Las autoridades rusas han anunciado este martes el cierre del caso abierto por rebelión armada tras el levantamiento protagonizado el sábado por el jefe del Grupo Wagner, después de un acuerdo en el que medió Bielorrusia para que el jefe del grupo, Yevgueni Prigozhin, diera orden a sus fuerzas para que detuvieran su avance hacia la capital rusa, Moscú. Asimismo, el avión privado de Yevgueni Prigozhin ha aterrizado en Minsk, la capital de Bielorrusia, según ha podido confirmar la BBC. Horas más tarde, el presidente de Bielorrusia, Aleksander Lukashenko, ha dicho que Prigozhin ya estaba en su país.
Lukashenko ha indicado que ha ofrecido a Wagner una base militar en Bielorrusia. "Si sus comandantes vienen a nosotros y nos ayudan… nos dicen lo que es importante en este momento… eso no tiene precio. Eso es lo que tenemos que sacar de Wagner", ha señalado el presidente de Bielorrusia.
A su vez, el Ministerio ruso de Defensa ha informado de que el Grupo Wagner está preparándose para entregar su armamento pesado. El presidente ruso dio opción a los mercenarios a integrarse en el Ejército ruso, irse a Bielorrusia o volver a sus casas, según anunció en un discurso el lunes por la noche.
El Servicio Federal de Seguridad (FSB) ha indicado que durante las investigaciones se ha determinado que los participantes en el levantamiento pusieron fin a sus "acciones criminales", según ha recogido la agencia rusa de noticias Tass.
"En el marco de la investigación de un caso abierto el 23 de junio por el Departamento de Investigación del FSB bajo el artículo 279 del Código Penal de Rusia por el hecho de una rebelión armada, se ha establecido que los participantes detuvieron el 24 de junio sus acciones, destinadas directamente a cometer un crimen", ha especificado.
Así, el organismo ha hecho hincapié en que "teniendo en cuenta esto y otras circunstancias relevantes a la investigación, la autoridad investigadora ha decidido este 27 de junio emitir una decisión para cerrar el caso".
El anuncio ha llegado un día después de que medios rusos informaran de que el caso por rebelión contra Prigozhin seguía abierto, tras el compromiso de Moscú de retirar los cargos contra él en el marco del citado acuerdo.
El caso fue abierto a última hora del viernes, si bien el sábado el Kremlin anunció que el acuerdo alcanzado con el Grupo Wagner para que pusiera fin a su avance hacia Moscú incluía la retirada de cargos contra Prigozhin y su traslado a Bielorrusia, cuyo presidente, Alexander Lukashenko, había ejercido labores de mediación.
Tras el acuerdo, Prigozhin dio orden a los miembros del grupo a abandonar las posiciones tomadas durante su avance, y así evitar un "baño de sangre", incluido su repliegue del centro de la ciudad de Rostov del Don, de cara a una reducción de las tensiones, derivadas de su lucha contra la cúpula del Ministerio de Defensa y el Ejército ruso en el marco de la invasión de Ucrania, desatada en febrero de 2022 por orden del presidente ruso, Vladimir Putin.
En un discurso sobre los acontecimientos en Rusia, el líder bielorruso, Aleksander Lukashenko, ha reconocido que puso a todas las tropas en alerta de combate. Ha añadido que fue doloros observar lo que estaba pasando en Rusia. "Muchos bielorrusos también lo sintieron profundamente, porque la madre patria es una sola". En el poder desde 1994, Lukashenko es el más firme aliado de Putin.
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