Se esperaba desde hacia semanas, con el horizonte de unas complicadas elecciones presidenciales en noviembre. Los países árabes lo pedían desde hace meses. Finalmente Joe Biden ha entonado la frase: "Es hora de poner fin a la guerra". La propuesta israelí de alto el fuego, anunciada y respaldada por el presidente estadounidense a última hora de este viernes, rebaja algunas de las exigencias del Gobierno israelí y podría allanar el camino hacia un alto el fuego duradero. La primera reacción "positiva" de Hamás alimenta ahora las esperanzas a punto de cumplirse ocho meses de guerra en la Franja de Gaza, con más de 36.000 muertos y más de la mitad de las viviendas reducidas a escombros.

La cautela sigue siendo máxima. Hamás e Israel llevan meses en negociaciones indirectas patrocinadas por Qatar y Egipto y no sería la primera vez que frustran el acuerdo en la recta final de las conversaciones. Ahora hay, no obstante, razones para un leve. optimismo. Tras la declaración de Biden a última hora del viernes, las conversaciones entre algunos de los actores regionales clave en la búsqueda de una salida para Gaza se han intensificado este sábado. El secretario de Estado estadounidense Antony Blinken ha telefoneado este sábado al ministro de Asuntos Exteriores de Arabia Saudí, el príncipe Faisal bin Farhan Al Saud, para abordar la propuesta.

La propuesta israelí tiene ahora por delante la negociación indirecta. Está previsto que las conversaciones se reanuden esta próxima semana en Doha, con la participación de la CIA y la creciente presión estadounidense para lograr un acuerdo que de cierto respiro en plena cuenta atrás electoral.

Hamás: retirada de tropas israelíes y retorno de desplazados

En un comunicado, Hamás ha valorado "positivamente" la propuesta de tregua, especialmente los apartados en los que se menciona "un alto el fuego definitivo, la retirada de las fuerzas israelíes de la Franja de Gaza, la reconstrucción de Gaza y el intercambio de prisioneros". El plan consiste en tres fases. La primera constaría de seis semanas en las que habría un alto el fuego completo, se retirarían las tropas israelíes de todas las áreas pobladas de la Franja y serían liberados varios rehenes, entre ellos mujeres, ancianos y heridos, a cambio de la excarcelación de centenares de prisioneros palestinos.

El movimiento islamista palestina mostró su predisposición a tratar de forma constructiva cualquier plan que incluya estos puntos. Subrayó que sus requisitos para una tregua no han cambiado, y que incluyen la retirada total de las fuerzas israelíes del enclave, el regreso de los palestinos desplazados a sus hogares y la reconstrucción de Gaza.

Israel: la propuesta está en línea con los objetivos

Por su parte, la oficina del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, confirmó haber autorizado a sus negociadores a presentar un borrador de tregua para liberar a los secuestrados. Dijo que la nueva propuesta israelí a Hamás está en consonancia con los objetivos de Israel de devolver a los rehenes y destruir las capacidades de la organización. Insistió, no obstante, en que la guerra no terminará hasta que Israel no logre su objetivo de eliminar las capacidades militares y de Gobierno de Hamás en Gaza. Esta semana un asesor de Netanyahu estimó que la contienda se prolongaría hasta final de este año.

Este sábado Netanyahu ha vuelto a insistir en sus palabras. "De acuerdo con la propuesta, Israel seguirá insistiendo en que se cumplan estas condiciones antes de que entre en vigor un alto el fuego permanente", recalcó en un mensaje su oficina.

Reacción internacional

Los movimientos anunciados este viernes por Biden han revivido la esperanza de un cambio en la dinámica de la contienda, tras meses de conversaciones infructuosas y una última ofensiva en Rafah que ha exacerbo la tragedia humanitaria en la Franja. El ejército israelí ha asegurado esta semana haber completado su control sobre el corredor de Filadelfia, el tramo fronterizo entre la Franja y Egipto. Hasta ahora, Israel ha ignorado la orden emitida hace una semana por el Corte Internacional de Justicia que le pedía el fin inmediato de la operación militar en el enclave fronterizo con Egipto.

El secretario general de la ONU, António Guterres, ha reconocido que "espera fervientemente" que la propuesta israelí "conduzca a un acuerdo entre las partes para una paz duradera". En una breve declaración a preguntas de los periodistas, Guterres recordó que lleva meses pidiendo tres cosas: el alto el fuego, acceso "pleno y sin restricciones" de ayuda humanitaria en Gaza y liberación de todos los rehenes en manos de Hamás.

Por su parte, el alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, agregó en su cuenta en la red social X: "Todo nuestro apoyo a la hoja de ruta del presidente Biden para un alto el fuego duradero y la liberación de rehenes que conduzcan a un cese permanente de las hostilidades y la retirada de las FDI (Fuerzas de Defensa de Israel) y a que comiencen los esfuerzos de reconstrucción. La guerra tiene que terminar ahora".

Las tres fases de la propuesta

Primera fase

Dura seis semanas durante las cuales las fuerzas israelíes se retirarían de los centros de población de Gaza.

Los rehenes, incluidos ancianos y mujeres, retenidos en Gaza serían canjeados por cientos de prisioneros palestinos.

Los civiles palestinos regresarían a Gaza, incluido el norte.

Un total de 600 camiones entrarían con ayuda humanitaria a Gaza cada día.

Segunda fase

Hamás e Israel negociarían los términos de un fin permanente de las hostilidades. "El alto el fuego continuará mientras continúen las negociaciones", ha establecido Biden.

Tercera fase

Un plan de reconstrucción para Gaza y una solución política a largo plazo.