Antes de su muerte, Alain Delon tenía una cosa clara sobre su herencia: no quería que sus hijos se pelearan como ocurrió con el testamento de Johnny Hallyday. El cantante, contemporáneo francés del actor, falleció en 2017 a causa de un cáncer y, aunque dejó sus últimas voluntades muy claras, su familia no estuvo de acuerdo.

Su última mujer, Laeticia Hallyday, y sus hijos mayores estuvieron tres años discutiendo judicialmente hasta llegar a un acuerdo. Su historia habla, además, de las diferentes leyes que aplican en cada país a la hora de recibir bienes de un familiar. Imprescindibles para comprender las diferentes situaciones que se dan en este tipo de casos.

La historia de Johnny Hallyday

Primero, para entender lo que ocurrió con la herencia de Johnny Hallyday hay que recordar sus circunstancias. El cantante, nacido en 1943 a las afueras de París, creció con su tía y sus primas viajando por Europa, puesto que su padre abandonó a la familia y su madre no podía ocuparse de él con su trabajo.

Pronto descubrió su pasión por las artes y dejó de usar su nombre de nacimiento, Jean-Philippe Smet, para sustituirlo por Johnny Hallyday. Su inspiración fue el bailarín, cantante y productor estadounidense Lee Halliday, que formó un trío acrobático en los sesenta con sus primas, que eran bailarinas.

Johnny Hallyday firma su primer contrato discográfico en 1960 y con solo 18 años ya había vendido más de millón y medio de discos. Se convirtió en un éxito absoluto y uno de los artistas más populares del mundo, además de un icono en Francia. Su belleza y su calidad como uno de los iconos del rock también le hicieron, por supuesto, una de las estrellas más deseadas del mundo.

Johnny Hallyday, en una foto de 2002. | Europa Press

Sus cinco matrimonios y cuatro hijos

Se casó en cinco ocasiones, aunque solo con cuatro mujeres. Al comienzo de su carrera conoció a la cantante francesa Sylvie Vartan, con quien estuvo quince años casado y tuvo a su primer hijo, David, en 1966. Después tuvo un brevísimo affair la actriz Babeth Étienne, con quien estuvo solo 65 días casado.

Con la actriz Nathalie Baye no llegó a casarse, pero tuvo su segundo hijo, una niña llamada Laura que llegó al mundo en 1983. En los noventa se casó dos veces con Adeline Blondieau, actriz reconvertida en terapeuta alternativa. Y finalmente conoció a su última esposa, Laeticia Boudou, con quien adoptó a dos niñas vietnamitas, Jade Odette Désirée (nacida en 2004) y Joy, (2008), y con quien vivió en la última etapa de su vida en California (Estados Unidos).

La fortuna de Johnny Hallyday y las donaciones en vida

En California tres años antes de morir Johnny Hallyday firma sus últimas voluntades para la repartición de su fortuna, estimada en 20 millones de euros. En este testamento excluye a sus hijos mayores, David Hallyday y Laura Smet, porque ya habían recibido donaciones en vida. La principal beneficiaria era, por tanto, Laeticia Hallyday (antes Boudou), su última esposa. Sus hijas pequeñas eran aún menores de edad, pero en caso de fallecimiento de su madre les correspondía el 50% del total a cada una.

Pero David y Laura recurrieron a la justicia francesa puesto que, según la ley del país galo, todos los testamentos deben reservar un porcentaje para los hijos. Alegaban que lo más importante para ellos era la gestión del patrimonio cultural de su padre, aunque también señalaban que las donaciones en vida no eran comparables con el patrimonio total. En el caso de la pequeña, lo que había recibido había sido para ayudar en la compra de un piso de 106 metros cuadrados en el centro de París.

Sylvie Vartan, la primera mujer del cantante, denunciaba las "falsas informaciones" explicando que su hijo no había recibido ninguna donación en vida. En particular, desmentía que la vivienda que habían compartido durante su matrimonio, Villa Montmorency, fuera parte del testamento. El 50% que le había correspondido a Johnny Hallyday había sido donado a su hijo David en el divorcio. "¿Os podéis imaginar por un segundo lo que puede sentir David, él mismo siendo artista e hijo de artistas, al estar privado de todo derecho en lo referente a la herencia artística de su padre?", añadía.

Laeticia Hallyday, víctima y verdugo

Por su parte, Laeticia Hallyday se identificaba como víctima en varias entrevistas mientras el público la señalaba por villana. Alegaba que los hijos de Johnny no se habían puesto en contacto con ella tras la muerte del cantante. Que no habían querido acudir a la lectura del testamento. Que con sus demandas le habían robado el duelo de su marido. Que señalaban que las niñas pequeñas eran adoptada con la intención de atacar a su madre.

Sin embargo, también aseguraba estar "dispuesta a perdonar" y quería llegar a un acuerdo con los dos hijos mayores del que fuera su marido. La justicia francesa tomó el control de la situación y congeló los bienes patrimoniales y los derechos de autor de la estrella para que Laeticia no pudiera acceder a ellos. Sin embargo, se negó a aceptar que Laura y David tuvieran derecho sobre el álbum póstumo que Johnny Hallyday preparó.

El acuerdo final

En el verano de 2020, tras tres años de batalla legal que estaba a punto de llegar a su última etapa, los dos hijos mayores de Johnny Hallyday y la viuda de este llegaron a un acuerdo privado. Ponían fin así a las acusaciones y señalamientos con una gran beneficiada.

La revista Closer publicó que la segunda hija del cantante, Laura Smet, recibió de Laeticia Hallyday un cheque de 2,6 millones de euros. A cambio, esta última conserva el patrimonio inmobiliario tanto en la isla de Saint Barth, donde está enterrado Hallyday, como en Los Ángeles y en la localidad francesa de Marnes La Coquette, estimado en entre 28 y 34 millones de euros (31,4 y 38 millones de dólares).

Laeticia Hallyday observa la exposición en honor al cantante, en su debut en Bruselas. | Europa Press

Por su parte, David Hallyday hizo llegar un comunicado a los medios diciendo que renunciaba a la herencia de su padre. En el texto aseguraba que no había recibido nada, ni en el pasado ni más recientemente, ni siquiera objetos personales.

Había más deuda que dinero

En 2023, con la inauguración de una exposición en honor al fallecido artista, Laeticia desveló que el cantante había dejado muchos problemas con la herencia. Al parecer, Johnny Hallyday tenía deudas fiscales que ascendían hasta los 30 millones de euros, que le correspondía a su viuda pagar poco a poco.

David Hallyday ha publicado un disco con las canciones de su padre para el que ha tenido que pedir permiso a la viuda de Johnny Hallyday.

Pero no está en una situación precaria porque sigue siendo la principal beneficiaria de los derechos del cantante. Una cantidad que podría ascender hasta los 3 millones de euros anuales, según desvelan los medios franceses. ¿Y qué pasa con David Hallyday? No recibió nada de la herencia, pero eso no quiere decir que no vaya a sacar provecho de la figura de su padre. Está en los créditos de muchos de los discos que el cantante sacó en las últimas décadas de su carrera.

Y por eso en 2024 ha decidido relanzar Sang pour sang, un álbum de 1999 en el que participó activamente como compositor, en donde canta dúos con su padre fallecido. Y a pesar de aparecer en los créditos, ha tenido que tragarse su orgullo y pedirle permiso a Laeticia Hallyday para publicarlo.