El Juzgado de lo Penal número 3 de Jerez de la Frontera (Cádiz) ha condenado a dos años y un mes de cárcel al cantaor Diego Ramón Jiménez Salazar. El conocido como Diego 'El Cigala' ha sido declarado culpable de malos tratos sobre su exmujer, según el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA). La sentencia no es firme y todavía se puede interponer recurso de apelación ante la Audiencia Provincial de Cádiz. Pero le condena por un primer delito de malos tratos en relación a una agresión cometida sobre la víctima en un hotel de Jerez. Por ello le impone seis meses de prisión y la prohibición de comunicarse y aproximarse a menos de 200 metros de ella por un plazo de dos años.

Asimismo, condena al cantaor por un segundo delito de malos tratos a su exmujer por una agresión ocurrida en un hotel de Palafrugell (Girona). Por lo que le impone ocho meses de cárcel y la prohibición de comunicarse y aproximarse a 200 metros de su expareja en dos años. Además la jueza también condena a 'El Cigala' por malos tratos agravados por la agresión cometida en la casa de Jerez en la que estaban conviviendo. Fija en este caso una pena de once meses de prisión y la prohibición de comunicarse y aproximarse a 200 metros en dos años.

Un delito de vejaciones

No solo eso. También por un delito leve y continuado de vejaciones en el ámbito doméstico está condenado a 25 días de localización permanente, siempre en domicilio diferente y alejado del de la víctima. Pero queda absuelto de un delito de maltrato agravado por hechos ocurridos en Punta Cana (México) en el mes de agosto de 2017. No considera probado que cuando la mujer estaba con su hijo en brazos esperando un vuelo en el aeropuerto se acercara a ella, la agarrara del brazo y la zarandeara. ''El Cigala' le recriminaba que se fuera de viaje.

La jueza no se pronuncia sobre la indemnización de 3.000 euros que solicitó la acusación particular en el juicio, celebrado el pasado 7 de noviembre. Los expertos de la Unidad de Valoración Integral de Violencia de Género (UVIGV) "han concluido" que la víctima "no presenta sintomatología psicológica". Según la jueza, en este caso "solo puede valorarse la pretensión de indemnización por secuelas psicológicas". El daño moral queda excluido "la posibilidad de valorar una indemnización".

Hechos probados

La magistrada explica en la sentencia que el cantaor y su exmujer iniciaron en 2014 su relación, fruto de la cual han nacido dos hijos. Durante la relación sentimental, ambos "han convivido juntos en la casa en la que él tiene fijada su residencia sita en República Dominicana".

Mientras duró la relación sentimental, la mujer "ha sido dependiente económicamente del acusado", precisa la jueza. Durante su estancia en República Dominicana "nunca dispuso de una tarjeta ni una cuenta bancaria propias". Por lo que "los gastos familiares (alimentación, vestido, empleada del hogar y cuidadoras de los hijos, atención médica, viajes a España…) fueron sufragados en su integridad por el acusado".

Cuando la víctima se quedó embarazada de su primer hijo, tal y como señala la magistrada, la relación sentimental entre ambos "comenzó a deteriorarse y las discusiones entre ellos (…) se volvieron frecuentes". Considera probado que en estas discusiones, "ambos se gritaban mutuamente". El cantaor "con menosprecio hacia la persona" de su entonces pareja, le profería expresiones como 'puta', 'maldita perra', 'desgraciada'. Hasta el punto en el que le llegó a echar de la casa o de la habitación "como forma de desprecio".

Bofetadas, empujones y patadas

Hace referencia a un episodio ocurrido en el verano de 2017. Ambos se encontraban hospedados en un hotel de Jerez y se entabló una discusión "acalorada". Él quería salir y ella "le exigía que se quedara con ella y con su hijo".

Durante esta discusión 'El Cigala' le propinó "una bofetada en la cara" a la víctima, relata la sentencia. Otro episodio ocurrió el 7 de julio de 2019 después de un concierto del acusado en Palafrugell. En la habitación de un hotel, y tras "un enfrentamiento verbal acalorado" entre ambos, el cantaor "le propinó un empujón que la hizo caer al suelo. Estando tirada en el suelo, el acusado le siguió dando golpes y patadas por el cuerpo". La jueza considera probado también que, aproximadamente en el mes de noviembre de 2020, y estando ambos conviviendo con los hijos en una casa en Jerez, se produjo una discusión durante la que el acusado la agarró del cuello diciéndole "me cago en tus muertos".

No probado relación asimétrica

En cambio, la magistrada no considera probado que la relación fuera "asimétrica". O que haya "existido una situación de dominación y sometimiento por parte de él hacia ella". Tampoco que 'El Cigala' haya fiscalizado los gastos y el dinero "como forma de controlar, dominar y coartar su libertad".

En la sentencia, la jueza explica que la valoración de las pruebas ha sido "extraordinariamente compleja". Entre otras cosas por la dimensión internacional del acusado. Pero también por el "posible interés de algunos testigos en el resultado del procedimiento". Subraya que la declaración de la víctima ha sido "la principal prueba de cargo practicada contra el acusado y sobre la que se asientan de forma principal los hechos que han sido declarados probados".

Precisa que la mujer "ha sido clara, congruente, coherente" y "plenamente persistente". Además, "no se han intuido móviles espurios de resentimiento o venganza hacia el acusado por el fracaso de la relación sentimental ni tampoco una intención de arruinar su carrera profesional por no sucumbir a sus exigencias económicas". Por ello, valida su testimonio en un caso en el que "no existen partes facultativos que objetiven lesiones físicas". Incluso aunque "los informes periciales aportados por posibles secuelas psicológicas han arrojado resultados contradictorios".

Además, señala que se han encontrado dificultades por "la antigüedad de algunos de los hechos enjuiciados". También por "la imprecisión en su descripción en el tiempo" y por el hecho de que "varios de ellos ocurrieron fuera del territorio español".