Tras su audiencia con el Papa, el presidente del Gobierno Pedro Sánchez ha avanzado este viernes que llamará a la comunidad internacional a dejar de exportar armas a Israel por "contravenir el derecho internacional" con la "invasión" de Líbano. Una petición que contrasta con la continua compra de material de defensa israelí por parte del Ejecutivo español. Tal y como informó El Independiente hace un mes, las importaciones rondan ya los 11.000 millones de euros en lo que va de 2024 tras la firma de varios contratos por parte del ministerio de Defensa en agosto.

"El Gobierno de España desde el pasado 7 de octubre no exporta ningún tipo de armamento ni de material militar a Israel, ninguno", se ha jactado Sánchez en una rueda de prensa en la Academia de España en Roma tras reunirse con el papa Francisco. A juicio del presidente, resulta urgente que "la comunidad internacional cese de exportar armas al Gobierno de Israel" en mitad de la escalada regional.

Sumar pide un embargo total de compraventa de armas

"Creo que es urgente que, a la luz de lo que está ocurriendo en Oriente Medio, la comunidad internacional cese de exportar armas al Gobierno de Israel. Creo que esto es de urgencia y es un llamamiento que voy a hacer desde el primer instante al conjunto de la comunidad internacional, cesar de exportar armas al Gobierno de Netanyahu", alega. Sánchez considera que Israel con "estas hostilidades" vulnere el derecho internacional porque "está invadiendo un tercer país", el Líbano, y también el derecho internacional humanitario con, por ejemplo, los asentamientos en Cisjordania.

Sus declaraciones coinciden con la llamada de su socio de coalición, Sumar, a romper relaciones diplomáticas y comerciales con Israel e imponer un embargo total en la compraventa de armas y equipos de defensa procedentes de empresas israelíes. Un hecho que no se ha producido hasta ahora.

El continuo flujo de importaciones desde Israel -con licitaciones actualmente abiertas para el mantenimiento de equipos de fabricación israelí- no solo contradice el compromiso político exhibido públicamente por el Gobierno de coalición sino que se produce mientras otros Estados miembro de la Unión Europea han comenzadA principios de septiembre Irlanda, el país de la UE que junto a España reconoció simultáneamente el Estado Palestino en mayo, anunció que dejaba de adquirir material militar como medida de presión para acabar con la guerra en Gaza. En público, su primer ministro Simon Harris lo vinculó al cumplimiento de las resoluciones de la Corte Internacional de Justicia, que trata de dirimir si la actual operación militar israelí en la Franja de Gaza puede ser calificada de "genocidio".

Condena los ataques israelíes a la UNIFIL

Por otro lado, Sánchez ha condenado los ataques del ejército israelí al cuartel general de la UNIFIL, la misión de paz de Naciones Unidas en el Líbano. "Permítanme también criticar y condenar los ataques que esta sufriendo la misión Finul por parte de las fuerzas israelíes. Nos parece algo absolutamente condenable y sirve para recordarnos la urgencia de acabar con esta espiral de violencia en Gaza y Líbano", ha deslizado. "Desde luego también nuestra firma condena a cualquier tipo de violación, de ataque, de vulneración de ese derecho internacional humanitario, sea en Gaza, en Cisjordania, sea también en Ucrania, o más recientemente como estamos viendo estas últimas horas, estos últimos días, en Líbano", ha añadido en su línea ya habitual de presumir de coherencia de su política exterior ignorando su posición en el conflicto del Sáhara Occidental, la ex colonia española en la que Sánchez apoya al ocupante marroquí.

Tras su reunión con el Papa en el Vaticano, Sánchez viajará a Chipre para la cumbre de países europeos del Mediterráneo, que reúne a los líderes de España, Italia, Francia, Portugal, Grecia, Malta, Chipre, Eslovenia y Croacia. El nuevo viaje de Pedro Sánchez al Vaticano se enmarca en su intención de aunar esfuerzos en favor de la paz en Oriente Medio ante la gravedad de los acontecimientos después de haberse cumplido un año del inicio del conflicto entre Israel y Hamás.