Tras doce días de ataques aéreos israelíes sobre la asediada Franja de Gaza, Egipto abrirá para la entrada de ayuda humanitaria el paso fronterizo de Rafah, el único nexo del territorio palestino con el exterior que no se halla en manos israelíes. Así lo ha anunciado este jueves la presidencia egipcia tras la conversación telefónica mantenida por Abdelfatah al Sisi con su homólogo estadounidense Joe Biden.

"El Presidente Abdelfatah al Sisi recibió una llamada telefónica del presidente de EEUU, Joe Biden, centrada en la situación humanitaria en la Franja de Gaza. Los dos presidentes acordaron la entrega de ayuda humanitaria en la Franja de Gaza a través del paso fronterizo de Rafah de manera sostenible, con las autoridades competentes de los dos países coordinándose con las organizaciones humanitarias internacionales bajo la supervisión de las Naciones Unidas para garantizar la llegada de la ayuda", precisa la presidencia egipcia en un breve comunicado remitido a El Independiente. La nota ignora la intervención israelí y si cuenta con el plácet de Tel Aviv, que en la última semana ha llevado a cabo bombardeos en esa zona limítrofe con la península egipcia del Sinaí.

La logística, sin embargo, podría retrasar cualquier llegada efectiva de la ayuda humanitaria. Fuentes estadounidenses consideraban que se necesitaría unas 8 horas para ultimar la coordinación, por lo que -según esta estimación- la ayuda no pasaría por el cruce hasta la última hora de este jueves o primera hora del viernes. Pero la planificación y la ejecución final podría demorarse.

La primera de las trabas es la situación de las las carreteras que conducen desde el paso fronterizo de Rafah hacia la Franja, que han sido bombardeadas en múltiples ocasiones por Israel desde que comenzó el conflicto. Los últimos ataques aéreos se han producido este mismo jueves.

Se desconoce el tiempo que llevará reparar las vías de conexión terrestre. Para los funcionarios de la municipalidad de Gaza, controlada por Hamás, la reapertura del cruce resulta una prioridad absoluta, pero la entrada de ayuda humanitaria está condicionada a que se reabra Rafah y que la red de carreteras vuelva a estar en condiciones de funcionamiento.

Un menor gazatí es rescatado tras un ataque aéreo israelí. | EFE

"Situación devastadora" en Gaza

Entretanto, la situación interna en Gaza se agrava ante la escasez de agua potable, combustible, alimentos o medicinas y a la espera de la llegada de la ayuda humanitaria que aguarda en decenas de camiones a las puertas del paso fronterizo de Rafah. Desde Amán, la capital de Jordania, el director ejecutivo de UNICEF España, José María Vera, advierte que "absolutamente devastadora". "Se está vulnerando el derecho internacional humanitario, y el de la infancia de una forma especial”, agrega. 

Según la agencia de la ONU para la infancia, su equipo dentro de la franja “se encuentra prácticamente sin suministros, esenciales para poder ofrecer una respuesta humanitaria en el ámbito sanitario, el de agua, el de alimentación o el de protección de los niños y niñas”. Resulta fundamental, subrayan, “un alto el fuego, que cesen las hostilidades y que se abran corredores humanitarios”. "Es inaceptable que se siga asesinando a niños y niñas con los bombardeos, como el que hemos visto ayer”, en referencia al ataque contra un hospital en Gaza que dejó cientos de muertos y cuya autoría se recriminan Israel y el movimiento palestino de la Yihad Islámica. “Cada niño, cada niña, tiene derecho a la protección”, y por eso “exigimos también la liberación de los niños y niñas secuestrados”.

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