Los israelíes le apodaron “el carnicero de Jan Yunis” por su papel en la creación de Majd, la agencia de Hamás dedicada a perseguir a supuestos colaboradores palestinos de Israel. Yehia Sinwar fue detenido por los israelíes en 1989, cuando tenía 27 años, y liberado cuando había cumplido los 49 tras ser condenado a cuatro cadenas perpetuas y beneficiarse del canje por el soldado israelí Gilad Shalit. Su muerte, apenas tres meses después de hacerse con las riendas de Hamás, es un duro revés para Hamás.

“La muerte de Sinwar no habría sido tan significativa si no hubiera ocurrido tan cerca del asesinato de su predecesor Ismail Haniyeh en julio, así como de Nasralá de Hizbulá y de casi todos los rostros públicos clave del eje iraní como Suleimani en 2020”, reconoce el periodista y experto en Oriente Medio Hassan Hassan. “La imagen es la de un edificio que se derrumba”, agrega.

El liderazgo de Hamás que ha sobrevivido a trece meses de persecución se enfrenta ahora, nuevamente, a la necesidad de elegir sucesor de Sinwar, en pleno de la actual ofensiva en la Franja de Gaza y del hostigamiento israelí. El reto del Consejo de la Shura, principal órgano consultivo del grupo, es mayúsculo porque, en el lapso de este año, el movimiento islamista palestino ha perdido a posibles recambios como su “número dos”, Saleh al Arouri, liquidado por un dron israelí a principios de este año en Beirut.

Tras la breve experiencia de Sinwar, las cartas apuntan hacia la dirigencia en el exilio, a caballo de Turquía y Qatar. El organigrama de Hamás como institución política está formado por tres ramas: la de Franja de Gaza, en manos de Yehia Sinwar; la de Cisjordania, liderada por Saleh al Arouri; y la diáspora, hasta ahora encabezada por Haniyeh. Los tres líderes han sido liquidados en lo que va de año.

“Cuando uno de ellos es por cualquier motivo destituido o eliminado, le sustituye el resto. Ahora sólo queda uno, que es Jaled Meshaal, al frente de la diáspora”, señaló hace unos meses Azzam Tamimi, experto en la organización. Meshaal es junto a otras dos supervivientes del grupo los más que probables aspirantes a dirigir los restos del movimiento.

Jaled Meshaal

Es la principal figura política de Hamás. Dirigió el movimiento entre 1996 y 2017. Nacido en Cisjordania en 1956, preside ahora la oficina política de Hamás en Qatar, donde reside y desde donde es uno de los principales negociadores del grupos en los contactos con mediación qatarí para un alto el fuego en Gaza y la liberación de los rehenes que quedan en manos de Hamás.

Tras la fundación de Hamás en 1987, se convirtió en el líder de su sucursal en Kuwait, donde vivió entre 1967 y 1990. Con el inicio de la Guerra del Golfo en 1990, se mudó a Jordania, donde sobrevivió en 1997 a un intento de asesinato por parte de Israel que originó una crisis diplomática entre ambos países.

Fue expulsado de Jordania en 1999 y buscó refugio en Qatar. Meshaal ascendió en el movimiento tras el homicidio de Ahmed Yassin y su sucesor Abdelaziz al Rantisi en 2004. Durante su mandato el grupo venció en los comicios de 2006. Entre 2000 y 2012 residió en Damasco. Tras el estallido de la guerra civil siria, retornó a Doha.

Jalil al Haya

Diputado de Hamás desde 2006, nació en 1960 en Gaza. Se halla afincado en Qatar. Curtido en sindicatos estudiantiles y de trabajadores, es miembro del poliburó de Hamás y desempeñó un papel clave en la negociación para el alto el fuego durante la guerra contra Israel en 2014.

Varios miembros de su familia, incluidos su esposa y sus tres hijos, fueron asesinados por Israel durante un intento de asesinato contra él en 2007. También ha perdido a varios de sus hermanos en bombardeos aéreos israelíes.

Nizar Awadallah

Nacido en 1957 en la ciudad de Gaza, es miembro del poliburó de Hamás desde 2009. Graduado en Ingeniería Civil por la Universidad Ain Shams de El Cairo, Awadallah fue el segundo de Sinwar en los comicios internas para decidir el líder de la organización en Gaza en 2021. Su biografía está estrechamente ligada a la del fundador de Hamás, el jeque Ahmed Yasin, de quien fue confidente.

Awadallah ocupó la máxima dirección de Hamás en la Franja de Gaza antes de la irrupción de Sinwar y fue uno de los urdidores de la negociación para la liberación del soldado Gilad Shalit a cambio de 1.027 presos palestinos, entre ellos, Sinwar. Al igual de su ex compañero, liquidado este miércoles, Awadallah fue detenido por Israel en 1989 y pasó seis años en prisión. Su casa, en el barrio de Sheikh Radwan de la ciudad de Gaza, ha sido blanco de ataques aéreos israelíes en dos ocasiones.

Mousa Abu Marzouk

Otro posible contendiente es Mousa Abu Marzouk, 73 años. Es uno de los fundadores de Hamás y miembro actual de su poliburó además de una figura clave en las negociaciones para la reconciliación con Fatah. Inició su carrera política en Emiratos Árabes Unidos, donde contribuyó a fundar una rama de los Hermanos Musulmanes palestinos que fue el germen de Hamás.

Mas tarde, se trasladó a Estados Unidos, donde ayudó a fundar varias instituciones y fundaciones islámicas, entre ellas algunas centradas en la causa palestina. Es miembro fundador de la Universidad Islámica de Gaza.

Fue deportado en dos ocasiones por Jordania, en 1995 y 1999, por su trabajo con Hamás y los Hermanos Musulmanes; la primera vez fue extraditado a Estados Unidos, donde el FBI lo detuvo y recluyó sin cargos hasta 1997, cuando fue devuelto a Jordania; y en 1999, cuando fue deportado a Siria. Abandonó Siria en 2012 y desde entonces ha vivido entre Gaza, Egipto y Qatar.