Baltasar Ebang Engonga, alias "Bello" por buen parecido físico, mantuvo decenas de encuentros sexuales con mujeres en su despacho y otros lugares. Las citas fueron grabadas en vídeo y la filtración de hasta 400 vídeos explícitamente sexuales ha sacudido Guinea Ecuatorial, la otrora colonia española y el “reino” del dictador Teodoro Obiang, de 82 años y el presidente más longevo del mundo, en el poder desde 1979.

El terremoto en un país enfrascado en el debate de quién será el sucesor de Obiang es aún mayor por la identidad de los protagonistas de los vídeos. Muchas de las mujeres grabadas eran esposas y familiares de personas cercanas al establishment del país, uno de los más corruptos y brutales del planeta. En las cintas aparece "Bello", hijo de Baltasar Engonga Edjoo, presidente de la Comunidad Económica y Monetaria de África Central (CEMAC), con esposas de autoridades civiles y militares y mujeres solteras célebres manteniendo sexo sin protección.

Algunas de las mujeres eran conscientes de que estaban siendo grabadas manteniendo relaciones sexuales con Baltasar Ebang Engonga. El funcionario fue cesado el pasado 25 de octubre como director general de la Agencia Nacional de Investigación Financiera de Guinea Ecuatorial (ANIF), la institución que supuestamente luchaba contra delitos como el blanqueo de dinero. Y, desde entonces, el régimen ha tratado de controlar el escándalo, con escaso éxito. Los vídeos han circulado por las redes sociales. Comenzaron a distribuirse en Telegram y saltaron luego a WhatsApp.

Prohibidos "las relaciones sexuales" en despachos gubernamentales

La semana pasada el Gobierno de Guinea Ecuatorial prohibió públicamente las "relaciones sexuales" en oficinas de los ministerios, informa Efe. Tras estallar el escándalo, el Gobierno reaccionó convocando a los responsables del Ministerio de Transportes y Nuevas Tecnologías y de empresas de telefonía para frenar la difusión de los "vídeos de índole pornográfica que están inundando las redes sociales".

"Se trata de mujeres casadas participando y grabándose en actos que están denigrando su reputación y dignidad. En nuestra posición de Gobierno, no podemos seguir viendo cómo se desmoronan las familias sin tomar ninguna disposición", afirmó el vicepresidente ecuatoguineano, Teodoro Nguema Obiang, popularmente conocido como 'Teodorín', en la red social X.

Engonga se encuentra en prisión preventiva por presunta corrupción en la cárcel de Black Beach en la capital, Malabo, conocida por los malos tratos a los reclusos que denuncian organizaciones pro derechos humanos desde hace años. Está acusado de malversar una enorme suma de dinero de las arcas del Estado y depositarla en cuentas secretas en las Islas Caimán.

Las escenas se grababan en su despacho oficial, en baños públicos, en habitaciones de hoteles de Guinea Ecuatorial y, a veces, en hoteles de fuera del país. Sus teléfonos y ordenadores fueron incautados y pocos días después los vídeos íntimos empezaron a aparecer en Internet.

El diario local Ahora EG calificó el caso como "un escándalo sexual sin precedentes en toda la historia de Guinea Ecuatorial". Según el periódico, el exjefe de ANIF "filmaba esos encuentros íntimos, aparentemente con el consentimiento de sus compañeras", aunque "lo más llamativo es que algunas escenas se desarrollaban en su oficina de trabajo, incluyendo momentos en los que se le ve acostándose con una mujer al lado de la bandera nacional".

Guerra por la sucesión

Mientras las autoridades investigan el origen de los vídeos, el fiscal general de la República, Anatolio Nzang, adelantó que "el Misterio Publico procedería a realizar las pruebas para determinar si el sujeto posee enfermedades de transmisión sexual porque podría haber un delito de salud pública".

Tanto revuelo ha provocado el caso, que Nguema Obiang, hijo del presidente del país, Teodoro Obiang Nguema, no deja de anunciar medidas para salvar la imagen del país. "Recordando que los ministerios son única y exclusivamente para realizar labores administrativas en pro del desarrollo del país, queda prohibido mantener relaciones sexuales en las oficinas. Los mecanismos de control ya están en marcha", dijo hace una semana.

Desde entonces el vicepresidente ha informado de "la suspensión inmediata de todos los funcionarios que han tenido relaciones sexuales en las oficinas de los ministerios del país" y ha prometido "medidas severas ante esos actos" como parte de la "política de cero tolerancia hacia comportamientos que socavan la integridad del servicio público".

'Teodorín' ha incluso declarado que el Gobierno "implementará en breve la instalación de cámaras de vigilancia en todas las oficinas de los órganos del Estado". "Hemos tomado esta disposición para garantizar el cumplimiento de la ley de funcionarios y erradicar comportamientos indecorosos e ilícitos. No admitiremos ninguna falta que denigre la integridad de nuestra administración", ha indicado en X. El vicepresidente, ayudado por su madre, está tratando de apartar de su camino a la presidencia del país a cualquiera que pueda hacerle sombra, incluido Gabriel Obiang Lima -otro hijo del presidente Obiang de diferente esposa-, ministro de Petróleo durante una década.

Desde su independencia de España en 1968, Guinea Ecuatorial está considerada por organizaciones defensoras de los derechos humanos uno de los países más corruptos y represivos del mundo. Teodoro Obiang, de 82 años, gobierna el país con mano de hierro desde 1979, cuando derrocó a su tío Francisco Macías en un golpe de Estado, y es el presidente que lleva más tiempo en el poder del mundo.

En un paíus controlado férremeante por Obiang, una de las hipótesis es que la filtración es un modo de desacreditar al funcionario. Engonga es sobrino del Presidente Teodoro Obiang Nguema y se cree que es uno de los aspirantes a sustituirle. Pertenecía hasta ahora a una pequeña élite extremadamente rica. La mayoría de los 1,7 millones de habitantes del país vive en la pobreza.

No es el primer escándalo que salpica al régimen. En el pasado suscitó polémica el lujoso estilo de vida de uno de los hijos del presidente, ahora vicepresidente, que llegó a poseer un guante de 275.000 dólares (210.000 libras) con incrustaciones de cristal que llevó Michael Jackson. A pesar de la celebración periódica de elecciones, en Guinea Ecuatorial no existe una oposición real, ya que los activistas han sido encarcelados y exiliados, y quienes aspiran a un cargo son objeto de una estrecha vigilancia.