Era una de las noticias largamente buscada por Israel. Y se ha producido este jueves. El ejército israelí ha confirmado haber matado a Yehia Sinwar, máximo líder de Hamás que se hallaba hasta ahora escondido en la Franja de Gaza. "Yahya Sinwar ha sido eliminado", ha comunicado la radio oficial del Ejército israelí.

Una hora antes, el ejército israelí había reconocido estar investigando la posibilidad de haber eliminado a Sinwar en una operación de las Fuerzas de Defensa de Israel. "Durante las operaciones de las Fuerzas de Defensa de Israel en la Franja de Gaza fueron eliminados tres terroristas. Las FDI y la Agencia de Seguridad de Israel están comprobando la posibilidad de que uno de los terroristas fuera Yehia Sinwar. Por el momento no puede confirmarse la identidad de los terroristas", ha indicado el ejército israelí en un comunicado. Las autoridades israelíes han practicado la prueba de ADN a los cuerpos, en su poder.

Las primeras informaciones apuntan a que se registró un incidente en el que el ejército israelí identificó a tres hombres armados en Tal as Sultan, una zona de Rafah en el sur de la Franja de Gaza. Se enfrentaron a esos tres hombres armados y los mataron. Surgió entonces la sospecha de que fuera Sinwar.

"En el edificio donde fueron eliminados los terroristas no había indicios de la presencia de rehenes. Las fuerzas que operan en la zona siguen actuando con la debida cautela", indica el breve comunicado.

En los cadáveres de los terroristas se hallaron dinero, documentos de identidad y material de combate. Los uniformados israelíes no estaban en la zona para una operación de asesinato y no disponían de información previa sobre la presencia de Sinwar en el lugar, precisan fuentes israelíes.

"Una victoria táctica"

La eliminación de Sinwar, que llegó al liderazgo de la organización en agosto tras el asesinato de Ismail Haniyeh en Teherán, es un duro golpe para la estructura de Hamás en la Franja de Gaza. Sinwar es considerado el cerebro del ataque del 7 de octubre, el más devastador contra Israel en décadas. Se hallaba escondido en la red de túneles de la Franja de Gaza, desafiando los intentos israelíes de matarlo desde el comienzo de la guerra.

“El asesinato de Yehia Sinwar supondría una importante victoria táctica para Israel, ya que fue uno de los artífices de la operación de Hamás del 7 de octubre y de la defensa de Gaza desde esa fecha. Pero el coste puede ser alto, ya que los dirigentes israelíes parecen creer que Sinwar se ha rodeado de rehenes israelíes para protegerse de un ataque”, indicó hace meses en conversación con este diario Joost Hiltermann, director del programa de Oriente Próximo y Norte de África del International Crisis Group.

Sinwar, que pasó la mitad de su vida adulta en prisiones israelíes, era el dirigente de Hamás más poderoso que quedaba vivo tras el asesinato de Haniyeh. En el último año Israel ha asesinado a altos cargos del movimiento islamista palestino como Saleh al Arouri, liquidado en Beirut a principios de este año, y Mohammed Deif, comandante militar del movimiento.

"Duro y pragmático"

Nacido en un campo de refugiados en la ciudad de Jan Yunis, en el sur de Gaza, Sinwar, de 61 años, fue elegido líder de Hamás en Gaza en 2017 tras ganarse una reputación de ejecutor implacable y enemigo implacable de Israel. Anteriormente fue jefe del aparato de seguridad Al Majd, que rastreaba, mataba y castigaba a palestinos acusados de colaborar con el servicio secreto de Israel antes de ser encarcelado.

Es, además, miembro fundador de las brigadas de Ezzeddin al Qasam, el brazo armado de Hamás, y de su servicio de inteligencia. Está acostumbrado a operar en la sombra y conoce Gaza y su organización al milímetro. “Es un tipo valiente y un verdadero muyahid (guerrero santo). Es estricto y habla en serio. Amenazó muchas veces a Israel pero no le creyeron”, explicó a El Independiente Mohamed Nazzal, dirigente de Hamás que, a pesar de hallarse en el exilio, ha compartido múltiples reuniones con Sinwar. La última hace dos años en El Cairo, cuando los planes del ataque ya se encontraban avanzados.

Quienes le conocen -camaradas de organización, compañeros de celda e incluso agentes de la inteligencia israelí que le interrogaron- coinciden en que la personalidad de Sinwar es “dura” y “pragmática”.

Fue liberado en 2011 en el canje de 1.027 presos palestinos en cárceles israelíes por el soldado israelí Gilad Shalit, que pasó un lustro secuestrado en Gaza. Desde entonces, Sinwar se convirtió en una pieza clave del entramado de Hamás en la Franja.

“Es una persona muy extrema. Algunos dicen que tiene rasgos psicopatológicos. Incluso miembros de Hamás le consideran una persona muy cruel”, señaló a este diario Avi Melamed, ex funcionario de inteligencia israelí. Durante los interrogatorios se jactaba de haber matado a presuntos informantes con “una cuchilla de afeita” o “un machete”. Una frialdad que le granjeó el apodo del “carnicero de Jan Yunis”, su lugar de procedencia en Gaza.