Rusia ha retirado sus tropas de Limán, ciudad situada al este de Ucrania y de gran valor estratégico al ser considerada la puerta de entrada a la región de Lugansk. "Debido a la amenaza de cerco, las tropas aliadas se han retirado mejores posiciones", señala el Ministerio del Interior ruso según han recogido las agencias de noticias estatales rusas. Ucrania había confirmado hoy mismo que al menos 5.000 militares rusos estaban rodeados por sus fuerzas militares en Limán.

El gobernador ucraniano de la región de Lugansk, Serhiy Haidai, confirmó la cifra aproximada de militares rusos rodeados. "Pidieron al mando del Ejército ruso que les dejara salir de la zona, pero su petición fue rechazada". "Tienen tres opciones: o se rinden, o intentan atravesar el cerco, o mueren todos juntos", declarço el gobernador, antes de confirmar que se trata del mayor contingente de militares rusos bajo asedio desde el principio de la guerra. El líder de la autoproclamada República Popular de Donetsk, Denis Pushilin, ya reconoció este viernes el asedio en la ciudad y calificó de "preocupantes" las informaciones que llegan sobre el terreno.

El líder prorruso llamó a "resistir" frente a los envites de las Fuerzas Armadas de Ucrania, que han logrado importantes avances en la zona este desde que iniciaron hace un mes una contraofensiva militar. Sin embargo, Según adelanta la BBC, Rusia ya ha retirado sus tropas de Limán.

El presidente de Rusia, Vladimir Putin, firmó este viernes la adhesión de los territorios bajo su control en Donetsk, Lugansk, Jersón y Zaporiyia, en un nuevo paso para tratar de legitimar la soberanía rusa sobre territorios ocupados militarmente.