No hay dos travestis iguales, a pesar de que en ocasiones las comparaciones son inevitables. Pero en el caso de Carmen Farala, la ganadora de la primera edición del concurso televisivo Drag Race España, está claro que no hay nadie como ella. Solo hace falta ver algunos de sus últimos éxitos virales. Desde su traje de macarrones hasta su último single, que suena fuerte a canción del verano.

Carmen Farala es el nombre artístico de Daniel Mora, un sevillano de 34 años que parece dominar todo aquello que practica. Está en plena promoción de Traguito, su segunda canción en dos años, pero lleva una racha en la que todo el mundo habla de ella. En femenino, porque aunque el artista sea masculino el personaje es femenino.

La portada del nuevo single de Carmen Farala, 'Traguito'.
La portada del nuevo single de Carmen Farala, 'Traguito'.

Carmen Farala lanza su apuesta para canción del verano

Sus más de 250.000 seguidores saben que cada una de las publicaciones de Carmen Farala pueden ser el resultado de una obra de artesanía. Fue el caso de su vestido de macarrones, un traje que confeccionó ella misma para los premios de la Academia de la Moda española que se celebraron la pasada semana en Madrid.

Su single refleja esa misma artesanía. Además de hacerse su propio estilismo y el maquillaje -algo a lo que muchas drag queens renuncian cuando saltan a la fama- también ha formado parte de la composición. Carmen Farala quiere que Traguito sea la canción del verano y del Orgullo LGTB, que empieza en Madrid este viernes 28 de junio. Sobre todo, porque es un tema muy suyo, le cuenta a El Independiente en una conversación telefónica.

El Independiente: Hola, Carmen. Andas muy ocupada, en plena promoción, ¿no?

Carmen Farala: Sí, llevamos unos díitas sin parar, pero todo va bien que es lo importante.

EI: Además, por lo que he visto está siendo un éxito. En solo cinco días está en 20.000 reproducciones en YouTube.

CF: Sí, está siendo emocionante ver cómo lo recibe la gente y los hay que ya se la saben.

"Parece que soy todoterreno pero hay mucho trabajo detrás"

Carmen Farala

EI: Es un trabajo que tiene tu energía a muchos niveles, el vestuario, el maquillaje y la composición. ¿Qué ha sido lo más difícil y lo que más te ha gustado hacer? ¿Hay algo que te cueste, cuando parece que lo haces todo bien?

CF: Parece que soy todoterreno ¡y lo soy! Pero hay mucho trabajo detrás. Ha sido un proceso largo porque llevamos bastante y hay que ir muy pendiente de los tiempos, pero en general ha sido bastante placentero.

Haber podido trabajar con Pedro Elipe, que es productor y compositor de la canción, ha sido un gusto porque me lo ha puesto muy fácil. Y poder aportar mi granito de arena pudiendo componer parte de la canción ha sido muy diferente para mí. Porque no sabía que era algo que podía hacer. Sobre todo por eso, porque la canción la siento un poco más mía.

EI: Ya habías sacado música antes de Drag Race y en 2022 estrenaste tu primer single de esta nueva etapa. Pero ahora planeas mucho más, ¿no? ¿Qué ha cambiado en solo dos años?

CF: La primera vez que saqué música era en mis comienzos en el mundo del drag y era en grupo y mi primer single en solitario fue después de Drag Race. Ahora Traguito no tiene nada que ver, es totalmente diferente, creo que es mucho más yo. Siempre me han encantado los ritmos latinos. De mis ritmos favoritos es la salsa, el merengue. Lo anterior eran sonidos más pop, más internacionales. Este es más latino, más caliente, 100% para bailar. Creo que además es perfecto para el verano.

"Si la lucha no sigue vamos para atrás"

EI: Y justo antes del Orgullo, estarás lista para escucharte en todas partes.

CF: Es la intención, es la intención. Este Orgullo tenemos que reivindicar fuerte, pero con un Traguito. Para gritar fuerte y que se nos escuche. Llega en el momento perfecto porque como te digo, llevaba tiempo sin hacer música y sentía que cuando llegara el momento iba a ser algo así. Así que estoy muy, muy contenta, y va a sonar en todos los lados.

EI: Me dices que hay que reivindicar y justo esta semana ha habido una polémica por los carteles del Orgullo en Madrid. ¿Qué sensación te produce a ti?

CF: Yo creo que la reacción que todo el colectivo en general estamos sintiendo es que el cartel no nos representa. No refleja nada más que fiesta y, sí, el Orgullo es una celebración de la libertad de poder ser quien eres y quien quieres ser. No es una fiesta porque sí. Ni es una fiesta para beber, emborracharse y tener sexo, que es lo que parece que refleja ese cartel. Somos mucho más.

Algo me da que ese cartel no lo ha realizado una persona del colectivo. Es alguien que ha hecho eso sin saber lo que representa el Orgullo LGTB. Es un sentimiento generalizado por parte de todas las personas que formamos parte del colectivo. Eso no nos representa.

Y lo peor de todo es que la gente se queda con esa imagen, es lo que se exporta. Le hace creer a la gente que eso es el Orgullo. Cuando no lo es en absoluto.

¿Se está perdiendo el Orgullo LGTB?

EI: En los últimos años ya ha habido varias reivindicaciones. ¿Te da la sensación de que se está perdiendo el objetivo del Orgullo?

CF: Sí parece que se está perdiendo porque parece que nos quieren llevar cada vez más lejos. Es como que quieren la fiesta, la permiten, pero cuanto más lejos mejor. No nos damos cuenta de que es una de las fiestas más importantes, a nivel económico, no solo en Madrid sino a nivel nacional, de Europa y a nivel mundial. Madrid es un referente para el colectivo. Entonces no entiendo esa tendencia a alejarlo, de que sea lo más discreto posible. Parece que ser uno mismo molesta.

Por eso tenemos que alzar la voz, sobre todo por los que no pueden alzarla. Yo siempre digo que las drag queens como yo, gracias a los brillos, las pelucas y el maquillaje colorido, tenemos un altavoz porque la gente nos mira. Así que ahí estaremos para dar ese mensaje de que no podemos parar la lucha. Se dice que ya hemos conseguido mucho, pero cada día somos más conscientes de que si la lucha no sigue se va para atrás.

"Las redes muchas veces canibalizan"

EI: En las últimas semanas tú has protagonizado muchísimos titulares porque has hecho dos pedazo obras maestras: primero un vestido con cartones y después uno con macarrones.

CF: Realmente todo comenzó por generar contenido para mis seguidores. Las redes muchas veces canibalizan, les das algo y quieren más, les tienes que sorprender todo el rato. Ni yo misma pensé que iba a tener tanto recorrido. Lo hice porque quería dar ese contenido entretenido, divertido, y sorprender como siempre. Pero la verdad es que se ha hecho bastante viral y compensa porque detrás de eso hay muchísimo trabajo, y es algo que antes no sacaba mucho en redes sociales. El tema de los procesos creativos. Pero cuando he ido mostrando todo lo que hay detrás la gente empieza a valorar mucho más la profesión de una drag. No es solo el momento de la preparación, de los diez o quince minutos del show o del evento, sino que es todo el tiempo que hay detrás invertido. Pone en valor el arte drag.

El famoso vestido de macarrones

EI: Eres una fashion queen [como se llama a las travestis que se especializan en mostrar moda] pero se te queda corto porque eres una crafty queen [muy manitas]. Ahora todo el mundo ve lo de los macarrones, incluso gente que no te conocía, pero ¿qué otros diseños que hayas hecho a lo largo de los años crees que están a la altura de ese de los macarrones?

CF: El vestido de los macarrones ha sido de los más complicados. Porque he hecho vestidos con bolsas de basura, con casi todo, pero este cuando comencé a crearlo no tenía intención de llevarlo. Porque la fragilidad del vestido es lo que lo hace realmente especial. Es un vestido tan efímero como el arte drag que hago, que te desmaquillas y ya. Es una cosa muy frágil que, podríamos decir... que tiene fecha de caducidad. Entonces estoy muy orgullosa de este.

"Lo malo de España a veces somos los propios españoles. No damos valor a lo nuestro"

Creo que la ocasión en lo que lo lucí, que era los premios de la Academia de la Moda, era la ocasión idónea y el único momento en el que un vestido así podría encajar. Era un momento perfecto para reivindicar la industria de la moda en España, que podemos hacer moda con cualquier cosa.

EI: Pone en perspectiva todo el trabajo de los modistas y artistas españoles. Porque ahora la moda española se recluye mucho a Inditex, a nivel internacional. Pero hay grandes diseñadores como tú que además ya mostraste tu trabajo internacionalmente con Chanel en Eurovisión.

CF: Sí, España es un país con muchísimo talento y es una pena porque lo malo de España a veces somos los propios españoles, que no damos valor a lo nuestro. De hecho, ahora mismo está Juana Martín, que es la primera mujer española en desfilar en París y es andaluza y gitana. Eso tenemos que ensalzarlo. Hemos tenido a Paco Rabanne o Balenciaga. Pero ahora tenemos a la primera mujer y eso es digno de admirar. Y no somos conscientes de ese tipo de cosas.

Está genial que esta haya sido la primera vez pero no será la última. Y tampoco de la Academia de la Moda, que pone en valor a toda la industria, no solo a diseñadores sino también a creativos, empresas de materiales... es un conjunto. Era la primera edición y era el momento de lucir un vestido de macarrones pero creo de ahora en adelante los diseños que veremos en esa alfombra roja serán cada vez más locos y llegará un momento en el que mi diseño será algo anecdótico. Será la fecha en la que todos sus diseñadores quieran lanzar su artillería pesada.

EI: ¿Cómo puedes superar tú misma tu vestido?

CF: De momento estoy centrada con Traguito, con el tema de la promoción y demás. Porque además me lleva bastante tiempo. Pero de repente un día me despierto con la bombilla encendida y pienso "nuevo reto". Porque a mí me encantan los retos y, sobre todo, sorprender a los seguidores, que les encanta ver qué locura hago. Así que hay que estar atento a las redes para ver qué será lo próximo.

EI: Las redes son perfectas para alguien como tú que tiene tantas facetas pero también quieres meterte en el mundo de la interpretación.

CF: El drag es una de las disciplinas artísticas más completas que hay porque puedes utilizarlo en cualquier rama. En la interpretación, la música, la moda… es un arte supercompleto. Para mí es una rama de la interpretación, la única diferencia es que yo soy siempre el mismo personaje. Pero yo estoy abierta a todo porque yo siempre me he sentido muy dramática. Y los retos... es lo que más me gusta.

EI: ¿Y algo algo que te gustaría especialmente hacer? ¿Una peli, una serie...?

CF: No te sabría decir. Soy bastante dramático o dramática cuando estoy en drag. Pero no estoy en contra de un momento comedia. Cuando estuve en Drag Race descubrí una faceta que no conocía, que es ese mundo de la comedia. Yo me siento muy cómoda porque en mi día a día soy muy divertido. Soy un payasete. Así que ahí me siento muy cómodo. Pero habría que ver algún proyecto que sea interesante. Porque el drag, como te digo, se puede permitir tocar cualquier palo.

Carmen Farala o el caballo de Troya

EI: Precisamente en tu temporada de Drag Race al principio se creía que porque nunca habías visto el concurso en sus ediciones internacionales eras un blanco fácil. Pero no, más bien el caballo de Troya.

CF: Siempre dije que no haber sido fan de la franquicia, el no conocer cómo funcionaba, las dinámicas, jugó a mi favor. Gracias a ello yo me mostré tal y como era porque no sabía qué era lo que había que hacer. Así que simplemente me lancé a entregar todo de mí y mira, creo que funcionó. Las siguientes temporadas han sido mejor producidas y se notaba que había más presupuesto, pero la primera tiene algo que no tendrán las otras que es la naturalidad de las reinas. Fuimos las primeras y se nota en la inocencia.

Carmen Farala, durante su paso por 'Drag race España'.
Carmen Farala, durante su paso por 'Drag race España'. | Atresmedia

¿Drag Race perjudica el arte local?

EI: Hay muchas reivindicaciones de que Drag Race quita trabajo a las reinas travestis locales porque todo el mundo quiere a las del programa. ¿Crees que es cierto o que realmente el programa ha favorecido a valorar mejor el arte del drag?

CF: Es cierto que un promotor, a la hora de crear un cartel, siempre va a buscar a la drag más conocida. Porque la franquicia tiene un fandom enorme y son seguidores muy fieles. Y tener una cabeza de cartel que se ha visto en televisión siempre va a arrastrar público. Pero no solo estamos las de Drag Race, somos un elenco de compañeras. Además, el boom del programa ha favorecido a que más gente se sume, que se lancen al mundo del espectáculo y también hay mucha más demanda.

Así que por un lado podemos decir que las reinas de Drag Race acaparamos parte del mercado pero a la vez se ha diversificado. Y hay mucha más demanda de cosas que no había hace tiempo. Como los brunch, por ejemplo, con drag queens. Cosas que en Estados Unidos son muy comunes. Así que surgen más oportunidades y hay más trabajo. Pero aún así, tengo que decir que el tema del drag es complicado por el hecho de que tampoco hay tanta oferta para todas las que somos.

"Antes no sacábamos el drag de un bar o una discoteca a las cuatro de la mañana"

Carmen Farala

Mi carrera yo no la he enfocado tanto en el show sino en redes sociales. El mundo espectáculo prefiero tomármelo con calma, hacer un par de espectáculos al año para no darlo todo, como quien dice. Para que sigan interesados en verme cada vez que actúo. Soy como el cometa Halley, paso de vez en cuando a saludar y entonces es cuando hay que ir a verlo.

Carmen Farala, en una de las imágenes promocionales de su nuevo single, 'Traguito'.
Carmen Farala, en una de las imágenes promocionales de su nuevo single, 'Traguito'.

EI: Precisamente porque estás en redes te juntas con influencers como Lola Lolita o María Pombo. ¿Qué recibimiento sientes?

CF: Pues estoy bastante contenta de poder llenar espacios donde hasta ahora no se consideraba que pudiera haber una drag queen. Como por ejemplo lo que hablábamos antes de los premios de la Academia de la Moda o en revistas muy importantes como Harper's Bazaar o Vogue.

Son espacios en los que parecía que no tenía cabida el drag. Es un honor estar representando, en cierto modo, a la comunidad para que la gente vea todo el trabajo que hay detrás. Por eso también me esfuerzo mucho cada vez que voy a una alfombra roja de este tipo o a algún evento con influencers. Para poder destacar para decir que aquí estamos, que existimos, y que podemos llenar este espacio también. Y he tenido muy buena acogida y es verdad que muchas influencers se han convertido ya en amigas y amigos. Es muy guay ver cómo ayudamos a educar a la sociedad a que se acostumbren a ver cosas que antes no sacábamos de un bar o una discoteca a las cuatro de la mañana.

"Parte de mi papel también es mostrar la seriedad y el rigor que hay detrás del drag"

Carmen Farala

EI: Fuiste de invitada a Maestros de la Costura y Make Up Stars pero, ¿te planteas participar en algún otro concurso?

CF: (se ríe) De momento con Drag Race quedé bastante satisfecha de concursos. Pero no estoy cerrada. Antes de eso tuve propuestas de Maestro de la costura, no en drag sino como persona humana (se ríe). Pero sentía que no era el momento. Y fíjate, creo que todo pasa por algo y luego llegó Drag Race y fue el cambio más importante de toda mi vida. Como te digo, también estoy abierta a probar otro tipo de cosas, sobre todo si se trata el mundo del drag con respeto. Porque llevamos mucho tiempo trabajando y parte de mi papel también es mostrar la seriedad y el rigor que hay detrás, que no son solo bromas y chistes. No siempre tiene que ser el punto de risa.

EF: Y la última pregunta, ¿has llegado a conocer y hablar con RuPaul, creador del formato de Drag Race y, como dice ella, Supermodel of the World?

CF: Sí, hablar con ella es imposible porque va con todo su séquito. Pero cuando estuve en la última convención de Los Ángeles, que es la DragCon, un evento que hacen con todas las reinas de la franquicia de RuPaul's Drag Race, pude estar a su lado y me puso la mano en el brazo (que no me lavo desde entonces) [dice, riéndose]. Y para mí ya, simplemente el estar ahí representando el drag nacional fue todo un logro.

EI: Muchísimas gracias, Carmen.