Era el comodín con vida de la baraja diseñada por Israel con la dirigencia de Hamás y su brazo militar, las Brigadas Al Qasam. Y el ejército israelí asegura tener cada vez más señales de que Mohamed Deif, una de las piezas más preciadas del organigrama militar de Hamás y considerado uno de los cerebros de los ataques el 7 de octubre, ha podido ser liquidado. La octava tentativa de asesinato podría ser la vencida.

Una semana después del bombardeo sobre una “zona humanitaria” de Al Mawasi que causó la enésima matanza en la Franja de Gaza -90 muertos y 300 heridos-, las Fuerzas de Defensa de Israel consideran su liquidación en el ataque aéreo como el escenario más probable en mitad del mutismo de Hamás, que se limitó a negar su óbito el sábado pero no ha aportado más pruebas. “Hamás está ocultando lo que le ocurrió a Deif, nosotros lo averiguaremos, confirmaremos y revelaremos”, deslizó este viernes el portavoz del ejército israelí, Daniel Hagari, en una comparecencia en vídeo.

"Cada vez más señales de su eliminación"

El establishment castrense admite haber reunido “cada vez más señales que implican una eliminación exitosa de Mohamed Deif" en el transcurso de un bombardeo sobre una zona habitada por desplazados que ha concitado la condena de la comunidad internacional. Fuentes militares sí dan por confirmada la muerte de Rafa Salameh, la mano derecha de Deif que -según la información de inteligencia- se encontraba sentado junto a Deif en el momento del ataque aéreo, que se produjo tras localizar el paradero de Salameh, comandante del batallón de Jan Yunis (sur) de las Brigadas Al Qasam y esperar a que fuera a su encuentro.

Israel ha defendido el ataque condenado por la comunidad internacional sobre una “zona humanitaria” -catalogada así por sus propias autoridades- alegando que fue un bombardeo preciso y que tuvo como objetivo un recinto de Hamás emplazada en un área abierta, rodeada de árboles e inmuebles, distante de la zona de tiendas de campañas donde habitan los desplazados por la contienda. Las organizaciones de derechos humanos han discutido esta versión.

La ausencia de Mohamed Deif puede tener un gran impacto

“La ausencia de Mohamed Deif puede tener un gran impacto. Afecta a la moral de quienes siguen luchando en las filas Hamás, que no son muchos”, apunta en conversación con El Independiente Ehud Yaari, un veterano periodista y analista israelí. “Afecta, además, a la posición de Yehia Sinwar [líder de Hamás en Gaza] dentro del movimiento porque siempre ha habido grandes tensiones internas a nivel de dirigentes. Y ahora que Sinwar está debilitado, Ismail Haniyeh [el líder en el exterior] está intentando pasar a primer plano, dejar de acatar las instrucciones que les envía Sinwar desde los túneles  a través de mensajeros, y actuar de forma independiente”, agrega Yaari.

Un superviviente nato

Deif es uno de los fundadores de las brigadas Ezzeldin al Qassam, el brazo armado de Hamás responsable del ataque del 7 de octubre. Ejerce como comandante de las brigadas desde julio de 2002 cuando Israel asesinó al entonces líder Salah Shehada. "Deif tiene un amplio historial de asesinatos de soldados y civiles israelíes. Ascendió en las filas de Hamás y ha sido el líder de la denominada ala militar de Hamás durante años, tras el asesinato de Saleh Shahadeh hace más de dos décadas", señala a este diario Joe Truzman, investigador del think tank estadounidense Foundation for Defense of Democracies. "Aunque Deif ha cosechado éxitos en el campo de batalla, también se ha convertido en uno de los rostros importantes del grupo y se ha ganado un estatus legendario entre los partidarios de la llamada Resistencia", agrega.

Según Israel, Deif integró un consejo militar secreto junto a Sinwar y Marwan Issa -asesinado en una ataque el pasado marzo- que planificó y ejecutó el atentado del 7 de octubre, que dejó cerca de 1.200 muertos y 240 rehenes, la jornada más sangrienta en la historia del Estado judío.

Su nombre real es Mohammed Diab al Masri y nació en 1965 en el campo de refugiados de Jan Yunis Se enroló en Hamás en 1987 y dos años más tarde pasó 16 meses bajo detención israelí. Ha sobrevivido a al menos siete tentativas de asesinato a manos de Israel, que le considera el principal cerebro de decenas de atentados suicidas. En dos de los intentos sufrió heridas de gravedad -perdió un ojo y le dejaron secuelas en una pierna- que le obligaron a ceder temporalmente el liderazgo de las brigadas a Ahmed Jaabari, liquidado por Israel en noviembre de 2012. En la ofensiva previa de 2014, un ataque aéreo israelí mató a su esposa y a dos de sus hijos, una de 3 años y un bebé de 7 meses.

Escondido en la red de túneles

Para sortear la inteligencia israelí, Deif pasa gran parte del tiempo en la impotente y amplia red de túneles subterráneos a cuyo diseño contribuyó. Licenciado en Física, Química y Biología por la Universidad Islámica de Gaza, se le considera un hábil estratega. Además del desarrollo de la  red de túneles en la Franja, se le atribuye el incremento de las capacidades de fabricación de armas y explosivos en el interior de un territorio que ha padecido 17 años de bloqueo israelí.

La suya es una figura acostumbrada a moverse en la sombra. No aparece en público y rara vez habla. Una discreción que explica que solo se conozcan tres fotografías de él: una tomada cuando apenas tenía 20 años; otra enmascarado y otra en sombra, empleada para divulgar una de sus contadas alocuciones.

"Si Deif está efectivamente muerto, será un duro golpe para Hamás. Disminuirá la capacidad de Hamás para llevar a cabo ataques estratégicos en el campo de batalla y dañará la imagen de fuerza que Hamás proyecta a sus seguidores", advierte Truzman. "Puede que a Hamás le cueste admitir que Deif ha muerto. Desde el comienzo de la guerra, la organización ha empleado principalmente una estrategia consistente en no reconocer la muerte de combatientes y comandantes en Gaza. Al principio de la contienda, hubo un puñado de ocasiones en las que sí lo hicieron", apunta.

"El posible asesinato de Deif inclinará la balanza del lado de Israel en un momento en el que se están llevando a cabo negociaciones para un alto el fuego. También creará en los dirigentes de Hamás que quedan en Gaza el efecto de que Israel está cerrando lentamente el círculo a su alrededor. Por lo tanto, esto crea un impacto psicológico significativo que puede dificultar su capacidad de mando en el campo de batalla", opina el analista. De confirmarse su final, el primer ministro Benjamin Netanyahu podría presumir de una victoria simbólica en una guerra que se prolonga más de lo previsto. No sería, en cualquier caso, el triunfo definitivo sobre una organización que -como el propio Deif- ha sufrido reveses en el pasado y ha logrado sobreponerse a todos. 

Los potenciales herederos

Mohamed Sinwar en un coche el interior de los túneles de Gaza.

La eliminación de Deif abriría la puerta a un relevo en la cúpula del brazo militar de Hamás tras dos décadas dominando la escena. Las opciones son varias. "El hermano de Yehia Sinwar, Mohamed Sinwar, es un candidato. También quedan comandantes de brigada que no han sido eliminados por Israel y que podrían ser elevados al llamado puesto de 'jefe de estado mayor' que ocupaba Deif", replica Truzman.

"El comandante de la Brigada de Gaza, Izz al-Din al Hadad, es otro posible sustituto. Israel ha intentado eliminarlo durante la guerra, pero hasta ahora no lo ha conseguido. Uno de los factores más críticos para sustituir a Deif es la confianza que Sinwar tenga en el posible candidato. Dada la reputación de Sinwar, es probable que sólo un puñado de individuos dentro de la Franja de Gaza se hayan ganado su crédito, por lo que este factor es una consideración crucial en el proceso de selección", añade. "Intentar reemplazar a Deif será una tarea difícil, especialmente durante una guerra en la que Hamás lucha por su supervivencia y parece encontrarse en una posición debilitada".