Armie Hammer, a quien ya va a ser difícil recordar sin mencionar las acusaciones de canibalismo o violencia sexual, está intentando recuperar su vida. Y empieza con buen pie, porque Deadline anunció este miércoles que vuelve a la gran pantalla como en el western Frontier Crucible, con Thomas Jane como compañero de reparto y el productor Dallas Sonnier a cargo del filme. Eso sí, lo ha conseguido sin agente o agencia de publicidad. Yo me lo guiso yo me lo como.

Una muestra de que a pesar de todo lo que pasó con Armie Hammer hace tres años, el actor sigue teniendo apoyos en Hollywood. En 2021, varias mujeres le acusaron públicamente de abuso sexual. Uno de los casos llegó a ser investigado por la policía de California, pero las autoridades citaron falta de pruebas y el actor se fue con el historial en blanco. Posteriormente ingresó en una clínica para adicciones, y en 2022 cogió su maleta y huyó de Estados Unidos. Estuvo trabajando en una inmobiliaria en las Islas Caimán, donde su familia tiene diversas propiedades. Ahora ha decidido volver a Los Ángeles. Su intención es volver a la vida pública en un proceso de redención muy estudiado, consciente de que su imagen será lo más difícil de rehabilitar.

Hay que recordar que nada es casualidad, y que a pesar de que perdió el apoyo de su agencia de representación y los contratos que tenía, Armie Hammer tiene aún millón de seguidores en Instagram. Así que para poder reconstruir su perfil como un prestigioso actor de Hollywood, o al menos para poder seguir viviendo de lo que un día fue, el polémico intérprete ha lanzado un pódcast llamado HammerTime. Un juego de palabras con su apellido que, viendo el vídeo con el que pretende introducir cada episodio, también juega con cómo el escándalo ha destruido su imagen.

El rudimentario pódcast de Armie Hammer, rodado en su "armario", la casa en la que vive. | YouTube

Se acabó el silencio

Dice que este pódcast es una oportunidad para aprender cosas que desconocía y que otros saben. Por eso en el primer episodio ha invitado a alguien que, a su parecer, tiene una historia similar a la suya y que parece ser de aquellos aliados que aún le quedan. Tom Arnold, actor y guionista de películas y series como Mentiras arriesgadas o Roseanne, también ha lidiado con la adicción y con el abuso sexual infantil. Uno de los primeros pasos de Armie Hammer tras saltar el escándalo fue admitir la derrota.

"Me acuerdo cuando todo se supo. Me llamaron mi agente y mi publicista, tuve a gente experta en gestión de crisis, tres personas a las que estaba pagando y de las que rápidamente me di cuenta de que no sabían de lo que estaban hablando", comenta. Al final a quien hizo caso era a su abogado, que le dijo que no hablara para evitar ir a la cárcel. Se internó en un centro de rehabilitación durante nueve meses para gestionar no solo su adicción a las drogas, al alcohol y al sexo. También el pasado de abuso con el que tuvo que lidiar cuando no era más que un niño.

Armie Hammer vive en "un armario"

Por lo tanto, tiene mucho con lo que identificarse con Tom Arnold, con quien además parece ser capaz de hablar sin miedo, vergüenza o, incluso, arrepentimiento. Lo primero que menciona el veterano actor es que Armie Hammer vive en "un armario", ante lo que él mismo responde que es lo único que puede permitirse. Explica que cuando entró a vivir había agujeros en las paredes, y que se ha encargado de arreglar lo máximo posible. Sin embargo, aún le queda mucho y parte del interés del pódcast, según el mismo comenta, es ver cómo va aprendiendo y mejorando.

Es decir, a falta de personas que quieran contratarle para contar sus historias, su intención es reflejar la suya propia. Un diario en el que compartir con la multitud de fieles seguidores que aún le quedan su camino a la redención. "Mi amigo Tyler me dice que nunca había visto un reinicio tan fuerte de la vida de alguien", bromea Armie Hammer.

Ya lo hizo cuando publicó que vendía su coche porque no podía permitirse la gasolina, pero el actor, que es bisnieto de uno de los mayores empresarios de petróleo de Estados Unidos, reitera que no tiene dinero. Por eso vive en un barrio en el que no le gustaría que sus hijos caminaran. O graba un pódcast de esta manera tan amateur. Porque quiere dejar claro que su situación económica es mala.

¿Sabe Armie Hammer lo que ha hecho mal?

A pesar de que su energía es positiva y su cara muestra una sonrisa durante prácticamente todo el episodio, a Armie se le escapan en varias ocasiones muestras de lo que realmente pasa por su cabeza. Admite que cuando su vida saltó por los aires, lo primero que hizo fue enfadarse. Se sintió abandonado cuando todas las personas que trabajaban con él le abandonaron. Ahora hace un esfuerzo para comprender que el primero que cometió errores fue él, no solo consumiendo sustancias y siendo infiel a su mujer. También forzando situaciones en las que el consentimiento sexual se pudo cuestionar.

"A veces piensas 'es raro lo que me pasó cuando me puse en la posición para que me pasaran todas esas cosas'", bromea, en una extraña admisión de culpa en la que no abandona el sentido del humor. Deja claro que le preocupa que sus hijos lean lo que se dice de él. Aunque insinúa que lo que podrían encontrar en internet no es la verdad. "Me da mucho miedo que mis hijos puedan buscarme en Google y a saber lo que pueden encontrar", comenta con gesto de preocupación.

Canibalismo, BDSM y abusos

"Abusó de mí un sacerdote. Siempre son los hombres de la iglesia", explica. Asegura que, como abusaron de él antes de descubrir por su cuenta lo que era el sexo, en la edad adulta ha querido tener el control en los encuentro íntimos en los que ha participado. Así justifica su interés por las relaciones de dominancia, pero ya cuando saltó el escándalo el mundo del BDSM (Bondage, Disciplina, Dominación, Sumisión, Sadismo y Masoquismo) dejó claro que de lo que se acusaba a Hammer era de abuso, no de prácticas fetichistas.

"Un beso requiere consentimiento, tocar a alguien de manera sensual requiere consentimiento. El BDSM y el sexo fetichista requiere consentimiento. Sin consentimiento, todas esas acciones son abuso", aseguraba al respecto Brad Sagarin, profesor de psicología de la Universidad del Norte de Illinois en una entrevista con USA Today en 2022. Algo en lo que también insistía el Dr. DJ Williams, exdirector del Centro de Positividad Sexual: "Lo básico para este tipo de juegos incluye lo que llamamos las 4C de negociación: comunicación, consentimiento, cuidados y precaución. Es esencial que, hagas lo que hagas de manera erótica, sea siguiendo estos básicos", revelaba en 2021.

Con todo, Armie Hammer tiene la energía y el buen humor como para tomarse a risa incluso las acusaciones de canibalismo. De hecho, en la descripción de su pódcast bromea con ello. "Ahora me gusta ese tema", comenta el actor. Y a pesar de todo esto, parece que los movimientos de Armie Hammer están teniendo el efecto esperado. Solo 48 horas después del estreno del primer episodio, cerca de 1.600 personas se han suscrito al pódcast y 11.000 han visto la primera hora de metraje. No es Call me by your name, pero es un éxito.