“Nunca he visto posibilidad real de victoria”, asevera el coronel Manuel Morato. Recién cruzado el umbral de los 1.000 días de guerra, Morato, uno de los militares españoles que mejor conocen Rusia y Ucrania, se mantiene fiel a lo que ha sostenido sobre el mayor conflicto en suelo europeo desde la II Guerra Mundial. La coyuntura, marcada por el regreso a la Casa Blanca de Donald Trump y una guerra de desgaste sin fin, alimenta la sensación de fatiga y también las primeras señales de la necesidad de avanzar hacia las negociaciones.
“Se podía haber evitado y, desde mi punto de vista, se tenía que haber evitado. Hemos perdido mucho y, en principio, no hemos ganado lo que queríamos ganar”, desliza Morato, presidente del Instituto de Debate y Análisis de Políticas de Seguridad. A finales de la década de 1980 estudió la Perestroika militar en Rusia en las aulas de la universidad británica de Oxford. Entre 2004 y 2008 fue agregado militar español para Rusia, Ucrania, Bielorrusia, Kazajistán y Uzbekistán con residencia en Moscú. Durante los dos últimos años de su mandato en la capital representó ante el ministerio de Defensa de Rusia a todos los agregados militares acreditados en Moscú. Ha desempeñado también cargos en la OTAN y fue jefe del contingente español en Kosovo.
Pregunta.- ¿En qué momento se encuentra la guerra entre Rusia y Ucrania?
Respuesta.- En un momento de incertidumbre total, no solo en la guerra de Ucrania, sino en en el mundo en general. A partir del 20 de enero esa incertidumbre se acrecienta por el nuevo mandato del presidente Donald Trump. Lo he dicho desde que empezó la guerra. Desde mi punto de vista, se tenía que haber evitado y creo que se ha provocado. Es lo que también ha declarado el Papa Francisco al respecto. Lo que es incontestable es que ha ido aumentando. Lo que parecía que iba a ser una guerra por parte de Rusia de seis o siete días no sucedió. Evidentemente fue un gran fracaso por parte de Rusia en todos los sentidos. También en el logístico de la operación militar, pero la realidad es que todo ha ido a peor desde el punto de vista de la confrontación militar y número de muertos, heridos y víctimas además de la destrucción. Durante el primer año de guerra coincido con la mayoría en que Ucrania tenía alguna posibilidad. Nunca he visto una victoria de Ucrania pero como no vería nunca que un país pueda enfrentarse a una potencia como Estados Unidos o como China o si me apuras incluso a un país medio como el Reino Unido; enfrentarse a un país que, de antemano, sabes que tiene unas capacidades militares muy superiores a las tuyas está condenado al fracaso. Nunca he visto posible que Ucrania pudiera vencer a Rusia. No nos engañemos. Ucrania no puede ganar. ¿Qué pasa? Nos han contado un relato que podría ser creíble; para mí no lo era. Podemos hacer caer a Putin, no militarmente, pero con una revolución interna, con sanciones económicas.
Nos han contado un relato que podría ser creíble; para mí no lo era
P.- ¿Ha sido la UE arrastrada a una guerra por intereses de otros?
R.- Eso yo lo he pensado desde el primer momento. Nadie me explicó nunca cuáles eran las ventajas para la Unión Europea, salvo por lo de los valores. Los valores no mueven el mundo. Durante determinadas épocas, los valores religiosos, confundidos o no con los morales, sí que podían mover muchas voluntades, pero ya no es el caso. Lo que sí mueven las relaciones internacionales son los intereses, entre ellos los económicos fundamentalmente, pero luego están dentro de los económicos pues los intereses partidistas, los intereses también de los lobbies según la fuerza que puedan tener o no. Esos intereses nos han llevado a decirnos que esto es lo que había que hacer y que había que defender. Pongo un ejemplo muy simple. Tú te encuentras con una pelea en la calle y dices, "¿cómo puedo ayudar?" En principio se supone que eres una persona racional y que lo que quieres es ayudar a que no haya sangre. Pero tienes que pensar en cómo lo haces. Uno puede pensar: "A este le doy un palo para que se pueda defender, pero resulta que el otro tiene una estaca, una espada o un arma de fuego". Hay que pensar si eso sirve o va a ser útil o coste tiene si te implicas. Yo desde el primer momento he dicho que a Rusia militarmente es imposible que Ucrania la derrote. Si Occidente entra en la guerra contra la Rusia sí que podría, pero como militar a la hora de ir a la guerra tengo que ver si el resultado es que mueran todos los míos o una parte considerable y si no voy a lograr nada o tengo posibilidades de éxito. Si no le veo futuro desde el punto de vista militar es absurdo; es una traición casi hacia los míos.
A Rusia militarmente es imposible que Ucrania la derrote
P.- 1.000 días después, en Bruselas se ha instalado el relato de que no hay alternativa a seguir ayudando a Ucrania. ¿Es seguir arrojando gasolina al fuego?
R.- A la vista están los datos, o sea, no se ha conseguido parar la guerra. Y suponemos que se quiere parar la guerra. Ha habido unas negociaciones que estuvieron a punto de dar resultado en Turquía y no lo dieron. La guerra es el fracaso de la política. A los militares la sociedad nos prepara para que hagamos la guerra ofensiva o defensivamente. Sería absurdo pensar que el militar va a resolver el problema. El problema se tiene que resolver de una forma política. Cuando Trump decía que puede resolver la guerra en 24 horas, es realmente muy difícil porque se lo hemos puesto muy difícil, porque se han empeñado y se siguen empeñando en ponerlo cada vez más difícil. Ahora es más complicado que hace una semana.
Sería absurdo pensar que un militar va a resolver un problema que debe solucionar la política
P.- ¿Se siguen tomando medidas erróneas?
R.- Especialistas en temas relacionados con Rusia y estoy hablando de americanos nada sospechosos de nada han dicho que Ucrania era una línea roja para Rusia, que no se podía hacer eso, que era un error, que el avance hacia el este era un error. Las medidas que se toman no son beneficiosas. Que se lo pregunten a los alemanes si es beneficiosa la situación en la que estamos. Y no le preguntes al español de a pie porque no sabe que la razón por la cual está pagando mucho más cada vez que va a la compra es porque tenemos una serie de condicionamientos. No le echo la culpa a este gobierno ni al anterior ni al que esté mañana porque desgraciadamente no tenemos autonomía o soberanía realmente. Uno de los problemas que hay desde mi punto de vista ahora es que el PP, el PSOE y los partidos más importantes en España están en la misma línea. Nos han dicho que hay que apoyar a Ucrania porque no nos queda más remedio. La UE dice que es un problema existencial para Europa. Son palabras muy fuertes y muy duras.
P.- Reconociéndolo como existencial se une el destino de la UE al de Ucrania y a los resultados de la guerra…
R.- Claro. A mí me preocupan cosas que estoy oyendo últimamente. Personas con responsabilidades que te dicen: “Al fin y al cabo el ciudadano nunca se ha enterado de cuando va a una guerra, va a la guerra y punto”. Estamos en el siglo XXI. No se puede ir a una guerra sin saber por qué. Soy una persona que he tenido que trabajar en sitios donde lo que marcaba era la prudencia, las relaciones diplomáticas e intentar llevarse bien. Yo creo que no hemos ido por ese camino.
P.- ¿La UE se ha dejado seducir por la élite política ucraniana?
R.- A Ucrania yo la comprendo perfectamente. Creo que se cometieron muchos errores antes. Ahora no es el momento de analizar lo que ha pasado. No se eligió a Zelenski para lo que después sucedió. La única solución es la que yo he apuntado desde el primer momento, es involucrarnos. Lo que pasa es que hemos ido dosificando la ayuda con esa idea. Zelenski lo tiene cada vez más complicado. No creo que se quede a vivir en Ucrania. Siempre ha intentado que nos involucremos de verdad porque él sabe que es la única forma de vencer. Si alguien piensa que se puede recuperar el territorio que Rusia le ha arrebatado militarmente a Ucrania, yo creo que está en un error total. Es imposible. Esto camina al arma nuclear, lo cual no quiere decir que eso suponga la aniquilación y la muerte de todos nosotros. Pero, ¿por qué se utilizó el arma nuclear en Hiroshima y Nagasaki? Para acabar la guerra y evitar más muertos.
Hay que tomarse en serio la nueva doctrina de Putin. Le permitiría usar el arma nuclear mañana
P.- ¿Hay que tomarse en serio la nueva doctrina de Putin?
R.- Sin la menor duda. Afortunadamente, hasta ahora Putin no estaba loco y eso que nos decían era mentira. No sé quien puede pensar que alguien que tiene el mayor arsenal no nuclear del mundo no lo va a utilizar si se ve con el agua al cuello. Esa doctrina actualiza el uso del arma nuclear es una cuestión no menor. Yo sé que algunos no le dan importancia, pero como no se la han dado a otras cuestiones. El cambio de doctrina le permitiría a Putin, desgraciadamente para nuestros intereses, utilizar el arma nuclear mañana.
P.- ¿Cómo se entiende entonces la autorización de Biden a Ucrania para el uso de misiles de largo alcance?
R.- Biden se ha comprometido muchísimo, igual que hay muchos líderes europeos que no pueden dar marcha atrás. Tienen que ser otros los que lo den.
P.- Podría entenderse como un herramienta para mejorar la posición de Ucrania en una negociación...
R.- Sí. Y no hay que olvidar lo que pasa con Kursk. Rusia está perdiendo ahí. Rusia tiene que estar pensando también en que va a haber una negociación más pronto o más tarde, incluso si la respuesta militar rusa es más fuerte. En cualquier caso, de una manera o de otra, el final de esto tiene que ser una negociación y en eso estamos de acuerdo todos.
P.- ¿Hay que negociar con Putin?
R.- Es que si no se negocia con Putin, ¿con quién negocias? Lo que pasa es que tienen que cambiar determinados líderes. Prefiero, además, no personificar. No veo que en Rusia haya un posible líder que tenga unas ideas diferentes en cuanto a Ucrania. Hasta ahora las sociedades -rusa, ucraniana y bielorrusa- coexistían perfectamente. Se ha metido ahí un veneno. Ahora son enemigos totales. Si se quiere acabar con la guerra hay que negociar y para negociar hay que saber que se puede ganar algo y tambi-en perder algo. Desde mi punto de vista, la situación que hay en este momento es mucho peor que la que había el primer año de la guerra.
Por muchas razones a Europa no le interesaba esta guerra
P.- ¿Los intereses de la UE y de Ucrania son los mismos?
R.- Creo que son diferentes. Lo que pasa es que sí que convergen de alguna manera. En un estado ideal de las cosas, a la UE sí que le interesa tener a Ucrania. Desde el punto de vista económico, creo que se podía aceptar y que incluso Rusia hubiera aceptado que Ucrania fuera un estado miembro de la UE. Rusia había reconocido que un país tenía derecho de paraguas de seguridad y que podría pertenecer a la organización que quisiera, siempre y cuando no perjudique los intereses de seguridad de otros. Eran siempre las cuñas que metía Rusia. ¿Por qué? Rusia sí que veía desde el primer momento como un riesgo la ampliación de la OTAN. Un riesgo puede convertirse en amenaza y de ahí en un peligro existencial. Aceptó las anteriores pero si le quitas el colchón de Ucrania. Entiendo como militar desde el punto de vista de la defensa territorial de Rusia y del gobierno que Ucrania es vital.
Por muchas razones a Europa no le interesaba esta guerra. Primero era lo de la disuasión nuclear. Lo siguiente es que estamos hablando de un país que es una potencia militar, pero es que tienes el tema del gas, petróleo y otras muchas cosas. La UE hizo sus cálculos. Intentar boicotear a Rusia es como hacérselo a China o EE.UU. Fracasarás porque se buscarán otros clientes. Rusia no está sola. Aunque dijéramos y quisiéramos pensar que Putin y que Rusia estaban aislados, pues bueno, en las últimas reuniones internacionales hemos visto que no era así.
P.- Las negociaciones a las que consideras que se encamina el conflicto implican concesiones territoriales. ¿Podrá Ucrania renunciar al mantra que mantiene de que no aceptará ceder territorio?
R.- Eso se acaba el 20 de enero. Todo parece indicar que Rusia ha perdido muchos más hombres que Ucrania. Entonces, ¿cómo se le puede decir al ciudadano ruso ahora que eso por lo que han luchado lo dejan? En una negociación tiene que haber intercambio de cromos. Rusia no va a ceder en las cuatro regiones anexionadas, que forman parte ya del territorio ruso. Son pasos que no estaban previstos en los acuerdos de Minsk, donde quedaban com zonas independientes dentro de Ucrania.
Rusia no va a ceder en las cuatro regiones anexionadas, que forman parte ya del territorio ruso
P.- ¿Cómo podrá Ucrania digerir esto?
R.- Ucrania está en una situación muy compleja. No ha habido elecciones cuando tenía que haberlas sabido.. Lo que se ha hecho ha sido ir cambiando a determinados militares y ministros basándose muchas veces en la corrupción o en la incompetencia militar. Por pura lógica Zelenski admitirá que aunque haya perdido el 20% del territorio, el 80% lo sigue controlando. Hay muchas maneras de hacer digerir las cesiones. Se puede cambiar el relato.
Por pura lógica Zelenski admitirá que aunque haya perdido el 20% del territorio, el 80% lo sigue controlando
P.- ¿Cuál es hoy la radiografía del ejército ucraniano?
R.- Ucrania ha recibido mucho apoyo en todos los sentidos de Europa, Estados Unidos y Canadá. Ha mejorado mucho, pero hay una cosa en la que no puede mejorar: la capacidad en hombres para poder combatir es muy inferior a la de Rusia. Aún así, unos y otros han cambiado las capacidades.
P.- La alternativa a la negociación es la continuación de la guerra. ¿Puede durar otros 1.000 días?
R.- Trump es un hombre de negocios y puede cambiar sus opiniones muy fácilmente. Puede que Trump vea que lo que para él ha sido una carga; para su país es una carga relativa, porque todo el apoyo de EE.UU. a Ucrania es un apoyo de ida y vuelta, sin muertos estadounidenses en la ecuación.
P.- ¿Europa está preparada para una guerra? Hay países que han desempolvado el servicio militar obligatorio…
R.- Hay muchas clases de guerras. Para una guerra contra Rusia no estamos preparados, pero eso no quiere decir que todos juntos no pudiéramos hacerlo. El ejército español está capacitado. Otra cosa es que tuviéramos el armamento necesario para eso y que tuviéramos la munición que se pudiera reponer. Todo depende de la contribución que hicieran otros aliados y de que nos pusiéramos a trabajar rápidamente toda la industria civil al servicio de la militar.
Te puede interesar
Lo más visto
- 1 Hatamleh, NASA: "En el futuro nos casaremos con robots":
- 2 Aldama puede acabar con Sánchez
- 3 "Ucrania no puede ganar la guerra y tendrá que aceptar las pérdidas territoriales"
- 4 La declaración de Aldama irrita al PSOE y refuerza a Cerdán a días del congreso: "Relevarlo sonaría a castigo injusto"
- 5 La ministra Margarita Robles se enfrenta a gritos con los afectados en Paiporta: "¡Yo no tengo la culpa!"
- 6 Recuperan un ancla del siglo XIX en la casa de un vecino de Muxía
- 7 30 curiosidades de Sissi, la emperatriz de Austria, que no sabías
- 8 La crisis de la natalidad, de Elon Musk a Europa y España
- 9 Quién es quién de la prole Jolie-Pitt y quién cambió su nombre
Comentarios
Normas ›Para comentar necesitas registrarte a El Independiente. El registro es gratuito y te permitirá comentar en los artículos de El Independiente y recibir por email el boletin diario con las noticias más detacadas.
Regístrate para comentar Ya me he registrado