Hamás confirma haber mantenido desde hace semanas conversaciones directas en Doha, la capital de Qatar, con la administración Trump para abordar la liberación de los rehenes de nacionalidad estadounidense que mantiene en su poder la organización islamista palestina. Su confirmación marca los primeros encuentros directos desde que Washington designara como organización terrorista al grupo en 1997.

En concreto, la oficina política de Hamás ha celebrado desde hace semanas conversaciones directas con el enviado especial del presidente estadounidense Donald Trump para asuntos de rehenes, Adam Boehler, en Doha, donde residen parte de la cúpula del movimiento que controla la Franja de Gaza y donde se han producido las negociaciones del alto el fuego entre Israel y Hamás con mediación qatarí y egipcia.

Las conversaciones hasta ahora clandestinas con Hamás fueron conocidas por Israel a través de otros canales y de Estados Unidos, según el diario Axios. La Casa Blanca ha reconocido, tras la información difundida por Hamás, que "consultó a Israel las negociaciones con Hamás". La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, ha manifestación en relación con las negociaciones con Hamás: "El enviado especial que participa en esas negociaciones tiene autoridad para hablar con cualquiera. Israel fue consultado al respecto. Dialogar y hablar con gente de todo el mundo para hacer lo que redunda en interés del pueblo estadounidense es algo que el presidente ha demostrado que cree que es lo correcto para el pueblo estadounidense".

Aunque el enfoque principal de las conversaciones ha sido la liberación de los rehenes estadounidenses, también han incluido discusiones sobre la liberación del resto de los rehenes, en mitad de la incertidumbre sobre la continuación del alto el fuego.

Israel asegura que pudo frustrar los contactos

Las seis semanas de la primera fase de la tregua expiraron el pasado fin de semana sin que hayan avanzado las conversaciones para una segunda fase que debía conducir a "una calma sostenible" en la Franja de Gaza tras 15 meses de guerra y más de 48.000 palestinos muertos.

Israel recalca que tenía conocimiento de las negociaciones. Fuentes israelíes citadas por la prensa local insisten que podrían haber frustrado los contactos. "Si queríamos impedir las conversaciones de Bowler en Qatar, teníamos opciones. No tenemos ningún problema con que la administración rescate a tantos israelíes como sea posible, incluso si tienen ciudadanía estadounidense. Estos contactos no cambiarán la dura postura de Trump hacia Hamás", deslizan. "Respecto a la reanudación de los combates no es cuestión de meses, ni de semanas. Si no hay un acuerdo pronto, los combates se reanudarán", advierten en línea con las últimas declaraciones del primer ministro Benjamin Netanyahu.

Washington había evitado hasta ahora las conversaciones directas con Hamás. El Departamento de Estado de EE.UU. catalogó al grupo como organización "terrorista extranjera" en 1997.

El enviado del presidente estadounidense a Oriente Medio, Steve Witkoff, tiene previsto viajar a la región en los próximos días para "buscar la forma de prorrogar la primera fase del acuerdo de alto el fuego en Gaza o avanzar a la segunda", según ha indicado este lunes un portavoz del Departamento de Estado.