marítimo de hidrógeno con el puerto de Bilbao. Y terminará por la noche con un banquete de Estado en el Palacio Real de Ámsterdam, donde ambos monarcas pronunciarán un discurso y al que acudirá la princesa Amalia por primera vez.