Las imágenes del ataque que Hamás lanzó el pasado 7 de octubre contra Israel se hicieron virales de inmediato por su crudeza. Pero quizás lo más impactante que se hizo público ese día fue un vídeo donde se veía a una joven semidesnuda y con signos claros de violencia en una furgoneta conducida por soldados de Hamás al grito de "¡Allahu akbar!".

En el vídeo se muestra como los soldados la exhiben como un trofeo, y algunos incluso escupen al cuerpo. Pronto se supo que se trataba de Shani Louk, una chica de origen germano-israelí de 23 años que había asistido a un festival de música que se celebraba cerca de la Franja de Gaza. Allí fue sorprendida por los milicianos de Hamás, que asesinaron a unas 250 personas y tomaron algunos rehenes. Y aunque las imágenes de Shani hicieron pensar a muchos que ya estaba muerta ese día, la noticia no se ha confirmado hasta este lunes.

Lo hizo el propio Gobierno de Israel a través de un post publicado en su cuenta oficial de X: "Estamos desolados por la noticia de que se ha encontrado e identificado el cadáver de Shani Louk, la joven germano-israelí de 23 años. Shani, que fue secuestrada en un festival de música, torturada y paseada por Gaza por terroristas de Hamás, vivió horrores inimaginables. Nuestros corazones están rotos. Que su memoria sea una bendición".

La madre de la joven, Ricarda Louk, lo ha ratificado también a RTL. "Desafortunadamente, ayer recibimos la noticia de que mi hija ya no está viva", explicó, aunque en ese momento todavía no sabía que se había encontrado el cuerpo de Shani. Los padres de la joven habían facilitado al Ejército de Israel muestras de ADN de su hija, que ellos mismos consideran que murió el mismo 7 de octubre, probablemente a causa de disparo en el cráneo, según el citado medio.

Sin embargo, Isaac Herzog, presidente de Israel, ha asegurado en declaraciones para Bild que la chica fue decapitada. "Han encontrado su cráneo. Esto significa que estos animales bárbaros y sádicos simplemente le cortaron la cabeza mientras atacaban, torturaban y mataban a israelíes. Es una gran tragedia y extiendo mi más sentido pésame a su familia. Lo que vimos en la frontera entre Gaza e Israel va mucho más allá de un pogromo. Vimos un matadero. Vimos la sangre correr por las calles. Hemos visto las tragedias más horribles imaginables", afirmó Herzog.

Una huida frustrada

Ricarda aseguró que habló por última vez con Shani ese mismo día, cuando les dijo que estaba tratando de encontrar su coche para huir del lugar y encontrar un refugio seguro. Desde entonces no supieron nada más de ella, aunque confiaban en que pudiera haberse puesto a salvo. Hasta que vieron el vídeo de su hija en la camioneta. Su marido lo examinó muchas veces en busca de pistas, pero Ricarda ni siquiera se atrevió a verlo.

En los días sucesivos la madre publicó un vídeo donde pedía ayuda: "Nos enviaron un vídeo donde se podía ver a nuestra hija inconsciente en un coche conducido por los palestinos por la Franja de Gaza. Pido que cualquier persona que nos pueda ayudar o informar de novedades lo haga". Pero no hubo más noticias del tema.

Tom Weintraub Louk, primo de Shani, explicó en declaraciones a The Wasgington Post que la reconocieron en el vídeo por los tatuajes y las rastas de la joven. Intentaron contactar de inmediato con ella y con su novio mexicano, pero no pudieron. Pero a pesar de todo, aseguró que seguían teniendo "algo de esperanza".