Jesús Pérez Arellano, un español que trabaja en la Oficina de las Naciones Unidas para la Paz en Oriente Medio (UNSCO) se convirtió este jueves en la segunda persona con esa nacionalidad que sale de Gaza por el paso de Rafah y se encuentra ya en Egipto, confirmaron a Efe fuentes diplomáticas.

Arellano es trabajador de la Oficina del Coordinador Especial para el Proceso de Paz en Oriente Medio y es el segundo español que ha salido de la zona de guerra por ese paso fronterizo, después de que este miércoles lo consiguiera el médico Raúl Incertis, que trabajaba para Médicos Sin Fronteras.

Según anunció este jueves la ministra española de Defensa en funciones, Margarita Robles, España evacuará de Gaza, en colaboración con las autoridades egipcias, entre 140 y 178 ciudadanos con nacionalidad española o familiares en las próximas horas, previsiblemente entre hoy y mañana.

Las evacuaciones, que se cuentan por cientos, se están dando después de que el Ministerio del Interior de Gaza autorizara ayer la salida de extranjeros de varias nacionalidades de la Franja, bajo control de Hamás.

El ministro de Asuntos Exteriores español en funciones, José Manuel Albares, subrayó por su lado que España está "comprometida con la seguridad de los ciudadanos españoles en Gaza y Oriente Medio".

"Gracias a todos los que han hecho posible la salida desde Gaza de los dos españoles miembros de organizaciones internacionales que lo solicitaron. Seguimos trabajando para próximas evacuaciones", publicó Albares en su cuenta de la red social X (antes Twitter).

Con la salida de Pérez Arellano, España “da por cerrada” la salida de los empleados españoles de organizaciones no gubernamentales y organismos internacionales en Gaza, señalaron fuentes diplomáticas. 

Este jueves se cumple el vigesimoséptimo día de guerra entre Israel y Hamás que comenzó el 7 de octubre cuando la organización islamista palestina Hamás atacara el territorio israelí, dejando 1.400 muertos, más de 5.400 heridos y 240 secuestrados llevados a Gaza.

Desde entonces, Israel bombardea la Franja a diario y el viernes pasado amplió sus operaciones terrestres en la zona, lo que ha dejado 9.000 fallecidos y 32.000 heridos, según el Ministerio de Sanidad gazatí.