Un escándalo sacude Argentina. En la intimidad del hogar del que fuera presidente del país iberoamericano, Alberto Fernández (65 años), la violencia floreció supuestamente sin control durante años. Su expareja, Fabiola Yáñez (43), le ha denunciado después de que otra investigación aflorara los mensajes e imágenes reflejando, aparentemente, ese maltrato.

La expareja de Alberto Fernández presentó la denuncia por violencia de género el martes 6 de agosto ante la Justicia argentina pero desde Madrid. Ambos están establecidos en la capital española desde que el político peronista abandonara el poder en diciembre de 2023, aunque Fernández se encuentra estos días en Buenos Aires. Fabiola Yáñez acusa al expresidente de golpearla y amenazarla y lo hace ante el mismo juez que le investiga por corrupción, Julián Ercolini, que le ha puesto una orden de alejamiento.

Alberto Fernández y Fabiola Yáñez llegan a Francia como parte de su tour europeo en 2021.
Alberto Fernández y Fabiola Yáñez llegan a Francia como parte de su tour europeo en 2021. | Esteban Collazo/Presidencia Arge / DPA

Cronología de la relación entre Alberto Fernández y Fabiola Yañez

Alberto Fernández y Fabiola Yañez se conocieron hace una década en la Universidad de Palermo, en Buenos Aires. Ella estudiaba periodismo y tenía 22 años menos que el político, que sonaba entonces para senador de la capital argentina y había ido a ofrecer una charla a los estudiantes.

Su relación comienza un año después y en 2016 ya se habían comprometido tras un viaje a París. La violencia comenzó, según refleja la denuncia, ese mismo año, con discusiones que terminaban a gritos, algo que el propio Alberto Fernández admite. Según él se insultaban, pero lo hacían los dos, tal y como ha contado en una entrevista concedida al diario El País. Él mantiene que nunca llegaron a las manos ni agredió físicamente a Fabiola.

En 2019, Alberto Fernández es elegido como presidente de Argentina y Fabiola Yáñez deja su profesión para ejercer como primera dama. Las críticas hacia ella fueron constantes durante el mandato, sobre todo después de que celebrara un cumpleaños en plena pandemia mientras el pueblo argentino estaba confinado. Ante las críticas, Fernández se desentendió de todo, haciendo responsable solamente a la primera dama. Algo que ella ha señalado posteriormente como uno de los motivos por los que se sintió sola y abandonada durante su relación. "Las personas más allegadas a él sí lo sabían. Si lo sabían y no hicieron nada", dice, acusando al círculo de confianza de su ex.

Los últimos meses fueron los más difíciles, según explica Yáñez, porque tuvo que mudarse a la casa de invitados de Olivos antes las constantes discusiones y peleas. La prensa ya especulaba con la separación, por lo que tras la salida de la presidencia, ella se muda a Madrid con su madre. La última visita del expresidente a su pareja y su hijo habría sido en primavera de este año.

Fabiola acusa a Fernández de violencia física, verbal y reproductiva

Alberto Fernández y Fabiola Yañez no se casaron, a pesar de haberse prometido, y tuvieron su primer hijo juntos en abril de 2022. La comunicadora ya había estado embarazada en 2016, pero asegura que el político la obligó a abortar, ejerciendo "violencia reproductiva". "Comenzó a ignorarme por completo. Vivíamos en la misma casa, pero dejó de hablarme. No me dirigía la palabra en absoluto", comenta ella.

Tras anunciar su embarazo en 2021, Alberto Fernández responsabiliza supuestamente a Fabiola de su caída en las encuestas. Es en esta época, mientras ella estaba esperando a su hijo, cuando se producen las supuestas agresiones de las que hay fotografías. Imágenes que han salido en los últimos días, filtradas a la prensa, y que el expresidente dice no conocer en la entrevista con El País.

En una de las fotos, aparece el ojo morado de Yañez, en otra un enorme moratón en el brazo. Las conversaciones de WhatsApp que se filtran dicen cosas como "Venís golpeándome desde hace 3 días seguidos", a lo que él habría respondido "Me cuesta respirar. Por favor para. Me siento muy mal". "El expresidente alega que el hematoma no se debe a un golpe, sino a un tratamiento estético contra las arrugas", comenta el periodista Horacio Verbitsky tras una entrevista con el exlíder.

Terrorismo psicólogico

Para el expresidente, estas acusaciones de violencia habrían salido por motivos ocultos. "Hay un aprovechamiento político del Gobierno [de Milei]", alega Fernández en su entrevista con El País. Considera que su expareja no tiene motivos para denunciarle, y menciona sus relaciones pasadas como ejemplo de su comportamiento no violento. Además, identifica a Fabiola como una mujer frágil que está siendo manipulada, y no quiere dar detalles de su relación por considerarlos demasiado íntimos.

Sin embargo en la entrevista de Fabiola Yáñez con Infobae, realizada en Madrid porque asegura tener miedo de volver a casa, deja claro que ha sufrido una auténtica campaña de acoso y derribo, con llamadas a todas horas y tácticas para que no pudiera salir de casa. Lo califica como "terrorismo psicólogico", y dice que Fernández amenazaba con suicidarse si no hacía lo que él pedía. Una táctica de manipulación habitual en las relaciones de violencia.

Además, también habla de infidelidades continuas por parte del expresidente. Traiciones de las que Fabiola se enteró porque su hijo encontró vídeos y fotos de algunas de esas mujeres. "A esas alturas ya estaba adormecida, porque esto ocurría todo el tiempo", explica. "Había normalizado esas situaciones", confiesa en la entrevista.