El ministro de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación, José Manuel Albares, ha insistido una vez más en que el diálogo es ahora mismo la mejor manera de reconducir la crisis entre Rusia y Ucrania descartando con ello que España pueda seguir los pasos de otros socios europeos que han decidido enviar armas y material militar a Kiev.

Desde la capital ucraniana, donde se ha reunido con su homólogo ucraniano, Dimitro Kuleba, el ministro de Exteriores ha recalcado que España, al igual que la UE, trabaja "por un escenario en el que cualquier diferencia que pueda haber se resuelva a través del diálogo, un diálogo que dé paso a la distensión y para eso es necesaria una desescalada en estos momentos".

"Creemos que es el momento de la diplomacia, no de abrir escenarios e hipótesis que no están ahí", ha sostenido Albares al ser preguntado sobre si España podría emular a otros países y suministrar armamento a Ucrania como muestra de apoyo ante el riesgo de nueva invasión por parte de Rusia.

En su opinión, "se dan todas las condiciones" para que el diálogo permita reconducir esta crisis pero al igual que hay unidad en el seno de la UE en esta apuesta también la hay en la disuasión, de ahí el paquete de sanciones masivas contra Rusia elaborado y que se adoptarían en caso de agresión.

"Es un escenario que no queremos, que no es inevitable pero para el que estamos preparados de forma unida", ha prevenido en rueda de prensa conjunta con Kuleba, que precisamente ha agradecido que la UE tenga ya preparadas dichas sanciones.

Albares ha insistido en que aún es "factible" encontrar soluciones que permitan proteger la seguridad de todos los estados europeos "salvaguardando los principios en los que se basa el Derecho Internacional soberanía, integridad territorial de los estados y la prohibición del uso o de la amenaza del uso de la fuerza".

Apoyo a la integridad de Ucrania

Así las cosas, Albares ha aprovechado para trasladar una vez más al Gobierno ucraniano el respaldo de España a su soberanía e integridad territorial, al tiempo que ha reconocido que sigue "con preocupación" la presencia de las tropas rusas en la frontera ucraniana.

Como ya ha venido haciendo en los últimos días, el jefe de la diplomacia ha insistido en que "nadie se está preparando para la guerra en este lado de Europa" y ha defendido la importancia de "no introducir más tensión o crear profecías que tienen que terminarse cumpliendo" ni "dar la impresión de que es un escenario inevitable" puesto que "hoy en día lo que se está privilegiando es la vía diplomática".

Por su parte, el ministro ucraniano ha agradecido el apoyo de España a las futuras sanciones en caso de agresión rusa y ha asegurado que "la situación sigue siendo tensa pero controlada". Asimismo, ha coincidido con Albares en que el diálogo es la "estrategia más eficaz" para superar esta crisis.

Asimismo, ha advertido de que "no se trata solo de una amenaza para Ucrania" sino para Europa en su conjunto y ha opinado que lo que busca Rusia es "tomar revancha por haber perdido la Unión Soviética la Guerra Fría".

Ucrania agradece las sanciones previstas

Por otra parte, aunque ha celebrado que tanto la UE como Estados Unidos tengan preparadas sanciones masivas contra Rusia en caso de invasión o agresión militar, ha recordado que Ucrania ya lo planteó en noviembre pero ha llevado tiempo. "Había dudas, había escépticos pero la razón y la responsabilidad han ganado", ha celebrado.

En este sentido, ha sostenido que Rusia ya había venido violando en los últimos años "una serie de normas del Derecho Internacional" así como algunas de las disposiciones de los Acuerdos de Minsk en relación con el conflicto en el este de Ucrania.

"Por estas acciones sí que se podrían haber adoptado antes ciertas medidas o sanciones para demostrar la determinación de llevar a cabo acciones severas", ha lamentado Kuleba, que no obstante ha reconocido que el paquete de sanciones preparado ahora "ya está siendo una medida eficaz de disuasión".