Con la conmoción aún de su regreso a casa, las autopsias y las primeras informaciones apuntan a que cinco de los seis rehenes israelíes cuyos cadáveres fueron recuperados este martes en la Franja de Gaza murieron asfixiados como consecuencia de un ataque perpetrado hace seis meses por las Fuerzas de Defensa de Israel.

Así lo revela prensa israelí. La valoración sobre las circunstancias de la muerte en cautiverio de cinco de los secuestrados apunta a que fallecieron por asfixia en el túnel donde estaban retenidos como "un resultado incidental de un ataque de las Fuerzas de Defensa de Israel". El sexto de los cuerpos recuperados, el de Yoram Metzger, presenta heridas de bala que le habrían costado la vida.

Según el periódico israelí Yedioth Ahronoth, la muerte se produjo hace unos seis meses, durante un ataque militar israelí en Jan Yunis por parte de la 98 División. La información precisa que el ejército no atacó directamente el túnel en el que se encontraban los rehenes, sino un objetivo de Hamás cercano, lo que provocó un incendio y la posterior liberación de gas carbónico letal en el interior del túnel. Varios combatientes de Hamás fueron hallados muertos junto a los rehenes israelíes, armados con fusiles Kalashnikov y sin signos de haber resultado heridos, según el comunicado. En respuesta a las preguntas, el portavoz militar israelí Daniel Hagari declaró: "El incidente sigue bajo investigación".

En un túnel a 10 metros de profundidad

Según la información difundida por las Fuerzas de Defensa de Israel, el equipo de Combate de la brigada Paracaidista, incluidos los soldados del 75º Batallón y la Unidad Yahalom, en una operación conjunta con la Agencia de Seguridad Israelí, firmó la operación de rescate de los cuerpos de los rehenes en la zona de Jan Yunis. En la operación se rescataron y devolvieron al Estado de Israel los cuerpos de los rehenes Nadav Popplewell, Yagev Buchshtab, Avraham Munder, Yoram Metzger, Haim Perry y Alexander Dancyg.

Durante la operación, las fuerzas localizaron el pozo de un túnel de unos 10 metros de profundidad que conducía a una ruta de túneles subterráneos donde se encontraron los cuerpos de los rehenes. Los soldados de la Unidad Yahalom y de la ISA inspeccionaron la ruta y "neutralizaron los obstáculos, las puertas blindadas, las armas, los explosivos y los escondites utilizados por los terroristas".

"El rescate se llevó a cabo tras prolongados combates en una zona urbanizada y en edificios de varios pisos, en los que las fuerzas llevaron a cabo operaciones y registros que condujeron a la eliminación de los terroristas y a la destrucción de la infraestructura terrorista", señala la nota.

No es la primera vez desde el 7 de octubre en la que algunos de los rehenes mueren bajo fuego israelí. En diciembre otros tres fueron asesinados por error por las fuerzas israelíes después de que escaparan por su cuenta, y Hamás afirma que otros han muerto en ataques aéreos israelíes. Una realidad que ha llevado a la principal asociación de familiares de los rehenes a apostar por alcanzar un acuerdo de tregua con Hamás que evite riesgos y permita el regreso a casa de los 109 rehenes que aún permanecen en la Franja de Gaza.