Las máximas distinciones y el tratamiento más exquisito para un invitado del que se esperan importantes anuncios económicos. El emir de Qatar, Tamim bin Hamad al Zani, llega a Madrid a última hora de este lunes, acompañado de un nutrido séquito de altos funcionarios del país árabe. Por delante una agenda de dos días en la que el mayor exportador de gas natural licuado (GNL) del mundo trasladará su interés por incrementar sus inversiones en España y convertirse en un socio estratégico en mitad de la crisis energética que padece Europa y la cada vez más compleja relación con Argelia.

Al Zani, de 41 años y en el trono desde la abdicación de su padre en 2013, será agasajado con los mayores honores. Recibirá de manos de Felipe VI el collar de la Orden de Isabel la Católica, el máximo grado de una distinción instituida por Fernando VII en 1815, y el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, le entregará la Llave de Oro de la Villa de Madrid. También le serán otorgadas las medallas del Congreso de los Diputados y el Senado. El centro de la capital se ha engalanado con enseñas qataríes para cortejar al emir en su primera visita de Estado desde su llegada a palacio.

Fuentes qataríes aseguran a El Independiente que se reunirá con empresarios españoles que ya tienen presencia en el país del golfo Pérsico, en sectores clave como el energético. La amplia delegación está formada por buena parte del Consejo de ministros qatarí. Entre los funcionarios que aterrizan en Madrid, figuran el vice primer ministro y ministro de Asuntos Exteriores además de los titulares de Finanzas, Industria y Comercio y Asuntos Energéticos. El emir estará acompañado de su esposa, la jequesa Jawaher bint Hamad bin Suhaim Al Zani.

Su alteza, que ha realizado visitas a Irán, Turquía y Emiratos Árabes Unidos en la última semana, iniciará a primera hora de este martes su periplo madrileño visitando a Felipe VI. El monarca y Letizia le recibirán con honores militares en el Palacio Real. Después, Felipe y el emir se reunirán en la Zarzuela y disfrutarán de un almuerzo en compañía de la reina y la jequesa. No será la única ocasión en la que tendrán oportunidad de verse. A última hora de este martes se celebrará una cena de gala en el Palacio Real.

Misión económica

El viaje de Estado -el previo se realizó en abril de 2011 cuando reinaban los padres de los actuales monarcas- conmemora el medio siglo del establecimiento de las relaciones diplomáticas entre ambos países y se produce en una coyuntura especialmente delicada para España. A la guerra en Ucrania, que ha obligado a la Unión Europea a buscar alternativas al gas ruso, se sumó a mediados de marzo la crisis diplomática con Argelia, un relevante socio gasístico de España, a raíz del histórico cambio de posición en el contencioso del Sáhara Occidental.

Argel, que ha retirado a su embajador en Madrid, ha amenazado con cerrar el grifo del gas y ha sellado acuerdos con Italia, trastocando los planes del Gobierno de convertirse en uno de los nudos energéticos de Europa. Doha, que se halla en plena expansión de su producción de GNL, se erige ahora como una pieza fundamental para salvar la ecuación de Moncloa.

El emir de Qatar con el presidente turco Recep Tayyip Erdoğan esta pasada semana.

En busca de compromisos en esta línea, el emir y su comitiva de ministros mantendrán encuentros con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y varios de sus homólogos. Visitará, además, el Senado. Durante el itinerario por la Cámara Alta los Presidentes del Congreso y el Senado, Meritxell Batet y Ander Gil, le impondrán las respectivas Medallas del Congreso y del Senado. Qatar -con una extensión similar a la Región de Murcia y una población de 2,8 millones de habitantes, de los que solo 300.000 tienen la nacionalidad qatarí- es una monarquía absoluta en la que los partidos políticos están prohibidos. Cuenta con una cámara legislativa, el Majlis al Shura, compuesta por 45 miembros de los que un tercio está designado directamente por el emir.

Se firmarán acuerdos de colaboración empresarial y comercial en sectores como el de la energía y la sostenibilidad, donde se espera un importante anuncio

Desde Qatar subrayan en declaraciones a este diario que el principal objetivo de la visita es reforzar la cooperación, principalmente en el campo económico. En el transcurso de los dos días se firmarán varios acuerdos de colaboración empresarial y comercial en sectores como el de la energía y la sostenibilidad, donde se espera un anuncio guardado con celo por las autoridades del país árabe. El emir, asimismo, extenderá una invitación a Felipe VI para que acuda al Mundial de fútbol que Doha alberga a finales de este año, entre los meses de noviembre y diciembre, un acontecimiento que Qatar ve como una oportunidad de incrementar su ya significativa influencia en el planeta a través de medios como Al Yazira, BeIN Sports o los esfuerzos de mediación de su diplomacia, desde Afganistán hasta Ucrania o los conflictos del continente africano.

“Qatar y España mantienen una relación de amistad y sintonía desde hace muchos años. La visita servirá, sin duda, para estrechar los lazos entre ambos países y trabajar en intereses comunes”, esboza el embajador de Qatar en España, Abdalla al Hamar. Doha subraya su músculo económico en nuestro país. Es uno de los principales inversores extranjeros en la Bolsa española y un importante proveedor de gas natural a España. En Exteriores español confían en que, resultado de la visita, “se eleve la relación bilateral a nivel estratégico, con la firma de acuerdos y memoranda de entendimiento en diversos ámbitos de colaboración, como el económico, de inversiones, educativo, judicial, sanitario y científico, entre otros”.