Soledar ha sido escenario de cruentos combates en los últimos días, debido a que las tropas ucranianas han resistido con fiereza los ataques del Grupo Wagner, comandado por Yevgueni Prigozhin. El Ministerio ruso de Defensa ha asegurado este viernes que esta localidad de Donetsk, en la que apenas quedan edificios en pie, ya está bajo su control. Como muchos otros anuncios, resulta difícil de verificar por fuentes independientes. Un portavoz de Defensa ucraniano decía poco después de la declaración de Moscú que aún había combates.
Sería la primera victoria relevante que puede atribuirse el Kremlin desde que arrasaron Mariúpol, cuando se van a cumplir 11 meses desde que el líder ruso, Vladimir Putin, ordenó la invasión de Ucrania, que él ha presentado hasta hace poco como "una operación especial" para "desmilitarizar y desnazificar" el país vecino. Prigozhin, el llamado cocinero de Putin, ha comandado estas batallas al frente de sus mercenarios, ejercitados en diversos países africanos y en Siria.
Soledar sería el primer paso para que Rusia recupere Bajmut, que llegó a tener 70.000 habitantes. Para la Federación Rusa Soledar es un enclave estratégico donde hubo minas de sal con túneles subterráneos que llevan a Bajmut. Sin embargo, los ucranianos, y muchos expertos militares, subrayan que este avance ha costado muchísimas vidas al Kremlin, y también le ha obligado a gastar gran cantidad de munición, cuando empieza a escasear en ambos frentes.
El gobernador de Donetsk, Pavlo Kirilenko, ha dicho a la televisión oficial ucraniana que aún quedan 559 civiles ucranianos en Soledar y que continuaban los enfrentamientos. Entre ellos habría 15 niños.
El presidente Zelenski lleva preparando a la población para la caída de esta localidad desde principios de semana. Zelenski ha destacado que los rusos han avanzado sobre los cadáveres de sus propios soldados. Y ha descartado que vayan a tomar Bajmut a continuación. Lo que sí permite a las tropas de Wagner es seguir acercándose por el norte a Bajmut, donde los ucranianos resisten desde hace más de seis meses.
Según la Revista Ejércitos, el paso siguiente sería Rozdolivka, a cinco kilómetros de Soledar. "La toma de Rozdolivka podría servir a las tropas rusas para poner en peligro la línea ucraniana entre Siversk y Bilohorivka". Rozdolivka está emplazada en un lugar difícil de defender y su toma permitiría, de acuerdo con este medio, rodear Vesele y amenazar desde el sur la línea de defensa ucraniana en torno a Siversk. Los combates seguirán siendo encarnizados en esa zona.
A su vez, los ucranianos presionan a los rusos en Kreminna, al norte de Siversk. "Es una ciudad de valor estratégico porque protege el recodo que forma el río Donetsk", señala la publicación que dirige Christian D. Villanueva. Desde ahí Ucrania puede amenazar el despliegue ruso al este del río y avanzar incluso hacia Lugansk.
El Grupo Wagner creado por Prigozhin, un oligarca que triunfó en la hostelería en San Petersburgo y luego financió la granja de trols que se inmiscuyó en la campaña electoral de EEUU, busca victorias en Donetsk para mostrar al Kremlin que su estrategia es mejor que la del Ministerio de Defensa. Justo hace dos días, el comandante de las fuerzas rusas en Ucrania, Serguei Surovikin, conocido como el carnicero de Siria, ha sido relevado por Valeri Gerasimov, en un gesto que ha sorprendido a los más avezados.
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