La misión de la ONU en el sur del Líbano (FINUL) ha denunciado este domingo la entrada por la fuerza, esta madrugada, de dos tanques del Ejército de Israel en una de sus posiciones en el sur de Líbano, dejando al menos 15 de sus efectivos intoxicados poco después por humo de proyectiles y de poner en peligro a los soldados de paz después de que tres pelotones de efectivos israelíes cruzaran hoy la Línea Azul y violaran nuevamente la resolución 1701 del Consejo de Seguridad de la ONU.

"Temprano esta mañana, las fuerzas de paz en una posición de la ONU en Ramyah observaron a tres pelotones de soldados de las FDI (Ejército israelí) cruzando la Línea Azul hacia el Líbano. Alrededor de las 4.30 hora local, mientras los soldados de paz se encontraban en refugios, dos tanques Merkava de las FDI destruyeron la puerta principal de la posición e ingresaron a la fuerza en ella", informó la misión en un comunicado. 

El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, ha pedido abiertamente este domingo al secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, la retirada de las posiciones de la fuerza de paz de la ONU en la frontera de Líbano, la FINUL, cuyos integrantes se han convertido, a su entender, en "escudos humanos" para las milicias de Hezbolá.

"Es hora de retirar a la FINUL de los bastiones de Hezbolá y de las zonas de combate", ha hecho saber Netanyahu en una declaración oficial dirigida al secretario general de la ONU.

En ella, el primer ministro israelí lamenta que el Ejército de Israel ha realizado previamente esta petición, solo para ser "rechazada constantemente"; una negativa, asegura, "enteramente destinada a proporcionar escudos humanos a los terroristas de Hezbolá"

"Su negativa a retirar a las fuerzas de la FINUL convierte a sus integrantes en rehenes de Hezbolá y pone también en peligro las vidas de nuestros soldados", ha remachado Netanyahu en la declaración. "Señor secretario general, retire las fuerzas de la FINUL de las zonas de peligro. Hágalo ahora mismo, de inmediato", culmina.