A 20 kilómetros de la frontera ucraniana y a solo cinco km de las tropas rusas instaladas en Transnistria, los jefes de gobierno de 45 naciones europeas se han reunido este jueves en Bulboaca (Moldavia) para mostrar unidad frente al Kremlin. Forman la Comunidad Política Europea, una plataforma en la que se integran los Veintisiete más otros 18 países (ha faltado Turquía y estaba presente Kosovo). El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, ha vuelto a pedir que su país ingrese rápidamente en la OTAN. Si bien hay voluntad de ofrecer garantías de seguridad a Kiev, la mayoría de los aliados es contraria al acceso de Ucrania mientras haya guerra.
"Cada duda que mostramos aquí en Europa es una trinchera que Rusia intentará ocupar con toda seguridad. Ya se trate de dudas sobre medidas de seguridad vitales o de dudas sobre nuestra unidad, o tal vez sobre nuestra capacidad para afrontar los retos de nuestro tiempo, cada duda trae más inseguridad", ha dicho Zelenski.
Apoyan a Zelenski algunos países de Europa del Este, como Polonia, y demandan que reciba compromisos claros para su ingreso lo antes posible. Alemania, sin embargo, defiende claramente que se mantenga la ayuda a Kiev pero supedita la entrada en la OTAN al fin de la guerra.
La ministra alemana de Exteriores, Annalena Baerbock, ha sido clara, según informa la ARD, primera cadena de la televisión alemana: "La OTAN siempre ha defendido la política de puertas abiertas. Al mismo tiempo, está claro que no podemos hablar de esta adhesión en medio de una guerra". Si Ucrania entrara en la OTAN en guerra, conduciría a que la principal alianza militar del mundo se viera implicada directamente en la guerra con Rusia.
Estados Unidos y Francia coinciden con el gobierno federal alemán y son partidarios de dar garantías de seguridad a Ucrania. El presidente francés, Emmanuel Macron, es partidario de que Ucrania tenga garantías "tangibles y creíbles", al estilo israelí. "Hemos de construir algo entre la seguridad proporcionada a Israel y la adhesión de pleno derecho", dijo Macron el miércoles.
Ucrania lograría estas garantías de seguridad si países como EEUU, Reino Unido, Francia, Alemania y otros emplazaran tropas en Ucrania tras la guerra. La OTAN lo hace con los países limítrofes con Rusia.
En la próxima cumbre de Vilna, el 12 de julio, se espera que pueda consumarse el ingreso de Suecia a la OTAN. Está pendiente de la aprobación de Hungría y Turquía. Otra cuestión que ha de decidir la OTAN es la sucesión del secretario general, Jens Stoltenberg, que se retirará en otoño. En caso de que el presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, pierda las elecciones, tendría opciones de suceder a Stoltenberg.
Escudo de defensa aérea europeo
Zelenski ha pedido que se cree un escudo de defensa aérea para todo el continente europeo y ha sugerido empezar por Ucrania, según informa la agencia Efe. "Por desgracia, nosotros ya sabemos qué sistemas funcionan", en alusión a los continuos ataques aéreos que sufre su país. Ha insistido a su vez en que Ucrania necesita más sistema antiáereos Patriot para frenar esos bombardeos con misiles rusos. En la madrugada del jueves, murieron tres personas por los ataque rusos en Kiev.
"Necesitamos la coalición de los Patriot", ha insistido en rueda de prensa en Bulboaca. Ya ha recibido sistemas antiáereos Patriot de EEUU, Alemania y Países Bajos. También ha recordado que los F-16 serían una gran ayuda para Ucrania, dada su gran inferioridad aérea.
Ha sido la primera salida al exterior del presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, después de anunciar la convocatoria electoral. España asume el 1 de julio el semestre de presidencia del Consejo de la Unión Europea y en plena campaña hay varias citas de gran relevancia, como la visita del colegio de comisarios y la presidenta Ursula von der Leyen a Madrid el 6 de julio, la comparecencia de Sánchez en el Parlamento Europeo el día 13 y la cumbre UE/CELAC el 17 y 18 de julio.
La ciudad de Granada será la sede el 5 de octubre de la próxima cumbre de la Conferencia Política Europea, plataforma de diálogo que celebró su primera reunión en Praga en octubre de 2022. Está por concretar cuál será su configuración institucional y qué resultados se esperan. Está concebida para cohesionar a la UE con países que coinciden en sus postulados y muchos aspiran al ingreso.
Fue Macron quien propuso en mayo de 2022, justo después de ser reelegido y coincidiendo con la presidencia francesa del Consejo de la UE, la idea de una confederación europea en la que tuviera cabida Ucrania y Bosnia-Herzegovina. En junio de 2022 los Veintisiete concedieron el estatus de candidato a Ucrania y Moldavia, pero aún está lejos su ingreso. Las negociaciones suelen durar al menos una década.
"Unir a nuestra Europa, en la verdad de su geografía, sobre el fundamento de sus valores democráticos, con la voluntad de preservar la unidad de nuestro continente y conservando la fuerza y la ambición de nuestra integración", fue la propuesta de Macron, que el canciller alemán, Olaf Scholz, recibió de forma positiva.
Macron dijo que sería un espacio de "cooperación política, de seguridad, energética, de transportes, de inversiones en infraestructuras, de circulación de las personas y en particular de la juventud". En marcha está. Veremos hacia dónde va.
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