Convertir la Franja de Gaza en una red de “ciudades verdes y edificios inteligentes alimentados por energías renovables y tecnología moderna”. Es una de las líneas maestras del plan diseñado por Egipto para hacer de la Franja de Gaza “una Dubái del Mediterráneo” tras quince meses de guerra que la han reducido a escombros. Una propuesta alternativa a “la Riviera de Oriente Próximo” lanzada por Donald Trump que los países árabes aprobaron a última hora del martes sin desplazamiento de los gazatíes y con la promesa de llevarla a cabo para 2030 con un presupuesto de 53.000 millones de dólares.
“Un enfoque integrado para reconstruir la Franja de Gaza, sin desplazar a los palestinos comenzando con operaciones de socorro urgentes y una recuperación temprana, que conduzcan al proceso de reconstrucción de la Franja”, esbozó el presidente egipcio Abdelfatah al Sisi en la clausura de la cumbre extraordinaria de la Liga Árabe que adoptó el plan de reconstrucción de la Franja de Gaza presentado por Egipto. Con la presencia de Naciones Unidas, la Unión Europea y la Unión Africana, la propuesta fue debatida en la Nueva Capital Administrativa de Egipto, la urbe que la tierra de los faraones levantó en mitad del desierto al este de El Cairo.
Sin desplazamiento de gazatíes y reconstrucción en tres fases
“Ha llegado el momento de adoptar un camino político serio y eficaz que conduzca a una solución justa y duradera a la cuestión palestina, de conformidad con las resoluciones del derecho internacional. Estoy seguro de que el presidente Trump será capaz de hacerlo, a la luz de nuestro sincero deseo de poner fin a las tensiones y hostilidades en nuestra región”, deslizó Al Sisi a propósito de un plan condensado en 150 páginas y cuyo presupuesto, de 53.000 millones de dólares, protagonizará el próximo mes una conferencia de donantes. “Es un plan que preserva el derecho del pueblo palestino a reconstruir su patria y garantiza su supervivencia en su tierra”, aseguró Al Sisi.
Frente al plan de Trump de hacerse con el control del enclave palestino, expulsar a sus dos millones de habitantes y convertirlo en “la Riviera de Oriente Próximo”, Egipto propone al republicano una Franja en la que permanezcan los palestinos, incluso durante su fase de reconstrucción. “Los elementos clave de la propuesta son la reconstrucción total de Gaza y el plan para que un gobierno palestino gobierne Gaza. Fundamentalmente, la reconstrucción se llevará a cabo sin desplazar a ningún palestino, en oposición al plan de Trump y Netanyahu. La propuesta también aboga por un gobierno palestino provisional de tecnócratas que gobierne Gaza hasta que la Autoridad Palestina esté preparada para hacerlo”, señala a El Independiente el analista palestino Muhannad Ayyash.
Gaza en 2030
El plan ideado por Egipto establece una suerte de canon para el futuro de Gaza: 1) fachadas de piedra clara, con el uso de caliza u hormigón blanco para "reflejar el carácter local de la arquitectura árabe y ayudar a reducir la absorción de calor, lo que contribuye a mejorar la eficiencia energética de los edificios"; 2) grandes arcos de cristal para reforzar "un carácter islámico distintivo y ayuda a que entre la luz natural de forma eficiente, minimizando la necesidad de iluminación artificial durante el día"; 3) pasillos y patios abiertos "inspirados en el diseño tradicional de las madrasas [escuelas coránicas] y los edificios religiosos del mundo islámico"; 4) integración con el entorno natural a través de árboles y plantas autóctonos y espacios verdes; y 5) patios multiusos como "zona de reunión".
Primera fase
Durante la primera de las tres fases, de seis meses de duración y un coste estimado de 3.000 millones de dólares, se procederá a la retirada de escombros del eje central (carretera Salah al Din) y otras zonas de Gaza, “transportando los desechos a lugares de recogida costero”; la preparación del eje oriental como corredor de reconstrucción; la llegada de 200.000 unidades de vivienda temporal prefabricadas para alojar a 1,2 millones de personas y el inicio de las reparaciones de 60.000 viviendas parcialmente dañadas, con el objetivo de alojar a 360.000 personas.
Durante este medio año, la Autoridad Palestina (AP) supervisará la gestión de la reconstrucción a través del bautizado como “Comité de Administración de Gaza”, compuesto por tecnócratas y miembros no partidistas, que operarán bajo el paraguas del gobierno palestino con sede en Ramala. Es el paso previo al regreso completo de la AP a Gaza. “Lo que no está claro es si Fatah y Hamás formarían un liderazgo unificado en la nueva Autoridad Palestina”, señala Ayyash.
A juicio de Yusuf Can, coordinador del programa de Oriente Medio del think tank Wilson Center, la gobernanza de la Franja es uno de los escollos que alimenta los recelos sobre la posibilidad de llevarse a cabo. “Hamás no participaría en la gobernanza diaria de Gaza; en su lugar, un comité de funcionarios y notables, supervisado por representantes de los Estados árabes, gestionaría el territorio. Sin embargo, el plan aún no esboza una estrategia clara para eliminar o desarmar a Hamás, lo que probablemente lo haría inaceptable para Israel, Estados Unidos y la UE”, arguye. “Arabia Saudí es partidaria de expulsar de Gaza a los dirigentes de línea dura de Hamás, pero cree que puede ser necesario colaborar con los elementos moderados del grupo. Por el contrario, los EAU adoptan una postura más intransigente e insisten en una revisión completa de la Autoridad Palestina en Cisjordania”, añade.
Segunda fase
La segunda fase, en cambio, se prolongaría durante dos años con un coste de 20.000 millones de dólares. En este lapso de tiempo se concluiría la retirada de escombros; la restauración de 60.000 unidades parcialmente dañadas; la construcción de 200.000 nuevas viviendas permanentes para alojar a 1,6 millones de personas y la rehabilitación de 80.930 hectáreas de tierras agrícolas así como la puesta en marcha de infraestructuras esenciales, como electricidad, telecomunicaciones y edificios de servicios con dos plantas desalinizadoras o plantas de tratamiento de aguas residuale
El plan preparado por Egipto con el apoyo de los países árabes -que será sometido ahora al examen de países de mayoría musulmana como Indonesia o Turquía- vende una reconstrucción que sea “una combinación de auténtica identidad palestina y desarrollo urbano moderno, logrando un equilibrio entre autenticidad y contemporaneidad y respondiendo a las necesidades sociales, económicas y medioambientales de la población”. “Se ha adoptado un diseño arquitectónico moderno inspirado en la identidad islámica y árabe, apoyándose en elementos arquitectónicos tradicionales combinados con métodos de construcción modernos para garantizar la sostenibilidad y el confort medioambiental”, esboza el plan, que imagina la Gaza de 2030 como un enclave de urbanismo ordenado y zonas verdes.
De hecho, el plano diseñado divide el territorio en cinco sectores: Rafah, limítrofe con Egipto, para el centro logístico; Jan Younis para el centro de Ciencia y Conocimiento; Deir al Balah para el Centro Al-Salam; la ciudade Gaza para la sede del Gobierno; y el norte de Gaza para el centro cultural. Se contemplan zonas residenciales de baja densidad -con viviendas unifamiliares provistas de amplios espacios verdes-; media -edificios de mediana altura-; y alta -edificios de gran altura cerca de centros comerciales-. Sobre una geografía hoy devastada se han diseñado, además, instalaciones educativas como escuelas, hospitales y centros culturales e incluso zonas recreativas y turísticas para un territorio que ha padecido lustros de bloqueo por mar, tierra y aire.
Tercera fase
La tercera fase, de dos años y medio con un presupuesto de 30.000 millones de dólares, incluiría el desarrollo de infraestructuras e instalaciones de servicios; la construcción de 200.000 viviendas permanentes adicionales para alojar a 1,2 millones de personas; el desarrollo de una zona industrial de 243 hectáreas y la construcción de dos puertos, el aeropuerto internacional de Gaza y la primera fase de la carretera costera (carretera Al Rasheed) a lo largo de 10 kilómetros.
Su puesta en escena, con imágenes del futuro de Gaza generadas por Inteligencia Artificial, suscita tantas dudas como la propuesta del magnate. “El plan árabe para Gaza se propuso en respuesta al plan de Donald Trump para que Estados Unidos tomara el control del territorio, expulsara a los habitantes palestinos y lo reurbanizara como si fuera una propiedad en primera línea de playa en Miami. El plan de Trump no sólo es inmoral e ilegal, sino también inviable pero el árabe tampoco es serio, y probablemente seguirá el camino del plan de Trump”, pronostica en declaraciones a este diario James Gelvin, profesor de Historia Moderna de Oriente Próximo de la Universidad de California.
Es poco probable que los israelíes acepten un plan que no aborde su objetivo bélico fundamental: la destrucción de Hamás
“El plan árabe alternativo es innecesario. Prevé la inversión de 53.000 millones de dólares en Gaza, que serán administrados por un gobierno tecnocrático temporal no perteneciente a Hamás. Hamás ya ha rechazado el plan, pero aunque no lo hiciera el plan no iría a ninguna parte por dos razones”, esboza Gelvin.
“En primer lugar, es poco probable que los israelíes acepten un plan que no aborde su objetivo bélico fundamental: la destrucción de Hamás. Netanyahu necesita mantener por delante la destrucción de Hamás o, de lo contrario, es probable que su gobierno se derrumbe y él acabe en la cárcel. La segunda razón por la que el plan árabe está condenado al fracaso es que el problema fundamental que hay que abordar no es la reconstrucción de Gaza. El problema fundamental es político: el Estado palestino. Sólo cuando haya una solución política podrá haber una solución económica. Los dirigentes árabes, actuando con cinismo, pondrán su plan sobre la mesa y parecerán razonables y firmes en su apoyo a los palestinos. Mientras tanto, la pelota volverá a estar en el tejado estadounidense y israelí. Y la guerra continuará, con cada bando culpando al otro de la ruptura del alto el fuego”, concluye.
Te puede interesar
Lo más visto
- 1 Cuidado con el nuevo bulo de WhatsApp y los "nuevos emojis"
- 2 Marruecos concede a Israel la exploración de gas en Sáhara
- 3 RTVE confirma día y hora del final de 'La Moderna' y una muerte
- 4 Estos son los posibles sucesores del Papa Francisco
- 5 El marqués de Lises, el buscador de tesoros que seduce a Madrid
- 6 García Ortiz puede quedarse en el cargo si le abren juicio oral
- 7 El entramado de los socios del 'narcopolicía': frutas, inmobiliarias y ropa
- 8 El diablo de Tasmania y el secreto de la supervivencia al cáncer
- 9 Los ginecólogos recomiendan usar geles íntimos como Cumlaude Lab o Suavinex para cuidar la salud sexual femenina