La ONU evita comentar la nueva postura francesa de apoyo al plan marroquí de autonomía como "única base" para solucionar el conflicto del Sáhara Occidental, y se limita a recordar que es un conflicto que debe mantenerse dentro del marco del Consejo de Seguridad.

El portavoz del secretario general, Stéphane Dujarric, ha reconocido que habían seguido las informaciones de la carta que el presidente francés, Emmanuel Macron, envió al rey Mohamed VI de Marruecos para comunicarle su nueva postura, alineada con los intereses de Marruecos, informa Efe.

Pero -añadió- "por nuestra parte, continuaremos los esfuerzos con respecto al Sáhara Occidental en línea con las resoluciones del Consejo de Seguridad", dijo Dujarric, sin ofrecer más detalles.

La nueva postura francesa ya ha ocasionado un incidente diplomático, pues el gobierno argelino ha retirado a su embajador en París en protesta por la carta de Macron.

El conflicto del Sáhara entra dentro de las atribuciones del Consejo de Seguridad, que estudia el caso una o dos veces al año, pero está totalmente estancado desde 2019, cuando hubo una ronda de conversaciones entre Marruecos y el grupo independentista saharaui Frente Polisario en Suiza, que no dio ningún resultado.

Como miembro permanente del Consejo de Seguridad, Francia podría ahora impulsar una resolución más acorde con los intereses de Marruecos, lo que ya venía haciendo antes pero con cierta discreción.

Dentro del Consejo, el Polisario ha carecido en los últimos años de aliados claros, y solo Rusia ha mostrado una actitud algo más "neutral", pero no ha puesto el conflicto del Sáhara entre sus prioridades.

Actualmente, solo Argelia, miembro rotatorio del Consejo, podría servir de contrapeso a la postura francesa, pero la actividad diplomática argelina en el Consejo -donde ocupa un asiento desde enero pasado- ha estado más enfocada en el conflicto palestino.