Aunque las elecciones europeas se celebraron hace ya casi cuatro meses, la nueva Comisión Europea todavía no ha empezado a andar. El verano y el proceso para que los estados miembros remitiesen a sus candidatos para ser comisarios han dilatado el inicio de curso para el nuevo ejecutivo comunitario. Pero los últimos pasos están cerca. La Comisión de Asuntos Jurídicos del Parlamento Europeo comenzará este mismo jueves a evaluar las declaraciones de intereses de los candidatos, lo que traslada a noviembre las audiencias en las comisiones parlamentarias de cada una de las carteras.

El primer paso de los candidatos a convertirse en parte del gobierno de Ursula Von der Leyen es una evaluación por parte de los miembros de Juri, la comisión jurídica del Parlamento. Los eurodiputados valorarán la información financiera y las declaraciones sobre posibles conflictos de intereses que han tenido que responder los futuros comisarios. Si tuvieran dudas, pueden preguntar por escrito acerca de esa información aportada y no sobre otros datos que se hayan conocido sobre los candidatos.

Otra opción, es que los eurodiputados inviten a los candidatos a asistir a una reunión de la Comisión para responder a sus preguntas. En ese caso, el plazo del que disponen es hasta el próximo 18 de octubre. La comisión jurídica puede tumbar a algún candidato si considera que no responde a las cuestiones que plantean adecuadamente, pero siempre en relación a la información que estos han proporcionado. Pero sí pueden emitir avisos para que se tengan en cuenta otros aspectos en las audiencias ante el resto de comisiones parlamentarias.

Si en este proceso ya hay candidatos que no llegan a las audiencias, el país al que representen deberá designar a un nuevo candidato que debería empezar de nuevo con su declaración que a su vez, deberá ser evaluada por Juri.

Audiencias en noviembre

Con este calendario, los comisarios se enfrentarán a las audiencias en las comisiones correspondientes a las carteras que van a ocupar entre el 4 y el 12 de noviembre. Cada comisario necesita el apoyo de al menos dos tercios o de mayoría simple en tercera votación. Si no consigue pasar el examen, el estado miembro tiene que proveer otro. Fuentes políticas auguran que esta será la situación en la que se encuentren algunos de los candidatos propuestos, por lo que el proceso puede ser todavía más largo.

La votación para elegir a Teresa Ribera como comisaria española será de las últimas, porque además de ocupar la cartera de Transición ecológica y de Competencia, Ribera será también vicepresidenta ejecutiva y se prevé que los vicepresidentes se voten al final.

Como adelantó EFE, la audiencia de Ribera estará entre las más multitudinarias: le examinarán como comisiones principales la de Economía, la de Medio Ambiente y Salud Pública y la de Industria, Investigación y Energía. Además, acudirán como comisiones invitadas -sin potestad de plantear preguntas, salvo sus presidentes- la de Mercado Interior, la de Empleo, la de Transporte, la de Agricultura y la de Desarrollo Regional.

Los comisarios tienen que pasar audiencia por todas las comisiones del Parlamento Europeo en las que puedan tener interés sus competencias, en algunos casos, pueden ser hasta ocho, según las mismas fuentes.

Voto en el pleno del Parlamento

Después de las audiencias, el pleno del Parlamento tiene que votar en su conjunto la composición del colegio de comisarios. Si el paso por las comisiones se terminase el 12 de noviembre, se podría votar en el pleno que se celebra en Bruselas a partir del 13 de noviembre. Sin embargo, las fuentes consultadas dan por complicado este escenario.

Teniendo en cuenta que se pueden caer candidatos por el camino, lo más probable es que la votación tenga lugar durante la última semana de noviembre, cuando se celebra de nuevo un pleno en Estrasburgo. De esta forma, si la Eurocámara da por buena la composición del ejecutivo liderado por Ursula Von der Leyen, la nueva Comisión empezaría a trabajar el próximo 1 de diciembre.