La imagen es el mensaje más fuerte de la cumbre de voluntarios convocada por el presidente francés, Emmanuel Macron, en el Elíseo. Los jefes de gobierno de 25 Estados de la Unión Europea, junto con la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, del Consejo Europeo, António Costa, de la OTAN, Mark Rutte, el vicepresidente de Turquía y representantes de Canadá y Australia. En total, 31 países. Todos junto al líder ucraniano, Volodimir Zelenski. Ucrania no está sola frente a Rusia.

Macron y el primer ministro británico, Keir Starmer, van a pilotar la coalición para una paz duradera en Ucrania. Está empezándose a hablar sobre cómo se forma la fuerza que ayude a garantizar la seguridad una vez que se alcance la paz. Y ha dicho que sería una buena noticia que EEUU apoyara este despliegue. Pero Macron ha dejado claro que Rusia no puede decidir sobre cómo se organiza la seguridad de Ucrania ni de Europa. El presidente francés ha remarcado que los europeos han de prepararse para actuar por sí mismos.

"Nuestro objetivo es claro: ganar la paz. Tiene que ser una paz duradera para los ucranianos. Nuestra voluntad es seguir unidos y hacer todo lo posible para construir una paz a través de la fuerza, una fórmula de Donald Trump", ha dicho Macron en la rueda de prensa posterior al encuentro.

Ucrania ha aceptado un alto el fuego incondicional, ha recordado Macron. Por el contrario, Rusia solo ha aceptado altos el fuego parciales y con condiciones. A la vez sigue atacando las ciudades ucranianas. Es decir, Putin no ha contestado a las propuestas de Donald Trump sobre el fin de la guerra. Al contrario, solo plantea exigencias. Por ello, "no es el momento de levantar las sanciones sino que hay que mantener la presión económica".

Sobre las necesarias garantías de seguridad de Ucrania Macron ha mencionado tres vías de trabajo: un ejército ucraniano fuerte y bien equipado cuando acabe la guerra así un equipo franco-británico asesorará al Ejército ucraniano de mañana para disuadir a las Fuerzas Armadas rusas; fuerzas desplegadas sobre el terreno que estarán en sitios estratégicos para evitar un potencial ataque ruso; en tercer lugar, reforzar la propia defensa colectiva de los europeos.

Contrarios a levantar las sanciones

En la misma línea, el primer ministro británico, Keir Starmer, ha dicho que "queda absolutamente claro que Rusia está intentando retrasar la paz, está jugando, y tenemos que ser absolutamente claros al respecto". Starmer ha indicado que los líderes asistentes al encuentro en París están de acuerdo en la necesidad de prestar apoyo a Ucrania "para garantizar que se encuentra en la posición más fuerte posible, tanto ahora como en futuras negociaciones".

Ha dejado claro que "no es el momento de levantar las sanciones", sino al contrario, sería el momento de aumentar la presión sobre Rusia. También ha coincidido con Starmer el canciller alemán en funciones, Olaf Scholz.

Esta nueva cita de la llamada "coalición de voluntarios", a la que ha asistido el presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, se ha planteado con cuatro objetivos fundamentales: continuar la ayuda militar inmediata a Ucrania; cómo alcanzar un alto el fuego sólido y duradero; cómo continuar la ayuda a Ucrania a largo plazo; y el plan sobre el eventual envío de una fuerza militar internacional cuando se alcance la paz. Hay ausecias destacadas: el primer ministro de Hungría, Viktor Orbán,

En las horas previas, Macron habló ante Zelenski sobre la evolución de las negociaciones que promueve Donald Trump con el fin de lograr un alto el fuego en Ucrania. "Rusia no tendrá derecho a opinar sobre el apoyo que estamos prestando y prestaremos a Ucrania, ni establecerá las condiciones", dijo Macron, quien reprochó al Kremlin de establecer exigencias antes de mostrar su voluntad de cumplir con el compromiso de parar los ataques.

También rechazó que los europeos fueran a levantar las sanciones, como pretende Rusia por la puerta de atrás en la Iniciativa sobre el Mar Negro. El Kremlin asegura que la condición previa es que pueda volver a operar el Banco Agrícola a través del sistema SWIFT, algo que depende de la UE, no de EEUU.

"En última instancia, las sanciones dependen únicamente de que Rusia decida agredir y, por tanto, su levantamiento depende únicamente de que Rusia decida cumplir el derecho internacional", afirmó Macron.

El presidente francés ha dicho que hay que esperar lo mejor pero hay que prepararse para lo peor. Es decir, para el escenario de seguir sin EEUU apoyando a Ucrania.