La gala de los Premios Princesa de Asturias se ha celebrado este viernes, en una tarde agradable pero gris en la ciudad de Oviedo. Como suele ocurrir, Vetusta estaba engalanada y llena de público expectante desde varias horas antes. Todo para ver llegar a los reyes Felipe y Letizia, acompañados de sus hijas, Leonor y Sofía, y de la reina emérita Sofía. También para presenciar la entrada de los premiados, como es Carolina Marín o Joan Manuel Serrat. O los invitados, entre los que estaba Víctor Manuel, acompañado de Ana Belén; Esther Alcocer Koplowitz o algunos políticos como Feijóo.
A diferencia del pasado año, que la ceremonia comenzó bajo la lluvia, esta vez el sol brillaba entre las nubes. Por lo tanto, el clima ha permitido que la familia real tuviera un momento más distendido a la entrada del Teatro Campoamor de Oviedo. Al son de las gaitas, el público se ha deleitado al ver a la reina Letizia llevarse todo el protagonismo con un vestido negro con enorme volante en el escote. Un traje firmado por una de sus marcas de referencia, Carolina Herrera.
El sorprendente estilismo de la reina Letizia
Una potente apuesta de vestuario que contrastaba con la sobriedad de don Felipe y la princesa Leonor, ambos luciendo trajes oscuros. La infanta Sofía también ha preferido ponerse americana y pantalones, aunque su chaqueta de brillos supone un corte con los colores apagados del resto de la familia. De la misma manera la reina Sofía, que se ha puesto una elegante chaqueta blanca de inspiración india, ha roto con el negro del resto de su estilismo.
El vestido de la reina Letizia sin duda ha eclipsado al resto de los asistentes. Es habitual que la mujer del rey Felipe escoja un diseño nuevo para estos premios celebrados en su ciudad, a los que acuden también su madre y sus excompañeros de profesión. Pero esta vez el espectacular vestido de escote asimétrico con volantes XXL y falda de tubo con largo midi ha contrastado con la sencillez del resto del acto.
Como accesorios, Letizia se ha mantenido en el color negro con sus básicos destalonados de Magrit y una cartera a juego de la misma firma. Incluso los pendientes, firmados por De Grisogono, eran del mismo tono.
La princesa Leonor apuesta por el traje
Si ya era evidente tras verla con los uniformes militares, esta tarde la princesa Leonor ha reafirmado que está más cómoda con un traje. En esta ocasión se ha puesto un conjunto de tres piezas formado por americana, chaleco y pantalones en color negro. Un estilismo serio y profesional que ha aderezado con unos sencillos pendientes que le regalaron a doña Letizia por su boda con don Felipe.
La novedad en su elección es quizás el peinado, que contrasta con el pelo suelto que ha lucido en los últimos días y con el recogido tirante e impoluto que lleva en sus horas como militar. Se trata de un moño bajo y efecto despeinado, con mechones sueltos, lo que le ofrece un aspecto muy juvenil.
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