"Pedimos a España más ayuda militar, que contribuya a cerrar el espacio aéreo. Y por supuesto que nos apoye para entrar en la Unión Europea", afirma el diplomático.

Ha pasado ya más de un mes desde el comienzo de la invasión de Ucrania por parte del ejército ruso. Tras semanas de devastación, el embajador de Ucrania en España, Serhii Pohoreltsev, recibe a El Independiente para subrayar de forma incisiva las razones que harán triunfar a Ucrania y a la democracia frente al totalitarismo de Putin.

Pregunta.- ¿Cree usted que Putin pensó que esto iba a ser un paseo militar, minusvalorando la resistencia de sus compatriotas, y que se ha encontrado atrapado en una guerra que va a durar mucho más de lo que tenía previsto?

Respuesta.- Efectivamente, según la información de los servicios de inteligencia tanto ucraniano como occidentales, Putin no esperaba que Ucrania resistiera más de 2 ó 3 días. En los últimos 8 años Rusia gastó miles de millones de dólares (algunas fuentes dicen que unos cinco mil millones de dólares) para la propaganda y para financiar a los políticos prorrusos. Parece que tanto estos políticos como los oficiales del Servicio de Seguridad simplemente se han apropiado de gran parte de este dinero. Como resultado, sus informes a Putin distorsionaban sustancialmente la situación real en Ucrania. Aunque si todo este dineral hubiera sido gastado a propósitos previstos y Putin recibiese un informe objetivo, no podría prever lo unido que estaría el pueblo ucraniano. Putin pensaba que lo que denomina públicamente como una «operación especial» en Ucrania sería un desfile militar. 

P.- Parece evidente que estamos ante una invasión en toda regla. Y que ni un solo metro cuadrado de territorio ucraniano, ni en alguna región oriental como la de Donbás, pertenece a Rusia, por lo que a Putin no le asiste razón alguna.

R.- Nadie en el mundo real duda de que se trata de una agresión en toda regla. La resolución de la Asamblea General de las Naciones Unidas aprobada el 2 de marzo da nombre a esta invasión de forma inequívoca.

Pero, hay que reconocerlo, en la mente de Putin existe otra realidad, una paralela, que es en la cual vive gran parte de la población rusa.

En cuanto a los territorios de Ucrania ocupados por Rusia, por mucho que se esfuerce Putin, seguirán siendo las partes inalienables de Ucrania, ni la nación ucraniana ni la comunidad internacional van a aceptar su ocupación. Esta postura está fijada en las resoluciones de la Asamblea General de las Naciones Unidas y de otros organismos internacionales.

P.- Se ha bautizado ya como la guerra de Putin y de sus oligarcas; un puñado de alrededor de cien multimillonarios con intereses energéticos y petrolíferos, básicamente.

R.- No me atrevo a insistir en que sea una guerra de los oligarcas rusos. No creo que haya sondeos fidedignos que permitan evaluar si las declaraciones públicas de los multimillonarios rusos son sinceras.

Dudo que en su mayoría sean empresarios independientes. Tengo razones para creer que son testaferros de Putin. De otra forma, se darían cuenta de que esta guerra les perjudica en primer lugar a ellos. Y Putin… Creo que está guiado por una idea mesiánica de restablecer el Imperio ruso, al menos en sus fronteras de 1914. Para Putin es una obsesión casi religiosa. Y como tal no necesita argumentos racionales.

Llevamos defendiendo nuestro país 33 días mientras las tropas invasoras en este tiempo no han conseguido ninguno de sus objetivos estratégicos

Llevamos defendiendo nuestro país 33 días mientras las tropas invasoras en este tiempo no han conseguido ninguno de sus objetivos estratégicos"

P.- ¿Hasta qué punto estamos ante una guerra motivada por razones meramente económicas?

R.- Desde el punto de vista económico, la Rusia de Putin no gana absolutamente nada. Pero los costes serán enormes. Las sanciones impuestas a Rusia en respuesta a esta agresión harán retroceder al menos 3 décadas. Y este es un escenario positivo. Recordamos que en unas condiciones económicamente similares la Unión Soviética se desintegró.

P.- ¿Cómo valora la reacción de Occidente para acoger a millones de refugiados?

R.- La Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados habla de 3,8 millones de refugiados y 10 millones de desplazados internos. Son cifras enormes que Europa no ha visto desde la Segunda Guerra Mundial. Creo que Occidente está reaccionando de forma adecuada a esta crisis humanitaria, aunque todavía es difícil evaluar su escala real. Muchos países han simplificado los procedimientos de entrada para los desplazados ucranianos de manera drástica. Las medidas de acogida también están a la altura del reto. La población de Ucrania en general, lamentablemente, va a necesitar este apoyo externo por un período prolongado. Aprovechando esta ocasión querría agradecer a España y personalmente al Presidente Sánchez por las actuaciónes rápidas en cuanto a la acogida de los ucranianos que se vieron obligados a dejar sus hogares. 

P.- Estamos hablando nada menos que del mayor éxodo desde la referida Segunda Guerra Mundial.

R.- Por desgracia, sí, el éxodo es masivo. Imagínese que, hasta la fecha, se trata de una cuarta parte de la población que se ve obligada a abandonar sus hogares y buscar refugio en las partes más seguras de Ucrania occidental o en el extranjero.

P.- ¿A qué atribuye que en España y en otros países de nuestro entorno occidental se haya generado una corriente, aún minoritaria, de simpatía hacia Vladimir Putin? Les tildan a ustedes de "nazis" y, en esta guerra de desinformación, se han hermanado los populismos de extrema derecha y de extrema izquierda.

R.- Yo diría que esta corriente no solo es minoritaria sino en primer lugar marginal. ¿Por qué siente simpatía hacia Putin y repite sus narrativos propagandísticos?

Creo que hay dos aspectos para tener en cuenta. En primer lugar, se debe a los medios de propaganda rusa que durante muchos años alimentaban la narrativa putinista sembrando fobias y desinformación.

Además, por otro lado, lamentablemente muchos políticos europeos cayeron en la tentación de obtener apoyo del Kremlin a través transferencias opacas para servir en cambio de megáfono para los mensajes de propaganda rusa. 

P.- ¿Puede hacer más Occidente, tanto la UE como la OTAN y Estados Unidos, de lo que ya están haciendo? Sobre todo, enviar más armas para apoyar a la resistencia ucraniana.

¿Qué diría a los que todavía defienden a Putin? "Muy sencillo, ¡que se vayan a Mariupol con sus familiares pasar algunos días allí y evidenciar los crímenes de lesa humanidad que se cometen por las tropas rusas contra el pueblo ucraniano"

¿Qué diría a los que todavía defienden a Putin? "Muy sencillo, ¡que se vayan al diablo!"

R.- La respuesta, corta: sí, puede. Uno siempre puede hacer más, en especial, cuando de verdad quiere hacer más. Las declaraciones políticas fuertes son de poca ayuda en la batalla campal.

Las Fuerzas Armadas de Ucrania ya sorprendieron tanto al enemigo como a nuestros socios que no esperaban que Ucrania resistiera más allá de 3 días. Y llevamos defendiendo nuestro país 33 días mientras las tropas invasoras en este tiempo no han conseguido ninguno de sus objetivos estratégicos.

Sin embargo, hay que darse cuenta de que las Fuerzas Armadas de Ucrania se enfrentan a un enemigo -se dice que es el segundo ejército más potente a escala mundial- que se estaba preparando para esta guerra al menos desde hace 8 años. Hay que reconocer que Rusia todavía tiene ventaja material y tecnológica en el campo de batalla y en el aire. Pero los hombres y mujeres ucranianos superan a las tropas invasoras en preparación y especialmente en motivación.

Occidente tiene capacidad y, ante todo, obligación moral de armar a los defensores ucranianos. No hay duda de que Ucrania va a ganar esta guerra. Ya la estamos ganando. Occidente es consciente de esto.

En términos prácticos, Occidente puede echarnos una mano en cerrar el cielo sobre Ucrania. Es fundamental. Es urgente. Los ataques aéreos rusos van dirigidos en primer lugar contra los civiles. Las tropas rusas en el terreno que, bajo protección aérea, bombardean indiscriminadamente los barrios residenciales con los sistemas de lanzacohetes múltiples no tendrán la capacidad de seguir haciéndolo impunemente. Con una respuesta contundente en el aire evitaremos estas enormes bajas entre los civiles.

Occidente, al fin y al cabo, debe darse cuenta de que esta guerra se libra entre el totalitarismo expansionista de Putin y el mundo democrático. 

La UE y la OTAN tienen que hacer máximo para minimizar la pérdida de vidas humanas en Ucrania, principalmente de los niños y mujeres, y suministrarnos sistemas antiaéreos, más armas, presionando económicamente al país agresor.

P.- ¿Les hubiera gustado que, además de ayuda económica y envío de armas, hubiera habido una involucración de tropas de la OTAN en esta cruenta invasión?

R.- No somos ingenuos. Mientras Ucrania no sea miembro de la OTAN, no esperamos que la Alianza se involucre directamente con sus tropas en el suelo ucraniano (o en su espacio aéreo) para luchar contra los invasores.

P.- ¿Serán suficientes las duras sanciones económicas adoptadas contra Putin para doblegar su afán imperialista y hacerle reconsiderar su posición?

R.- Las sanciones económicas tienen que ser devastadoras, hay que ampliarlas. Se necesita que los bienes incautados de los oligarcas rusos sean utilizados para comprar armas para Ucrania, así como para los fines humanitarios.

Las medidas restrictivas contra Rusia tienen efecto a medio y largo plazo. Los niños de Mariupol no pueden esperar tanto. Se necesita una mayor presión contra el Kremlin. 

El suministro del armamento a Ucrania, el aislamiento diplomático de Rusia, las sanciones económicas y la salida de grandes corporaciones deben crear una situación insostenible tanto para el Kremlin como para la población rusa.

Desde hace 22 años el pueblo de Rusia ha avalado en las urnas y sigue apoyando este régimen criminal. Incluso ahora la mayoría de la población rusa apoya la decisión de Putin de invadir Ucrania, 20% más que antes de la guerra. Es decir, dos tercios aprueban la guerra. Y las protestas en Rusia son débiles. Los que apoyan a la política putinista, aunque de forma tácita, son igualmente culpables de crímenes que se cometen ahora en Ucrania. 

P.- Ello a pesar de que estas sanciones, en buena medida, se están volviendo contra algunos de los estados de la UE que las han impuesto, como por ejemplo Alemania, cuya dependencia del gas ruso superaba, increíblemente, el 40 por ciento de su consumo total.

R.- La dependencia energética de algunos países europeos, en primer lugar, de Alemania, fue creada de forma consentida, voluntaria.

A partir de 2008 -y especialmente desde hace cinco años- Ucrania trataba de convencer a sus socios europeos de que ninguno de los proyectos energéticos rusos debían considerarse un proyecto económico ya que carecían de fiabilidad. Los recientes proyectos energéticos rusos son nada más armas de presión geoestratégica para el Kremlin contra Europa. Lo podemos evidenciar con los precios de gas y energía.

Desde hace 22 años el pueblo de Rusia ha avalado en las urnas y sigue apoyando este régimen criminal. Y dos tercios de la población aprueban la guerra"

Desde hace 22 años el pueblo de Rusia ha avalado en las urnas y sigue apoyando este régimen criminal. Y dos tercios de la población aprueban la guerra"

P.- Si las negociaciones siguen adelante de forma seria, considera que se va a pedir a Ucrania que sea neutral y, por lo tanto, que renuncie de forma definitiva a entrar en la UE y en la OTAN?

R.- En la Constitución está escrito que Ucrania tiene que seguir con su camino de entrar en la OTAN y, por nuestra seguridad, es esencial. Ahora tenemos que acabar con la guerra y conseguir garantías de seguridad para nuestro pueblo.

P.- El presidente norteamericano, Joe Biden, calificó hace algunos días, por primera vez, a Putin como "criminal de guerra". Supongo que comparte esta opinión.

R.-  Claro que sí, Putin es un criminal de guerra. A principios de marzo, la Corte Penal Internacional abrió oficialmente el expediente e inició una investigación a Rusia por posibles crímenes de guerra, crímenes de lesa humanidad y actos de genocidio en Ucrania.

P.- El presidente Volodimir Zelenski se está revelando como un auténtico líder; un héroe que no ha abandonado a su pueblo un solo segundo. ¿Están ustedes orgullosos de su comandante en jefe, habida cuenta además que no es, o no era, un político profesional?

R.- Sí, estamos orgullosos de nuestro líder nacional. Es la cara visible de la unidad y resistencia nacional. Es una enorme suerte poder contar con él, en especial en los momentos tan graves que está viviendo el pueblo ucraniano.

P.- ¿Son serias las negociaciones con los invasores? En los últimos días, de hecho, las tropas rusas se están cebando con la población civil, arrasando el teatro de Mariúpol o lanzando obuses contra un centro comercial. Ya se ha visto lo que vale la palabra de Putin.

R.- Durante varios meses el Kremlin mentía abiertamente a la comunidad internacional, negando cualquier intento de agresión contra Ucrania, y al mismo tiempo ridiculizaba a las agencias de inteligencia occidentales por sus informes sobre una invasión inminente.

Sabemos cuánto vale la palabra de Putin, de su ministro de Exteriores o de sus oficiales. Lo sabemos desde hace años.

La situación en Mariúpol es crítica. La devastación es total. Solo se puede comparar con Guernica o Coventry. La ciudad de 400 mil habitantes antes de la guerra está asediada y cercada desde hace 4 semanas. Ya es una ciudad fantasma.

Tenemos que negociar. Parece que los rusos no estén dispuestos a hablar en serio. Perece que todavía permanezcan en el mundo virtual creado por Putin. Tenemos que poner fin a la guerra y fijarlo en un documento. Hay cosas fundamentales e indiscutibles para nosotros, que son nuestra soberanía, la integridad territorial, garantía de seguridad y desocupación del territorio de Ucrania.

Estamos orgullosos de nuestro líder nacional. Es la cara visible de la unidad y resistencia nacional.

Estamos orgullosos de nuestro líder nacional. Es la cara visible de la unidad y resistencia nacional"

P.- ¿No ha sido el mundo occidental demasiado paciente con un sátrapa como Putin?

R.- Demasiado paciente y demasiado lento en tomar las decisiones. Lo que estaba ocurriendo en Ucrania, los planes de guerra de Putin, se conocían perfectamente en la Unión Europea y en la OTAN. En Ucrania estamos sufriendo las consecuencias de no haber tomado decisiones a tiempo y frenado a Putin antes.

P.- Se han vivido momentos de terrible tensión, como los ataques rusos a la central nuclear de Chernóbil; algo que hizo saltar las alarmas en todo el mundo y motivó incluso la intervención de la Agencia Mundial de la Energía Atómica.

R.- El Organismo Internacional de Energía Atómica no tiene acceso a las instalaciones nucleares capturadas por la tropas rusas. No se trata solo de Chornóbyl, sino también de la central nuclear de Zaporizhzha en Energodar, la más grande de Europa, donde hubo incendio después de los bombardeos rusos. No tenemos la información fidedigna por lo qué ocurre allí dentro.

Rusia se comporta como un terrorista. De hecho, lo es. La amenaza para todo el mundo es muy alta, hay 4 plantas atómicas en Ucrania que en total suman 15 reactores.

P.- Zelenski, ha llegado a referirse a este conflicto como una auténtica Tercera Guerra Mundial.

R.- El presidente Zelenskyy tiene razones al referirse a esta invasión como la Tercera Guerra Mundial. Hay muchos países ya involucrados. De una u otra manera. Económica, logística o materialmente. 

De Occidente, de su determinación, en gran medida depende si el campo de batalla se expanda fuera del territorio ucraniano, dónde se parará el invasor ruso y qué precio final pagaremos todos.

P.- Una medida que se ha cuestionado en los últimos días ha sido la suspensión, por parte del líder ucraniano, de la actividad de hasta 11 grupos políticos acusados de prorusos.

R.- Espero mayor apoyo por parte de España en el ámbito militar y en lo que se refiere al apoyo de la integración de Ucrania en la UE.

Necesitamos más armas, mayor presión contra los oligarcas rusos que tienen sus activos en España, para los negocios con Rusia. También se necesita una mayor contribuicón humanitaria para Ucrania.    

P.- Me consta que están ustedes especialmente agradecidos al pueblo español por su especial solidaridad para con los refugiados que llegan desde su país.

R.- Sí, el pueblo español desde el primer instante se mostró solidario. Estoy impresionado, no voy a ocultarlo. Nuestras líneas telefónicas están saturadas. Todo el mundo quiere aportar algo. Los empresarios, los transportistas, las ONGs.

Pedimos a España, que contribuya a cerrar el espacio aéreo. Y por supuesto que nos apoye para entrar en la Unión Europea

Pedimos a España más ayuda militar, que contribuya a cerrar el espacio aéreo. Y por supuesto que nos apoye para entrar en la Unión Europea"

P.- ¿Le merece la misma consideración la posición del Ejecutivo que preside Pedro Sánchez? Al principio algunas voces le acusaron de ponerse un poco de perfil.

R.- .Tratándose de la cuarta economía de la Unión Europea, aquí vuelvo a preguntar si se puede hacer más. España está en condiciones de proporcionar a nivel bilateral más armas defensivas y ofensivas a Ucrania necesarias para su autodefensa y contención de la expansión del totalitarismo ruso.

P.- ¿Cree usted que será una guerra larga?

R.- Depende de todos nosotros. Cuanta más se ayude a Ucrania militar y económicamente, tanto menos durará la guerra. Tenemos que presionar Rusia con sanciones, boicoteando sus mercancías, imponer embargo en las compras de su gas y petróleo..

P.- ¿Cómo se encuentra aquí y que le gusta de España?

R.- Los ucranianos y los españoles, aunque vivimos en diferentes extremos de Europa y nos diferenciamos unos de otros, somos europeos.

Compartimos los valores, el espacio común histórico, los puntos de vista del bien y del mal. Esto nos hace cercanos. Estas pequeñas y grandes historias de solidaridad que presenciamos hoy nos unen aún más.

Siempre he sentido este espíritu de amistad por parte del pueblo español. Y espero que así sea en adelante.

P.- ¿Qué más le pide a los españoles?

R.- Estamos agradecidos a España por todo lo que ha hecho hasta ahora. Pero pedimos más ayuda militar, que contribuya a cerrar el espacio aéreo. Y por supuesto que nos apoye para entrar en la Unión Europea. No sólo que se nos diga que tenemos derecho a entrar en la UE, que se pongan en marcha los mecanismos para que esto ocurra de verdad..

P.- ¿Qué diría a los que todavía apoyan a Putin?

R.- Muy sencillo, «¡Que se vayan a Mariupol con sus familiares pasar algunos días allí y evidenciar los crímenes de lesa humanidad que se cometen por las tropas rusas contra el pueblo ucraniano»