Así ha evolucionado el criticado estilo de Leonor en los últimos premios Princesa de Asturias

El estilo de la princesa Leonor ha sido muy cuestionado. Las críticas comenzaron cuando las dos hijas de Felipe VI y la reina Letizia eran pequeñas, cuando se miraba de reojo que vistieran iguales. Más tarde empezó a comentarse que su vestuario era infantil y, cuando se creciendo, que era de señora. Parece que se ponga lo que se ponga la joven heredera no consigue dar en el clavo como sí lo hace su madre.

La reina Letizia es una de las royals más aplaudidas en cuanto a estilo en Europa. Y su armario no es, ni de lejos, de los más caros sino que se forma con prendas low cost y detalles de otros rangos de precios más elevados. De manera ocasional también ha lucido prendas de alta costura y de diseñadores como Dior, como el que se puso este verano en París. Además, repite con frecuencia algunos de sus estilismos favoritos y tiene accesorios repetidos, incluso, de diferentes colores.

En octubre del pasado año, con motivo del 18 cumpleaños de Leonor, los medios internacionales analizaron el estilo de la princesa. Entre ellos publicaciones como Tatler, que siempre aplaude los trajes del rey Felipe y las elecciones de la reina Letizia. "El estilo de Leonor ha ido con fuerza hacia esta dirección [simple y chic]", asegura. "Ha demostrado madurez sin esfuerzo", añade el artículo. El 1 de noviembre Vogue titulaba: "¿Será Leonor la royal más querida desde Kate Middleton?"

Su mejor apuesta

Sin embargo, el público español considera que la princesa Leonor no consigue dar con el estilo que más le favorece. Sus looks más aplaudidos son aquellos en los que lleva el uniforme militar, tanto del Ejército de Tierra cuando estaba en Zaragoza como el de la Armada ahora en Pontevedra. Por lo tanto, confirma que no es una cuestión de colores que no le favorecen sino de tipo de prenda. Es evidente que la hija de Felipe VI se muestra más cómoda con traje, y en citas como su viaje a Portugal o la jura de la Constitución lo demostró.

Sin embargo, en 2021 la princesa Leonor tenía en mente otras prioridades. Ese año, a punto de cumplir los 16, se puso un minivestido de la firma española Bgo & Me de lo más juvenil. Un diseño con falda de cintura baja de vuelo y manga abullonada con estampado geométrico que combinó con unos zapatos negros de tacón. El pelo lo llevó recogido en una coleta sencilla y, aunque es uno de los looks más bonitos que ha llevado la Princesa, quedó algo desmerecido porque todavía era la época de llevar mascarilla.

Aquel estilismo fue de los más aplaudidos de los últimos tres años en los que hemos visto a la princesa Leonor crecer ante nuestros ojos. Y a pesar de la mayoría de edad, todavía le quedaba mucho camino por recorrer hasta encontrarse cómoda con su propia visión de la moda.

El año estampado

En 2022, la princesa Leonor dejó claro en Oviedo que había dado el paso de niña a adolescente. Se apreciaba en su manera de caminar y en su estilismo, un vestido de lentejuelas de Michael Kors con estampado de palmeras. Y en su manera de comportarse, seria y formal pero cada vez más confiada en su puesto.

Aquello fue llamativo por dos motivos: primero porque no era habitual verla con estampados tan llamativo. Este en particular producía -con las lentejuelas y los dos tonos contrarios- bastante ruido visual. En los años posteriores, Leonor ha confirmado que le gustan más los colores lisos. Segundo porque a pesar de que con 16 años podría haber llevado perfectamente una minifalda como la del año anterior, pero prefirió añadirle unos centímetros de tela al bajo para llegara justo encima de la rodilla.

La gran sorpresa de esta edición fue los pendientes de Chanel que se puso, que venían directos del joyero de su madre. Pero mantuvo su peinado juvenil dejando los dos cabos de su melena sueltos en la parte frontal de su rostro y un spiky bun (un moño con las puntas sueltas), una apuesta muy de moda entre los jóvenes.

Más cómoda en traje que con vestido

Los premios Princesa de Asturias no son como los de Girona, donde Leonor suele atreverse con estilismos más exagerados, los de Oviedo también son muy comentados. El pasado año sorprendió con su apuesta más madura con un vestido de Moisés Nieto en el color azul marino que representa a la capital asturiana. Además, lo conjuntó con unas joyas de aguamarinas que combinaban con sus ojos. Este detalle era especialmente sentimental, puesto que fueron un regalo de don Felipe a doña Letizia por el nacimiento de su primera hija en 2005.

Las críticas aseguraron que el corte del vestido no era favorecedor para la princesa Leonor o que la hacía parecer mayor. Sobre todo en comparación con la reina Letizia, que apostó por un traje con un hombro al descubierto. Tampoco terminan de gustar sus apuestas de tacones, siempre de poco tamaño, a diferencia de los que ha llevado su madre hasta que ha tenido problemas en los pies. Sin embargo, si hay algo que se aplaudió fue su beauty look: el peinado destacando su espectacular melena rubia y el maquillaje discreto destacando sus rasgos. El pasado año la heredera aún llevaba aparato en los dientes, pero esta vez estará por primera vez luciendo su sonrisa perfecta tras la ortodoncia.